La Fiscalía de Medio Ambiente ha abierto diligencias por la crisis de los pellets de plástico que está afectando a las playas de Galicia. Las costas gallegas se han visto afectadas desde el pasado 13 de diciembre por la pérdida de mercancía de seis contenedores por parte de un buque que navegaba cerca de Viana de Castelo, en el norte de Portugal.

La Xunta por el momento mantiene el nivel 1 de alerta ante esta situación. Por su parte, el Gobierno de España ha trasladado que está a la espera de que la Xunta "ejerza su competencia" y declare el nivel 2 de emergencia con el fin de poder brindarle "apoyo efectivo" en la recogida y limpieza de los pellets

La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, se reunió con el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, para trasladarte este ofrecimiento, pero señaló la necesidad de que el ejecutivo gallego active el nivel de emergencia 2, que está destinado a "emergencias de especial vulnerabilidad".

Cruce de acusaciones entre Xunta y Gobierno

El pasado domingo se celebró la comisión técnica de seguimiento de la situación. El conselleiro do Mar, Alfonso Villares, ha pedido "calma" y ha criticado que el Gobierno central no haya trasladado datos sobre la incidencia, manteniendo que las comunicaciones con el Ejecutivo sobre las llegadas de los pellets datan de los días 3 y 4 de enero.

El Gobierno de España ha negado las declaraciones del conselleiro y ha asegurado que el jefe de servicio de Salvamento Marítimo de Fisterra comunicó el 20 de diciembre al subdirector del servicio de Gardacostas la llegada de los pellets de plástico a la costa gallega.

Críticas de la oposición

La candidata y portavoz del BNG a la presidencia de la Xunta, Ana Pontón, criticó durante un acto la gestión que está haciendo la Xunta de una situación que definió como "catástrofe" y tildó la gestión de "marea de mentiras y ocultación del PP". La nacionalista también se mostró crítica con el Gobierno central por esta situación.

Por otro lado, el candidato socialista, José Ramón Gómez Besteiro, criticó al presidente de la Xunta por esta problemática, la cual comparó con la catástrofe del Prestige: "Oculta explicaciones sobre este desastre ecológico y no está coordinando los trabajos de los que es el único responsable, a pesar de que yo ya le apunté soluciones".

Marta Lois, candidato de Sumar Galicia, también se ha sumado a las críticas: "Llevamos un mes con un vertido de pequeños plástico ante la inacción y falta de transparencia del PP y del señor Rueda, que no activó el plan de contingencia, que de es de competencia autonómica, hasta hace pocos días".

Cronología de la crisis de los pellets

El Gobierno también ha remitido una cronología en la que relata que el 13 de diciembre empezaron a llegar al litoral de Ribeira (A Coruña) sacos llenos de pellets de plástico y también pellets dispersos.

Afirma que la primera alerta que recibió el Ejecutivo le llegó a través de la Xunta, en concreto de los servicios del 112 Galicia, que son los que trasladan la información al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. Simultáneamente, apunta que los vigilantes de la Demarcación de costas del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, llevaron a cabo labores de vigilancia de la costa afectada.

El Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de Fisterra abrió de inmediato una investigación para determinar el origen del vertido y las primeras evidencias apuntaron ya a que podría tratarse del contenido de un de los seis contenedores que había perdido el buque ‘Toconao’ (bandera de Liberia – IMO 9627899), el 8 de diciembre, a unos 80 kilómetros al oeste de Viana do Castelo (aguas de responsabilidad lusa).

El 20 de diciembre, el abogado de los armadores del buque reconoció los hechos al centro de coordinación de Salvamento Marítimo, según indica el Gobierno. Explicó que habían contratado técnicos especializados para el seguimiento del vertido y se puso a disposición para el pago de los costes de las labores de limpieza. Ese mismo

Mil sacos de pellets

Añade que el 4 de enero el abogado de los armadores del buque estimó que el contenedor accidentado albergaba mil sacos de pellets; y también informó de que no tienen constancia de si el contenedor se hundió o no, por lo que desconocen la cantidad exacta de sacos que componen el vertido. A este respecto, determinan desde el Gobierno que se solicitó a las autoridades portuguesas que aportasen toda la información en un informe final de las actuaciones realizadas.

El Gobierno de España remarca que está realizando "un seguimiento exhaustivo del incidente" y especifican que es mediante imágenes satelitales y vigilancias aéreas programadas por la Dirección General de Marina Mercante, que no detectaron ninguna mancha. Además, desde la demarcación de costas en Galicia, y por lo que se refiere a la situación en el litoral, se apunta que se contactó desde el primer momento con los ayuntamientos afectados para la retirada de los pellets (Ribeira y Porto do Son en diciembre y Muros en enero).

También se defiende que se realizaron "vigilancias constantes de la zona", constatando que el incidente hasta el 5 de enero había sido "puntual (tres ayuntamientos), aunque la retirada de restos puede ser "muy laboriosa".

Los pellets aumentan

Muchos están tildando el problema de los pellets como un "nuevo Prestige" y estos materiales están contaminando la costa gallega, principalmente algunos puntos de las Rías Baixas y de la ría de Muros y Noia, además de algunos arenales de A Coruña ciudad como O Portiño o As Lapas o la playa de Mera en Oleiros (A Coruña).

Los ayuntamientos Outes (playas de Broña y Siavo presentaban restos de estos plásticos) y de algunas localidades de la Mariña lucense (Burela, Foz…) también han notificado la aparición de pellets, algo que también ha denunciado la Asociación Noia Limpa. Además, también han sido avistados estos materiales en Fisterra.

Los plásticos de 5 milímetros de diámetro que están invadiendo las costas de la comunidad se utilizan para la fabricación de todo tipo de productos, pero su reducido tamaño hace que sea muy complicada su recogida una vez que se mezclan con la arena. Los ecologistas alertan de que estos materiales no se descomponen, sino que se van degradando poco a poco y convirtiéndose en microplásticos y nanoplásticos que ingieren todos los animales, lo que hace que acaben consumidos por humanos.

Los gallegos se organizan para limpiar

La ciudadanía gallega está respondiendo a la ‘marea blanca’ de pellets que baña las playas de Galicia desde hace unos días. Decenas de personas salieron en el día de ayer por la mañana a diferentes arenales de la comunidad para colaborar en la limpieza de los mismos.

La lista de zonas afectadas por la llegada de micro plásticos continúa creciendo día a día. Aunque las zonas más afectadas son las Rías Baixas y la ría de Noia y Muros, la Costa da Morte, la Mariña Lucense, A Coruña y Ferrolterra.

En redes sociales particulares y asociaciones ambientales han comenzado a movilizarse y a coordinarse para conformar grupos de trabajo en diferentes playas de la comunidad. A raíz de una iniciativa popular, se ha creado una base de datos con playas en la provincia de A Coruña y Pontevedra en la que se detalla el día y la hora de la limpieza.