Vecinos de A Coruña muestran lo que es "convivir con un narcopiso": "Inseguridad y miedo"

• Vecinos de A Coruña realizan una cacerolada en contra de un narcopiso de la calle Vizcaya
• ¿Por qué hay narcopisos en A Coruña?

Decenas de personas entran y salen todos los días del portal número 58 de la calle Vizcaya en Os Mallos, A Coruña. Suelen ser visitas rápidas que a menudo no llegan ni a entrar en el edificio. Los vecinos se quejan del ruido, entre otras cosas. "Discusiones, peleas y gritos, día y noche. Tienen un código para comprar droga: un silbido y tres golpes en el contenedor de basura", comenta una de las vecinas afectadas.

Todo apunta a que se trata de un narcopiso. Los vecinos, hartos de la situación, organizaron la semana pasada una cacerolada en protesta por la "inseguridad y el miedo" que esto provoca en el barrio. Se reunieron el jueves pasado, y volverán a hacer lo mismo mañana 6 de junio. A su vez, se han puesto de acuerdo para elaborar un vídeo en el que se muestra lo que es "convivir co narcopiso dos Mallos".

En este video reportaje se muestra cómo decenas de personas acuden a diario a las inmediaciones del edificio en "evidente estado de aturdimiento a causa de las drogas que consumen antes y después de entrar al narcopiso". La presidenta de la comunidad del edificio, que pertenece al grupo de WhatsApp Vecinos del narcopiso cuenta que el continuo trasiego de gente en esas condiciones hace parecer que "hayamos vuelto a los 80".

"Esto solo provoca inseguridad y miedo, justo hoy advirtieron por el grupo de que tengamos cuidado con lo que dejamos en los coches porque están robando", indica. "Discusiones, peleas y gritos día y noche" es lo que se encuentran los vecinos de Os Mallos a las afueras del número 58 de la calle Vizcaya. La vecina afectada asegura que en ese inmueble siempre vivieron personas conflictivas, pero "tan solo daban problemas en ocasiones puntuales": "Rompen las cámaras de los telefonillos y destrozan el interior del edificio".

Esta problemática no solo se da en Os Mallos, otros barrios como Monte Alto, la Sagrada Familia, Cuatro Caminos o el Ventorrillo también protestaron en contra de narcobajos y narcopisos que provocaban inseguridad entre los vecinos. Mismamente, hace un par de semanas la Policía Nacional detuvo a dos personas en una redada realizada en un piso en la Sagrada Familia.