Mariscadores de la ría de O Burgo en A Coruña demandan a Xunta y Gobierno central que "dialoguen"

Los mariscadores de la ría de O Burgo continúan sus movilizaciones en A Coruña y este viernes se han manifestado frente al edificio de la Delegación de Gobierno, donde han reclamado a la Xunta de Galicia y al Gobierno central que "dialoguen". Este es el lugar en el que seguirán realizando las concentraciones después de que les fuera negada la autorización para cortar el tráfico en puente de A Pasaxe, una acción que llevaban cinco meses realizando semanalmente.

Los mariscadores de O Burgo continúan sus protestas en A Coruña pero sin cortes de tráfico

El colectivo mantuvo este miércoles una reunión con el Delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, quien reiteró la disposición del Ejecutivo a "colaborar al 50% con la Xunta de Galicia". Sin embargo, la Xunta sostiene por su parte que "es una obra elaborada por el Gobierno del Estado y el promotor es el que se tiene que hacer cargo y no están dispuestos a mover ficha", ha explicado el portavoz de la Cofradía de Mariscadores, Manuel Baldomir.

Por ello, demandan a las dos administraciones que "dialoguen". "Las dos reconocen que tienen que darnos una salida pero si está cada una por un lado no se llegará a ningún acuerdo", ha señalado. En ese sentido, a principios del mes de noviembre han convocado un nuevo encuentro al que esperan que acudan ambas.

Mientras tanto, Baldomir ha reiterado que seguirán manifestándose para "hacer visible el problema que tenemos". "Somos los afectados, estamos a verlas venir desde el mes de enero, puesto que los cobros de los meses de febrero, marzo y abril aún no se hicieron efectivos".

A ese respecto se ha referido también a la denegación de la autorización para realizar sus protestas en el puente de A Pasaxe, tal y como venían haciendo desde hace cinco meses. "Seguimos manifestándonos aquí ya que las actuaciones en el puente de A Pasaxe cortando un carril de tráfico nos fue denegada por la subdelegada del Gobierno, algo que nos parece increíble porque la siempre avisábamos con 15 días de antelación y había dispositivo de las fuerzas de autoridad en el lugar", ha detallado. Una decisión que achaca además a la "fuerza" ejercida por el alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane.