La Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a cinco años de cárcel a un hombre por abusar sexualmente y de forma continuada de su hija menor de edad, a la que debe indemnizar con 6.000 euros por daños morales.

A ello se suma la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 500 metros y de comunicarse con ella durante seis años; ocho años de libertad vigilada al salir de prisión; y la inhabilitación durante nueve años para ejercer cualquier profesión u oficio que conlleve contacto regular con menores de edad. El fallo todavía no se considera firme, ya que cabe la presentación de un recurso.

Se ha considerado probado que desde el año 2018 y hasta octubre de 2021, cuando la víctima y su hermana se encontraban en el domicilio de su progenitor como parte del régimen de visitas establecido, el procesado le realizó tocamientos de forma reiterada.

Los jueces han querido destacar que el testimonio de la madre constituye "una corroboración clara, un sustento absoluto del testimonio de la niña" y que "no hay más que ver la grabación de su declaración ante la jueza de instrucción para darse cuenta de que estaba absolutamente desbordada por la situación y culpabilizándose por lo ocurrido, por no haberse dado cuenta antes de lo que le había venido sucediendo a su hija, y dando absoluto crédito a lo que esta le contara".