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No existe palabra en el diccionario para describir la muerte de un hijo. "Un día estás en esta vida y al otro no", lamentaba Max Luiz, padre del joven asesinado en A Coruña el 3 de julio de 2021. Nadie se esperaba que el destino de Samuel Luiz dependiera de un grupo de bárbaros que buscaron pleito donde no lo había. "Lo que hicieron con mi hijo fue odio, ni a un perro se le deja tirado", rompía a llorar en su declaración. 

Los padres de Samuel abandonaron Brasil para darle a su hijo la mejor de las vidas en España. El pequeño brasileño creció en A Coruña rodeado de cariño y amor. "Mi hijo era una persona con valores. Era un ejemplo de educación dentro y fuera de mi casa", contaba Max ante el jurado. Pero no solo eso, también era su "mejor amigo".

El silencio se hizo en la sala cuando el padre del joven asesinado se pronunció. Tan solo se escuchaban los llantos de un hombre roto de dolor. La madre también estaba llamada a testificar en la primera sesión de esta semana por el juicio de la muerte de Samuel Luiz. "Derrumbada", ella no fue capaz de presentarse en la Audiencia de A Coruña, por lo que Max habló en nombre de los dos.

"Nos lo contábamos todo. Una vez le pregunté por su condición, pero él me dijo: 'Papá, no es el momento'", la familia intuía la orientación sexual de su hijo y la respetaba. Sin embargo, siempre se quiso desvincular de la figura que se atribuyó a su hijo dentro del colectivo LGTBIQ+. "No vendo a mi hijo, que nadie hable por mi familia", quiso dejar claro.

La sala entera se vio abajo

No tiene que ser fácil para un padre sentarse a tan pocos metros de las personas acusadas de matar a tu hijo. Las palabras que salían por la boca del brasileño fueron tan desgarradoras que hasta las partes de la sala se emocionaron. Parte de los acusados se vinieron abajo. Katy Silva no pudo evitar contener las lágrimas escuchando el relato del padre.

Katy Silva emocionada en el juicio por el crimen de Samuel Luiz Quincemil

Max quería dejar claro que su hijo era una persona con valores: "Huía de la violencia y actuaba con respeto". "Siempre me decía que estuviera tranquilo, que no se iba a meter en ningún fregado", indicaba emocionado. Pero claro, quién le iba a decir que se iba a topar con una jauría que no conocía ni sabía de valores. 

Samuel no buscaba pelea la noche en la que lo mataron. "Me quitaron lo que más amaba, nos quitaron un brillo. Nos quitaron todo. No me queda nada", lloraba en la sala al recordar a su hijo. La noche del 3 de julio de 2021 se despidió de su hijo esperando volverlo a ver al día siguiente. Pero nada más lejos de la realidad, la siguiente llamada que recibió fue para decirle que su hijo había muerto, y lo último que se imaginaba es que hubiera sido a manos de unos bárbaros.