El Juzgado de lo Mercantil número 3 de A Coruña ha reconocido el derecho de tanteo de la Xunta sobre la compra del conjunto de doce murales de Urbano Lugrís ubicados en el interior de dos edificios de la calle Olmos. Además, ha autorizado la dación en pago de estos inmuebles a Redondela Invest SL, la primera empresa que pujó en la subasta. Queda por saber si finalmente la Xunta trasladará los murales al Museo de Belas Artes.

La magistrada ha admitido el derecho de adquisición preferente de la Consellería de Cultura, Lingua e Xuventude, reconocido en el artículo 49 de la Ley 5/2016 de 4 de mayo, del patrimonio cultural de Galicia, para aquellos bienes de interés cultural, pues considera que, en este caso, se dan "todos los requisitos y presupuestos necesarios" para el ejercicio de ese derecho.

Ahora el Gobierno gallego deberá proceder al ingreso de los 36.000 euros ofertados para igualar la oferta de un particular en la cuenta de Depósitos y Consignación del juzgado.

La Xunta incoó el pasado mes de marzo el expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de los murales, situándose así como favorita para hacerse con los frescos. En aquel momento avanzó que el proceso de declaración sería exprés, es decir, apurando los plazos. Y en mayo presentó en el Juzgado la solicitud para ejercer el derecho de tanteo que ahora le ha sido concedido. 

Un día después de que la Xunta incoase el procedimiento de declaración de los murales como BIC, Redondela Invest solicitó a la administración gallega la opción de compra a su favor "para el hipotético supuesto de que la oferta para la transmisión de los Murales de Urbano Lugrís fuese aprobada por el juzgado antes de que se produjese su
declaración como BIC”, según recoge el auto que hoy ha trascendido.

Además, la jueza ha autorizado la dación en pago de los edificios situados en los números 25 y 27 de la calle Olmos de A Coruña, no de los murales, a favor de Redondela Invest SL, la empresa que realizó la puja inicial en la subasta con 30.000 euros. Esta firma es una de las acreedoras de Alameda de Órdenes, propietaria de los inmuebles en los que se encuentran los frescos del artista coruñés. Con la dación de los edificios a favor de Redondela, Alameda saldaría su deuda con esta sociedad, que podría intervenir en las construcciones en el futuro, previsiblemente cuando los murales hayan sido retirados del lugar en el caso de que la Xunta opte por esta medida. 

En el auto, contra el que cabe interponer recurso de reposición, especifica que la realización del bien deberá efectuarse por un valor no inferior al de mercado. Si hubiera remanente, corresponderá a la masa activa y, si no se consiguiese la completa satisfacción del crédito, la parte no satisfecha será reconocida en el concurso.