La segunda y última jornada del debate de investidura de Alfonso Rueda como presidente de la Xunta de Galicia arrancó este jueves con el turno de la oposición. El primero en tomar el turno de palabra fue el portavoz de Democracia Ourensana, Armando Ojea, quien comenzó su intervención recordando que la provincia de Ourense está discriminada e instó al presidente en funciones a que el nuevo gobierno autonómico tenga en cuenta a Ourense.
La sanidad encabezó las demandas del diputado ourensano, quien solicitó más servicios sanitarios y reforzar los hospitales comarcales. En cuanto a infraestructuras, instó al gobierno gallego a asumir las vías de titularidad autonómico o a mejorar los polígonos industriales. Más árboles para combatir el cambio climático, la problemática de los jabalíes y acercar Santiago a Ourense completaron el discurso de Ojea, quien finalizó confirmando su abstención.
Los cinco acuerdos de país de Besteiro
"Nada justifica invalidar y destruir la vida de una persona por un motivo político", así comenzó el portavoz del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, quien durante los 35 minutos que duró su discurso mantuvo un tono tranquilo y pausado. Besteiro, que se estrenaba en el Parlamento gallego, reconoció la legitimidad de Alfonso Rueda como presidente pero anunció que el voto de su partido sería negativo y se comprometió a hacer oposición a este gobierno, a hacer una "política vigorosa pero limpia".
El portavoz del PSOE acusó al presidente en funciones de tener un gobierno conformista, que no consiguió ninguna competencia en los últimos 15 años y aseveró que "mal comeza unha lexislatura cando hai que buscar inimigos para autodefinirse”.
El socialista ha propuesto cinco acuerdos de país en vivienda, sanidad, economía, impulso del gallego y financiación local para "avanzar" y "paliar los déficit". En cuanto a vivienda, Gómez Besteiro recordó la dificultad que supone para los jóvenes acceder a una vivienda y propone un plan de vivienda, con la construcción de "2.500 viviendas públicas al año, plan de rehabilitación, duplicar el bono de alquiler o declarar zonas tensionadas".
Para sanidad, ha propuso un plan extraordinario de contratación de profesionales sanitarios con el que blindar la sanidad pública. El tercer acuerdo pasa por un ecosistema económico conformado por mejores políticas energéticas, más ambición para las energías renovables y apoyos para las pequeñas y medianas empresas. Los dos últimos puntos incluyen un acuerdo de defensa del gallego y un gran acuerdo local, que termine con los problemas de financiación y delimitación de competencias.
El socialista le preguntó a Rueda "para qué quiere ser presidente" y le puntualizó que Galicia "merece un presidente y un gobierno con ambición de construir país". Gómez Besteiro también dejó claro que "discreparemos con el Gobierno del Estado cuando creamos que está justificado" y que "entre Galicia y el PSOE, no dudará en elegir Galicia y los intereses de los gallegos y gallegas".
Ana Pontón propone un pacto de país con cuatro asuntos prioritarios
"Aínda hai moita discordia, odio e violencia. Unha mínima preocupación polos demais bastará para hacer do mundo un lugar mellor. Os heroes son os que constrúen a paz". Con esta cita de Nelson Mandela comenzaba la portavoz del BNG, Ana Pontón, quien arrancó su intervención condenando el genocidio de Palestina y anunciando que su partido llevará al Parlamento gallego una iniciativa para romper relaciones con Israel.
La sanidad encabezó las críticas de la líder del BNG, que señaló que hay "11.000 nenos e nenas sen pediatra" o "9.000 persoas" esperando la primera consulta de psiquiatría. Pontón cargó también contra el presidente electo por promover la privatización de residencias y defendió un sistema público de residencias.
En clave industrial, Pontón le pidió a Rueda que explicara porque Galicia pierde "27.600 empregos" en el sector industrial y lo instó a que deje de "abrazarse a Iberdrola, Naturgy, Endesa, Greenalia e traballe a favor das familias e a clase traballadora".
La portavoz del BNG acusó al presidente en funciones de colocar una "bomba ambiental no rural galego", en referencia a Altri, que considera un golpe mortal al sector agroganadero de Arzúa- Ulloa y contaminación para el río Ulla y la ría de Arousa, en la que desemboca. "Industrializar si, pero contaminar Galicia e hipotecar o futuro deste país, non", aseveró Pontón.
Pontón también afeó a Rueda que en 15 años no consiguiera ninguna nueva competencia y destacó que su partido consiguió rebajas históricas en los peajes o conseguir el mismo trato en la condonación de la deuda.
Frente a las críticas, Ana Pontón le propuso al presidente de la Xunta en funciones un pacto de país conformado por cuatro asuntos prioritarios: sanidad, acceso a vivienda, modelo energético y regeneración democrática.
En sanidad proponen blindar el financiamiento de atención primaria, un nuevo modelo de atención primaria, garantizar que todos los niños tengan pediatra y convocar todas las plazas vacantes en el Sergas.
En cuanto a vivienda, los nacionalistas proponen la compra masiva de vivienda vacía con 500.000 inmuebles desocupados, 90.000 de ellos en las siete grandes ciudades.
La tercera prioridad es el modelo energético, donde proponen crear una empresa 100% pública de energía abierta a la participación de los concejos, así como una tarifa eléctrica gallega que permita rebajar la luz a las gallegas y gallegos. El cuarto pacto es la regeneración democrática, donde piden garantir el pluralismo en los medios públicos, respetar el Parlamento gallego y más transparencia.
Ana Pontón finalizó asegurando que el BNG actuará como gobierno alternativo y deseándole a Rueda aciertos como presidente "porque máis aló das nosas discrepancias, os seus acertos redundarán en beneficio de Galiza".
El PPdeG insta a la oposición a "asumir donde los colocaron" los gallegos
El portavoz parlamentario del PPdeG, Alberto Pazos, ha reivindicado los resultados obtenidos porAlfonso Rueda el pasado 18 de febrero e instó a la oposición a "asumir donde los colocaron" los gallegos en los últimos comicios autonómicos y a hacerlo con "respeto" a las decisión de la ciudadanía y con vocación de "utilidad".
Aunque se ha mostrado escéptico en vista de la actitud que, a su juicio, han expresado los portavoces de la oposición en este debate. "Parece que fuese una continuación inmediata del último pleno de diciembre y nada hubiese pasado: mismo tono, misma crítica, mismos asuntos y misma demagogia", afeó Pazos.
Pero ha subrayado que, pese a los "tediosos y demagógicos mantras de la oposición" y el "discurso cenizo gris pontoniano" que ha identificado con un "intento desesperado de soslayar acontecimientos muy relevantes para el devenir" del Parlamento gallego, el 18F fue "una fecha muy relevante: en la que los gallegos decidieron el modelo de país que desean y decidieron quién debe liderar Galicia, Alfonso Rueda".