Galicia tiene a fecha 1 de enero de 2021 2,7 millones de habitantes, un 5,69% de los 47,4 millones de toda España. La comunidad autónoma gallega es la quinta más poblada de todo el territorio español, pero está lejos del peso que tienen las cuatro que están por encima. Valencia, la cuarta, tiene un 10,64% de la población española, Madrid un 14,29%, Cataluña un 16,40% y Andalucía un 17,84%.
Hoy en día solamente 1 de cada 18 españoles es gallego, pero esto nunca había sido así. Durante siglos Galicia fue la región más densamente poblada de todo el territorio español, una auténtica reserva de recursos humanos que ha ido poco a poco perdiendo peso en el conjunto del país, primero debido a la emigración masiva desde el siglo XIX, y recientemente por la caída de la natalidad y la poca emigración que ha recibido en las últimas décadas.
Cuando las cuatro provincias gallegas estaban en el top 10 español
En 1787 se realiza el primer censo considerado fiable de la historia de España, el llamado Censo de Floridablanca, y el peso demográfico de Galicia es abrumador. Las cuatro provincias gallegas eran lugares muy densamente poblados y tremendamente rurales. Solamente tres localidades gallegas superaban los 10.000 habitantes (Ferrol con 24.993 debido a la base de la Armada, A Coruña con 13.500 y Santiago con 15.600), y el resto era un mar de aldeas y pueblos cubriendo exhaustivamente todo el territorio gallego. Más o menos como ahora, pero llenos de gente.
A Coruña era la provincia más poblada de España con sus 426.539 habitantes (la provincia moderna, no la que era en el momento del censo, cuando Galicia estaba dividida en siete), superando ampliamente a las de Madrid, Barcelona y Valencia, y eso que la ciudad herculina era poco más de un pueblo y las otras contaban con 165.000, 100.000 y 93.000 habitantes respectivamente. Más meritorio resulta el caso de Pontevedra, sin ninguna localidad con más de 5.000 habitantes (Pontevedra tenía 4.014 y Vigo 2.933), que era la provincia más densamente poblada de España y la quinta con más habitantes, con 332.155 personas. Lugo era la sexta (307.329), y Ourense (289.376) la décima.
En conjunto, Galicia sumaba 1.355.299 habitantes y suponía el 13,02% de toda la población española, que tan solo era de 10.409.879 personas según este censo de 1787-1789. Uno de cada ocho españoles era gallego. La única región con más población que Galicia era Andalucía, con 1.849.833 habitantes en sus ocho provincias, suponiendo un 17,76% de toda la población nacional, un porcentaje casi idéntico al 17.84% que representa en estos momentos.
Andalucía ha logrado mantener su peso demográfico en estos dos siglos y medio, pero Galicia ha bajado del 13,02% al 5,69%. Los números no entienden de sentimientos, aunque es imposible ser gallego y no lamentarse al saber que, si Galicia hubiese mantenido ese mismo peso en el conjunto de España, ahora la comunidad tendría 6,12 millones de habitantes. Los 2,7 millones que la habitan son menos de la mitad.
Lugo y Ourense tienen ahora casi la misma población que en 1787
El caso de las provincias de Lugo y Ourense es especialmente sorprendente, ya que en 1787 la primera contaba con 307.329 habitantes y la segunda con 289.376, cifras que son solo ligeramente inferiores a las respectivas poblaciones actuales de ambas provincias. En estos momentos la provincia de Lugo cuenta con 327.946 habitantes (un 6,7% más) y la de Ourense con 306.650 (un 5,9%), apenas unos miles más que hace 250 años. En comparación, la población de España ha aumentado un 358%.
Mejor suerte han tenido las provincias de A Coruña y Pontevedra, que han crecido en población bastante más que sus vecinas. A Coruña subió de 426.539 a 1.121.815 habitantes, un crecimiento del 163%, pero ha pasado de ser la provincia más poblada a ser la duodécima. Pontevedra ha pasado de 332.155 a 945.408, un incremento del 184%.
La lenta decadencia demográfica de Galicia
El 13,02% de peso demográfico de Galicia sobre España en ese primer censo moderno es el máximo que la comunidad ha tenido jamás en la historia documentada. En los siguientes censos Galicia comienza un declive demográfico. La población aumenta junto con la de toda España y el resto del mundo desarrollado, pero lo hace a menor ritmo debido a la altísima emigración al resto de España y a América Latina.
El primer censo oficial de la España moderna es de 1857 y muestra un panorama similar al de 1787, pero en estos 70 años Barcelona y Valencia adelantan a A Coruña como provincias más pobladas de España. El país sube hasta los 15.464.340 habitantes, y de ellos 1.776.879 son gallegos, el 11,50%, todavía uno de cada nueve. A Coruña es la tercera provincia más poblada, Pontevedra la novena, Lugo la décima y Ourense la dieciséis.
En aquel momento Galicia sigue siendo la región más densamente poblada y la segunda con mayor población (tras Andalucía). Cataluña ya es la segunda más densamente poblada y la tercera en población (1.652.291). En aquel momento, 1857, la emigración de gallegos a América lleva ya unos años en marcha, pero será en la segunda mitad del siglo XIX cuando comience a notarse en el peso demográfico de Galicia en España.
Censo de 1877
En el censo de 1877 España llega hasta los 16.633.386 habitantes, y de ellos 1.848.027 son gallegos. En 20 años el peso de Galicia baja del 11,50% al 11,11%. A Coruña se mantiene como tercera provincia más poblada, solo unos pocos miles por delante de Madrid.
Censo de 1900
23 años después, en el año 1900, la población española asciende hasta 18.616.630, 2 millones más que en el censo de 1877, y la gallega llega hasta 1.980.515, bajando hasta el 10,63% del total nacional. A Coruña es definitivamente superada por Madrid pero se mantiene cuarta más poblada, y el factor de la emigración se nota sobre todo en la provincia de Pontevedra, que en 23 años tan solo crece de 451.946 a 457.262 habitantes. Aun así, Galicia sigue siendo la segunda comunidad más poblada de España, tras Andalucía, sacándole todavía 20.000 habitantes a Cataluña.
Censo de 1910
En el censo de 1910 la población española roza los 20 millones, llegando hasta los 19.995.686, y la gallega supera por primera vez los 2 millones de habitantes, hasta los 2.063.589. El peso baja hasta el 10,32% nacional, y la población de Galicia es finalmente superada por la de Cataluña. A Coruña baja a quinta posición, superada por las provincia de Asturias (una autonomía que sin embargo sufre en paralelo la misma pérdida de peso demográfico que Galicia, por motivos similares).
Censo de 1920
En las dos primeras décadas del siglo XX es cuando se produce en España la mayor cantidad de emigración documentada a América, y en el censo de 1920 se nota considerablemente (además de otros factores, como la pandemia de gripe española). En 10 años España tan solo crece en un millón cuatrocientos mil habitantes, llegando hasta una población total de 21.389.842. De ellos, 2.124.244 son gallegos. Galicia baja hasta el 9,93% de peso demográfico, y por primera vez la provincia de Lugo pierde población, pasando de los 479.965 habitantes de 1910 a 469.705 en 1920.
Censo de 1930
España gana más de 2 millones de habitantes en 10 años y llega hasta los 23.677.794, pero Galicia tan solo aumenta en algo más de 100.000 hasta los 2.230.281, lo que hace que su peso en la población española baje hasta el 9,4%. Lugo continúa perdiendo población.
Censo de 1940
Pese a las víctimas de la Guerra Civil tanto en el campo de batalla como por represalias o hambre, España gana más de 2 millones de habitantes en esta década, y la población llega a 26.015.907. Con la emigración a otras regiones y a América Latina limitada por la situación política, Galicia crece notablemente hasta los 2.495.860 habitantes (solo 200.000 menos que ahora), y recupera peso demográfico en España, subiendo hasta el 9,6%.
Esta década (de 1930 a 1940) es la única de los últimos 170 años en la que Galicia recupera peso demográfico respecto al resto de España.
Censo de 1950
España gana casi 2 millones de habitantes en esta década, caracterizada por el aislamiento internacional de España tras la Segunda Guerra Mundial. La población española llega hasta 27.976.755 habitantes, de los cuales 2.604.200 son gallegos (solamente 100.000 menos que ahora). El peso de Galicia en España baja hasta el 9,30%, y en el mapa de todo el país se ve como en estos 10 años ha comenzado una gran emigración hacia las grandes ciudades, principalmente Barcelona, Madrid, Valencia y Sevilla.
Censo de 1960
España gana más de 2 millones y medio de habitantes en estos 10 años y supera la barrera de los 30, llegando hasta 30.528.539. Por la elevadísima emigración hacia otras regiones de España y países de América Latina, Galicia en conjunto pierde población por primera vez en su historia, bajando de los 2.604.200 habitantes de 1950 a 2.596.803 en 1960. Por ello, pasa a representar el 8,5% de España, perdiendo 0,8 puntos en 10 años. Entre las cuatro provincias, ganan población A Coruña (especialmente) y Pontevedra, y la pierden Lugo y Ourense.
Censo de 1970
España experimenta el mayor crecimiento en una década en su historia, con más de 3.5 millones de habitantes más que diez años atrás, lo que hace que la población alcance 34.040.989 personas. Galicia únicamente gana 80.000 habitantes, llegando su población hasta 2.676.336, lo que hace que se descuelgue un poco más y pase a suponer el 7,86% de España. Lugo pierde más de 50.000 habitantes, Ourense 8.000, y A Coruña y Pontevedra ganan población.
Censo de 1981
El siguiente censo no fue 10 años después, sino 11, y nos muestra ya una España democrática que ha ganado otros 3,5 millones de habitantes hasta los 37.683.362 y en la que Galicia vuelve a perder peso, pese a llegar a su máximo histórico de población. Galicia alcanza 2.811.942 habitantes pese a que Lugo y Ourense siguen perdiendo abundante población, y este máximo tiene una parte de espejismo, porque Galicia baja hasta el 7,66% del peso en España. Hasta ese momento el problema demográfico de Galicia se debe a la emigración, pero a partir de esta década surge un nuevo obstáculo: la baja natalidad y el progresivo envejecimiento de la población.
Censo de 1991
10 años después del 81 llega un nuevo censo en el que España apenas progresa en población, llegando a los 38.872.268, pero en el que Galicia comienza un retroceso que ya no abandonará. La comunidad gallega baja hasta los 2.731.669 habitantes, con nuevos descensos en Lugo y Ourense y aumentos en A Coruña y Pontevedra, y el peso de Galicia sobre España es ya solo del 7%. Comienzan a sonar algunas alarmas, Galicia ya no es esa comunidad que "genera gente", sino que la natalidad comienza a bajar y los saldos vegetativos comienzan a ser negativos. Galicia no solo se va, sino que también se empieza a morir.
Censo de 2001
En 2001 la población española escala un poco más y llega hasta los 40.847.371, dos millones más que diez años atrás. Galicia continúa languideciendo, descendiendo hasta los 2.695.880. La comunidad representa el 6,6% de España, las provincias de Lugo y Ourense siguen perdiendo población, y Galicia ya es una de las regiones más envejecidas de Europa.
Censo de 2011
En los 10 años que van de 2001 a 2011 se produce el mayor incremento en números absolutos de la historia de España, con más de 5 millones de habitantes nuevos debido a la alta cantidad de emigrantes que llegan al país: España llega a los 46.667.175 habitantes. Esto apenas se nota en el caso de Galicia, y la población solamente asciende hasta 2.773.415, un aumento de unos 80.000 habitantes, pero ridículo en comparación con el resto de España. Por ello, el peso demográfico de Galicia baja hasta el 5,94%.
La situación actual: el censo vegetativo negativo
Galicia mantiene 2,7 millones de habitantes a fecha de 2021, pero lo hace gracias a la constante emigración (sobre todo del África subsahariana y de los países latinoamericanos), porque su situación demográfica continúa siendo muy complicada. El saldo vegetativo de Galicia es negativo cada año desde 1988 (lo fue en 1986 pero en 1987 no). Desde ese año mueren en Galicia más personas de las que nacen, y si la población no ha sufrido una debacle ha sido precisamente gracias a la emigración a Galicia.
En los últimos años se ha agudizado esa tendencia, con cada vez más defunciones y menos nacimientos. 2020 fue el año con peor saldo vegetativo de la historia documentada de Galicia, con un decremento de 17.561 personas. Los nacimientos marcaron un mínimo histórico de 15.261, y las defunciones un máximo de 32.822.