Este 18 de febrero Galicia descubrirá quién es su nuevo/a presidente de la Xunta para, si todo sigue el curso natural, los próximos cuatro años. A la cita con las urnas estarán convocados, ejerciendo su derecho a voto, todos los ciudadanos gallegos mayores de 18 años, tal y como dice la ley. 

Esto hará que personas de muchas generaciones distintas se junten en los 2.350 colegios electorales de toda Galicia con un mismo objetivo: elegir quién quiere que sea su representante.  

Dicen que la edad te cambia y que con los años las cosas se viven diferente pero, ¿es realmente cierto lo que dicen? ¿Son tan diferentes las visiones de las distintas generaciones? ¿Se pierda la esperanza en la política con los años? 

En Quincemil nos hemos propuesto responder a todas estas preguntas. Por ello, hemos hablado con personas de tres generaciones distintas para saber cómo afrontan este 18F, cuánta confianza tienen en nuestros políticos y qué esperan de estas elecciones.  

¿Qué visión tienen de la política? 

Lorena Garea y Carlos Couceiro tienen 28 y 21 años respectivamente. Ellos forman parte de la Generación Z, donde se incluyen los nacidos entre 1994 y 2010. Protagonistas, en primera persona, de la expansión masiva de internet. Para Lorena la política vive un momento complicado, pues “los políticos muchas veces no cumplen  sus promesas”.  

Asegura que “no se siente representada por los partidos en su totalidad”, por lo que opta por votar a aquellos que “más se asemejan a sus ideales”. Aunque hay algo que tiene claro: “me parece impensable no ir a votar. Estas decidiendo sobre el futuro de tu ciudad, sobre quién crees que debería ser presidente de la Xunta”.  

Víctor Rodríguez y Helena Álvarez son del mismo año y tienen 48. Pertenecen a la Generación X, que reúne a los nacidos entre 1969 y 1980. Los mismos que pasaron por la crisis del 73 y por la transición española. Para él los partidos cada vez miran más por sus intereses y menos por los de la ciudadanía: 

“Todo es muy complicado. A nivel nacional tenemos unos partidos progresistas dependientes de un bloque independentista catalán y vasco a los que les da igual la carne o el pescado con tal de conseguir sus propósitos partidistas. Y a nivel autonómico tenemos un gobierno que lleva ahí años y años sólo por unas siglas, sin ningún mérito”.  

Por último, Ángeles Señoría y José Manuel Gosende, de 58 y 65 años, pertenecen a la Generación Silenciosa, formada por aquellos nacidos entre 1930 y 1948, los apodados “niños de la posguerra”, que sufrieron las dramáticas consecuencias de la guerra civil española. Tal vez por eso, ninguno se plantea no ir a votar: “claro que vou, que fago senón?”, se pregunta Ángeles.  

¿Confían en la política?  

Pese a la complicada situación que atraviesa la política de nuestro país, algunos, como Víctor, todavía mantienen la esperanza: “siempre hay que mantener la esperanza en la política y en los políticos al fin y al cabo son los que manejan nuestro presente y debaten sobre nuestro futuro”. Aunque reconocen estar preocupados: “ahora mismo hay 0 política, el 100% son intereses individuales”, explica Helena.  

La Generación Z, en la que se encuentran Lorena o Carlos Couceiro, mira a los políticos con todavía más desconfianza. Lorena cuenta que, que prometan y prometan y nunca cumplan la hace sentirse “engañada”. Carlos, se siente totalmente desesperanzado: “somos un país sin industria, sin futuro y sin esperanza de que nada cambie”.  

En el caso de Ángeles o José Manuel, apenas queda confianza: “Paréceme todo un mamoneo, non confío nada. Con este panorama que vou esperar das eleccións? Nada”, explica él.  

¿Qué esperan de estas elecciones?  

Independientemente de que salga escogido el partido al que votan, todos tienen claro qué les gustaría que hiciera el nuevo/a presidente de la Xunta. Carlos y Helena apuntan a la economía, deseando que el nuevo gobierno apueste por la “reindustrialización de Galicia” y también por la “bajada de la inflación”. 

Lorena, maestra de Educación Infantil, espera que las elecciones ayuden a mejorar la educación, pero también a combatir la crisis de los ‘pellets’: “a día de hoy lo que más me preocupa y lo que es noticia son la llegada de los pellets a nuestras playas. Deberían ayudar o facilitar la búsqueda de una solución para este problema y, sobre todo, prevenirlo”.  

Víctor, por su parte, considera la sanidad lo más prioritario: “es necesario reducir las listas de espera en sanidad. Hacer un frente común para defender los intereses de Galicia donde sea necesario”.  

Y Ángeles confía en que las elecciones “melloren algo a cousa”, aunque poca fe le queda viendo la “horrosa situación de la política”, tanto autonómica como nacional. Para ella, igual que para José, las prioridades están claras: “mirar pola sanidade e mellorar as carreteras”.  

Cada generación tiene sus vivencias y particularidades pero, sus intereses no son tan diferentes como pueda parecer. Las tres generaciones comparten su preocupación por el estado de la política actual, en la que algunos tienen más esperanza que otros, y piden al nuevo/a presidente de la Xunta, principalmente, mejoras sociales.  

Lo que sucederá el 18 de febrero nadie lo sabe, pero todos, independientemente de su generación, intentarán aportar su granito de arena tratando de escoger a quien, consideran, mejor liderará Galicia.