Tras meses de inactividad, los números 25 y 27 de la calle Olmos han recibido la visita de dos técnicos de la Xunta de Galicia. Los operarios han pasado la mañana y parte de la tarde analizando las 12 pinturas de Urbano Lugrís y su estado de conservación con el objetivo de realizar un informe encargado por la consellería de Cultura, Lingua e Xuventude.
Fuentes de la consellería de Cultura indican que el Gobierno gallego trabaja en la elaboración de un informe sobre"el estado de los murales y sus necesidades". El estudio podría ser clave para determinar cuestiones como el coste de la restauración o la viabilidad del traslado a otra ubicación, una propuesta que colectivos culturales como O Mural han rechazado en reiteradas ocasiones.
El movimiento de la Xunta llega seis meses después de que se comprometiese a adquirir las obras por 36.000 euros mediante el derecho a tanteo y a "proteger y restaurar el conjunto mural para ponerlo a disposición de la ciudadanía". En este sentido, el Gobierno gallego abrió la puerta a moverlos al Museo de Bellas Artes de A Coruña. La Xunta no anunció nuevos avances al respecto desde el pasado mes de mayo.
Los murales, en estado "crítico"
Los murales de Lugrís han estado olivados en la calle Olmos durante décadas. Con el paso de los años, el polvo, la humedad y otros factores han hecho mella en las pinturas, que se encuentran en mal estado, según el informe encargado por el Concello de A Coruña sobre el estado de los frescos en 2023.
El informe municipal señalaba que de los 12 murales, uno tiene estado supercrítico, dos están críticos, otros dos en estado pésimo o muy malo y siete en regular o malo. Oxidación, grietas, una capa amarillenta, humedad, acidificación, roturas, presencia de escamas o lagunas son algunos de los daños que pueden apreciarse en las paredes del local.
Mientras tanto, el proceso para declarar Bien de Interés Cultural los murales continúa abierto. En marzo de este año se publicó en el Diario Oficial de Galicia la incoación del expediente para facilitar la compra de los murales mediante el derecho a tanteo y retracto. No obstante, la declaración BIC todavía no es una realidad. La Administración cuenta con un plazo máximo de 24 meses para completar el expediente.