Galicia atesora un rico patrimonio histórico-artístico, constituido por numerosos bienes materiales e inmateriales ―de todas las tipologías: religioso, arqueológico, industrial…― que se reparten por cada rincón del territorio. Un patrimonio que resulta de vital importancia proteger ya que forma parte de la identidad y la cultura gallega que se ha ido conservando a través del tiempo. Sin embargo, a día de hoy muchos de estos monumentos históricos no son más que la muestra del abandono y la desidia. Del lujo a la ruina en cuestión de décadas. 

Este 2022 la colección Simply Travellers sacó al mercado101 monumentos que tus hijos, tal vez, ya no verán, de la historiadora del arte Raquel Álvarez. Esta guía para recorrer España, dividida por comunidades autónomas, presenta una pequeña recopilación de bienes naturales y culturales que se encuentran en peligro de desaparición, todos ellos seleccionados entre los más de mil que conforman la Lista Roja que elabora Hispania Nostra desde 2007. En la sección gallega se incluyen siete monumentos históricos (aunque existen todavía más) en riesgo de destrucción o alteración esencial de sus valores: tres en la provincia de Pontevedra, otros tres en A Coruña, y uno en Lugo.

Parque do Pasatempo de Betanzos (A Coruña)

Situado a las afueras de Betanzos, el Parque Enciclopédico del Pasatiempo es un museo lúdico al aire libre ideado por Juan García Naveira. En su momento fue una iniciativa pedagógica novedosa y prácticamente única en su género, precursora de los parques temáticos modernos. El espacio se construyó entre los años 1893 y 1914, y en su origen el recinto sumaba más de nueve hectáreas, de las cuales solo se conserva una séptima parte. El parque está compuesto en toda su extensión por una zona antigua y otra de reciente construción, con varios espacios verdes, estanques, un auditorio al aire libre, grutas subterráneas y una zona infantil de juegos entre otros. En la actualidad el Parque do Pasatempo de Betanzos está en un proceso de restauración que avanza lentamente, con la idea de darle usos culturales y que incluso se irá enseñando a la ciudadanía.

Sanatorio de Cesuras (A Coruña)

Abandonado, siniestro y mágico, así luce en la actualidad el Sanatorio de Cesuras, en la comarca coruñesa de Betanzos. Este singulae edificio de estilo modernista hunde sus raíces en los años 1922 y 1924, cuando fue proyectado por el arquitecto Rafael González Villar, autor de obras como el Kiosko Alfonso o la Casa Molina en A Coruña. Por aquel entonces la idea era eregir un sanatorio para tratar a los enfermos de tuberculosis y por ello se emplazó en un lugar aislado entre la naturaleza, rodeado de frondosos bosques de pinos y eucaliptos. La construcción se inició por una de las naves laterales, aunque terminó paralizándose por falta de fondos económicos en el año 1931. Del diseño inicial solamente llegó a empezarse un primer módulo que en el momento actual se conserva en estado ruinoso, con varias zonas derruidas y asolado por la vegetación. 

Monasterio de Santa María de Monfero (A Coruña)

Situado en la parroquia de San Fiz de Monfero, este templo cisterciense se localiza en un pequeño valle a las puertas del río Lambruxo. El monasterio limita en su cara norte con el río Eume, por lo que parte de su territorio se encuentra enmarcado dentro del Parque Natural de las Fragas do Eume. Sus raíces se remontan al siglo XII, época en la que se inicia la construcción de una iglesia románica de la que todavía se pueden observar algunos restos menores. En el siglo XVII se llevó a cabo una reconstrucción de las dependencias mayores, sin embargo, a partir del XIX el templo cae definitivamente en un período de decadencia y abandono que se extiende hasta nuestros días. En el año 1931 fue declarado Monumento Histórico-Artístico y si bien la iglesia se encuentra en un estado de conservación bastante bueno debido a una reciente restauración, el resto de las dependencias del monasterio se encuentran totalmente en ruinas. 

Colegio de los Jesuitas de Camposancos en A Guarda (Pontevedra)

Para conocer la historia detrás del Colegio de los Jesuitas de Camposancos, en A Guarda, tenemos que remontarnos al año 1840, época en la que empezó a despegar el proyecto de la casa y finca de Camposancos del Sr. Domingo Español. De hecho, las primeras obras de ampliación y acondicionamiento del lugar dieron comienzo ya en 1875. La edificación fue sede de la Escuela Universitaria durante casi una década (1877-1885) ―germen de las Universidades de Deusto y Comillas― y cumplió su función como colegio hasta el estallido de la Guerra Civil Española, cuando pasó a convertirse en un campo de concentración con más de 3.000 presos. A partir de 1943, el edificio volvió a su calidad de centro de enseñanza de los jesuitas, aunque nunca llegó a recuperar su esplendor y terminó cerrando sus puertas en 1959. En el momento actual el colegio se encuentra en ruinas, con varias caídas de vigas primeras confirmadas, humedades y capilaridades en toda su estructura. 

Casa Rectoral de San Martiño de Borela en Cotobade (Pontevedra)

Muy próxima a la Iglesia parroquial de San Martiño de Borela, en Cotobade, se localizan las ruinas de una antigua casa rectoral construida en piedra sobre el siglo XVIII y que era asimismo la vivienda donde solía residir el párroco del pequeño templo. De la construcción destacan los pináculos con bolardos que terminan el muro que acota todo el recinto, así como las escaleras de la fachada que nos dirigen hacia el primer piso. La casa rectoral también cuenta con una solana con balustrada de piedra cuyo tejado se encuentra sostenido por unos pequeños pilares. En la actualidad se encuentra en un estado total de abandono y degradación, sumida por la vegetación y con un gran riesgo de derrumbe. 

Casa Becerra en Vilagarcía (Pontevedra)

En el histórico barrio da Prosperidade, en Vilagarcía de Arousa, se alza una  vivienda racionalista que bien podría considerarse una construcción reciente de no ser por su evidente estado de deterioro exterior. La realidad es que Casa Becerra fue construida en 1939 por el arquitecto pontevedrés Juan Argenti Navajas como residencia estival para la señora Becerra Malvar. Se trata de un edificio innovador para su época y está considerado uno de los primeros ejemplos de arquitectura moderna en Galicia ―y también de los pocos que se conservan. Las zonas verdes y árboles centenarios que rodeaban a la casa también fueron considerados en su día como jardín histórico, si bien en la actualidad ha sido totalmente arrasado. Aunque el estado de conservación de Casa Becerra es bastante bueno en general, la vivienda corre peligro por la propuesta de descatalogación como edificio protegido.

Torre dos Moreno en Ribadeo (Lugo)

La Torre dos Moreno en Ribadeo (Lugo) es uno de los iconos más representativos del legado indiano en Galicia y una auténtica joya de la arquitectura en la región. Esta residencia de estilo ecléctico y modernista, que cuenta con una estructura mixta de hierro y hormigón, fue construida por iniciativa de los hermanos Juan y Pedro Moreno Ulloa en 1915. En su momento, la proyección de la edificación en cuestión corrió a cargo del arquitecto argentino Julián García Núñez (considerado discípulo de Gaudí) y el ingeniero Ángel Ardex. La Torre dos Moreno está considerada desde el año 1997 como un Bien de Interés Cultural. En diciembre del año 2010 se aprobó una resolución para salvar el monumento en ruinas, sin embargo, tras años de espera, no ha sido hasta estas Navidades que han dado comienzo los trabajos de restauración a cargo de Paisajes de Asturias.