El Servicio Marítimo de la Guardia Civil identificó en Corme una serie de irregularidades durante la descarga de productos pesqueros. Los agentes observaron a un barco descargando las capturas en siete cajas trasladadas directamente a una furgoneta, que se dirigió a un galpón sin pasar por los controles reglamentarios.

La Guardia Civil intervino de inmediato para verificar las capturas e incautar un total de 59 kilos de pescado: 1,5 kg de salmonete, 1kg de cabra, 35 kg de abadejo, 1 kg de huevas y 20,5 kg de merluza. Todos ellos fueron entregados posteriormente al centro benéfico Padre Rubinos.

Los agentes procedieron a denunciar a las personas implicadas en virtud de la Ley de Pesca de Galicia. Entre los cargos se incluyen incumplimiento del pesaje, transporte de productos pesqueros sin documentación preceptiva y almacenamiento de dichos productos sin trazabilidad ni documentación que los ampare.