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La Junta de Gobierno Local de A Coruña ha dado luz verde a la concesión de la licencia para la sustitución de la fachada del edificio que alberga la sede de la Delegación de la Agencia Estatal de Administración Tributaria en la ciudad. El inmueble, situado en el Paseo Marítimo y con entrada por la calle Comandante Fontanes, comenzará un proceso de renovación que incluye la retirada de la fachada actual y la instalación de una nueva fachada ventilada.

Así lo ha detallado la alcaldesa Inés Rey esta mañana a los medios tras la Junta de Gobierno Local. Y es que los informes técnicos que acompañan el proyecto apuntan a la corrosión sufrida por la fachada debido a la proximidad al mar, al ubicarse este en pleno paseo marítimo, lo que ha provocado un desgaste del edificio.

El coste total de la obra será de más de 4 millones de euros, según ha informado Inés Rey. Asimismo, ha detallado que el proyecto ya cuenta con la validación de la Concesión Asesora del PEPRI (Plan Especial de Protección y Reforma Interior) y que "comenzará con los trabajos de retirada de la capa aislante actual, para dar paso a la instalación de la nueva fachada ventilada".

Los plazos para la ejecución del proyecto son ajustados: la empresa encargada de las obras tiene un plazo de seis meses para iniciar los trabajos, que deberán estar finalizados en un máximo de 20 meses. Esto significa que los ciudadanos de A Coruña podrán ver la renovación de este emblemático edificio en los próximos dos años.

Un lustro oculto tras los andamios

Este 2025 el edificio cumplió cinco años con los andamios y la lona verde que lo ocultan. Lejos de desaparecer a finales de 2024, como había vaticinado el Ministerio de Hacienda, continuarán a lo largo de este año y entrado 2026. 

Fuentes del Ministerio de Hacienda ya habían trasladado el pasado 2024 que la fachada que da al Paseo Marítimo "cuenta con una exposición muy acusada a los agentes atmosféricos (viento, salitre, agua…), que debido a la caída puntual de alguna placa cerámica de las que componen su fachada fue necesario llevar a cabo estudios que analizaran el problema existente".

Estos análisis determinaron la necesidad de proceder a su sustitución y por eso el Ministerio colocó en la fachada en 2019 la lona y los andamios. Desde ese momento defienden que se ha llevado a cabo un programa de mantenimiento de la fachada mediante plataformas elevadoras y revisiones periódicas.