El edificio de Hacienda en A Coruña, ubicado en el número 17 de la calle Comandante Fontanes y con una de sus fachadas en pleno Paseo Marítimo, cumplirá este 2024 cinco años con los andamios y la lona verde que lo ocultan. Lejos de desaparecer a finales de este año, como había vaticinado hace unos meses el Ministerio de Hacienda, continuarán donde están al menos hasta 2026.
Así lo han confirmado las mismas fuentes a este medio, que añaden que esto es debido a que el informe de asistencia técnica para poder seleccionar la mejor opción de sustitución para la fachada no se ha recibido en la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) hasta hace unas semanas. Esto se traduce, según trasladan desde el Ministerio, en que en los próximos meses se redactará el proyecto de ejecución y se solicitará la licencia de obra.
De hecho, está previsto licitar en 2025 para iniciar las obras en 2026. Fuentes de Hacienda concretaron el año pasado que estaba previsto que precisamente en 2023 se redactase el proyecto de sustitución de la fachada del edificio para posteriormente solicitar la licencia y en julio de 2024 iniciar la licitación de la obra cuya ejecución inicialmente se llevaría a cabo a finales de 2024, algo que finalmente no va a ser así.
De este modo, la situación para este inmueble de A Coruña por la que muchos viandantes se preguntan, además de los propios trabajadores, continuará igual durante más tiempo. En estos años ha habido incluso maquinaria en este punto durante algunas temporadas, pero no era muy habitual ver a obreros trabajando. Esto suscitó las incógnitas sobre el estado del edificio y el inicio y final de las obras que se deben llevar a cabo para que la fachada esté a punto.
Asimismo, empleados de la delegación de Hacienda en A Coruña cuentan que hace más de una década se decidió cambiar la fachada antigua (en la que incluso lucía un águila de grandes dimensiones) por la actual, algo que en principio fue normal hasta que parte de las losetas comenzaron a desprenderse, por lo que se colocaron una especie de grapas cuadradas en las esquinas para adherirlas más a la fachada que da al mar.
Mantenimiento con revisiones periódicas
Fuentes del Ministerio de Hacienda han trasladado que la fachada que da al Paseo Marítimo "cuenta con una exposición muy acusada a los agentes atmosféricos (viento, salitre, agua…), que debido a la caída puntual de alguna placa cerámica de las que componen su fachada fue necesario llevar a cabo estudios que analizaran el problema existente".
Estos análisis determinaron la necesidad de proceder a su sustitución y por eso el Ministerio colocó en la fachada en 2019 la lona y los andamios. Desde ese momento defienden que se ha llevado a cabo un programa de mantenimiento de la fachada mediante plataformas elevadoras y revisiones periódicas.