A mediados del siglo pasado la tradición de cantar en las tabernas llenaba Galicia de norte a sur, como una manifestación natural, artística y cultural del folclore transmitido y creado por el pueblo gallego. Por aquel entonces ―sobre todo en la década de los cuarenta, cincuenta y sesenta― una tasca, una jarra de vino y un grupo de amigos era más que suficiente para poner en marcha un improvisado concierto itinerante de cánticos populares. En ocasiones eran sólo las voces de sus protagonistas, pero muchas otras las panderetas, tambores, acordeones, y a veces hasta las gaitas, iban girando también de bar en bar entonando la melodía de cientos de canciones que incluso llegaron a crear un género de música en sí mismo.
Si bien es cierto que hubo un tiempo en el que la tradición de cantar en las tabernas se perdió bastante e incluso llegó a peligrar su existencia, a día de hoy son muchos los puntos de Galicia donde la música tradicional sigue viva y esta costumbre se mantiene como parte de la oferta cultural y dinamizadora de diferentes localidades. Desde Santiago de Compostela a Vigo, pasando por A Coruña, Ferrol, Pontedeume, O Grove o Ribadeo, son muchos los rincones de Galicia donde todavía es posible disfrutar de ediciones especiales de cantos de taberna a lo largo de todo el año. De hecho, resulta llamativo el hecho de que se está experimentando un ligero repunte en este tipo de iniciativas populares que buscan recuperar la tradición de los cantos de taberna. Sin ir más lejos, A Illa de Arousa celebró el pasado viernes 2 de junio su primera edición de "Cantares de Taverna", una iniciativa impulsada por artistas locales y la Asociación Cultural Dorna, con la colaboración del concello, que contó con hasta tres grupos isleños, SONdaILLA, Lusco e Fusco y Gil y Amigos, y otros dos invitados Salgariteiros (Marín) y Os Tazas (A Estrada).
La historia de los cantos de taberna
El origen de los cantos de taberna se pierde más allá del tiempo. Se trata de una tradición cultural propia de la que han surgido cientos de cantereiros solistas y coros a cappella capaces de reproducir los ancestrales cánticos que llevan décadas transmitiéndose de generación en generación en Galicia. Lo cierto es que muchas de las canciones populares que se conservan en nuestros días surgieron por generación espontánea en este tipo de ambientes y tabernas. En gallego o en castellano, acompañadas de instrumentos o no, pero siempre con algún aturuxo ―un grito agudo, muy común en el folclore tradicional gallego― bien entonado a lo largo de estos conciertos improvisados
Con todo, la costumbre de cantar en los bares gallegos se vio truncada por el mundo moderno y aquel imperativo legal en forma de cartel que anunciaba frente a las tascas más enxebres que estaba "prohibido cantar en este local", un movimiento muy significativo en ciudades como Lugo y Ourense entre los años 50. En caso particular de los cambios en el paradigma de los bares contemporáneos, la instalación de equipos de música y televisores en los establecimientos hosteleros contribuyó en gran medida a poner fin (sobre finales del años sesenta del siglo XX) a una de las tradiciones populares más jolgórica de Galicia: la de juntarse en un mismo espacio personas de diferentes sexos y generaciones, compartiendo y cantando al unísono en un ambiente mágico marcado por la improvisación y el buen ritmo.
Folclore y tradición en la actualidad
De un tiempo a esta parte, la preocupación tanto por mantener como recuperar las raíces y tradiciones de nuestra tierra se ha convertido en una necesidad de primer nivel. Lo cierto es que en la actualidad son muchas las asociaciones culturales que invierten su tiempo y esfuerzo en dar a conocer el patrimonio inmaterial de Galicia a través de la música, el arte o las letras. En ese sentido, también el grueso de la geografía gallega está viviendo su particular recuperación de la tradición de los cantos de taberna en formato de certámenes y ediciones organizadas, la mayoría de las veces, de forma conjunta entre los propios concellos y este tipo de agrupaciones, tales como la ya mencionada "I Cantares de Taverna" en A Illa de Arousa.
Dentro de las asociaciones musicales existentes, merece la pena resaltar el caso particular de MÁIS CANTOS, una agrupación dirigida por Nelson Quinteiro que nació en 2017 con el objetivo de transmitir, fomentar y recuperar los cantos populares, tradicionales, y de Taberna entre todo tipo de públicos. En la actualidad esta asociación suma más de 40 cantareiros y cantareiras que recorren las principales fiestas, foliadas, romerías y encuentros gallegos a lo largo de todo el año. En la agenda del grupo se encuentran eventos tan importantes como la Festa a Raia de Portonovo y las Festas da Peregrina en Pontevedra, el Entroido de María Pita en A Coruña o el Nadal de Rianxo. Además, cabe destacar que MÁIS CANTOS cuenta con tres grupos simultáneos en Pontevedra, Marín y Lourido.
Entre los certámenes musicales existentes en la actualidad en Galicia dirigido a este tipo de música tradicional, destacan algunos como la tercera edición de Cantos de Taberna de Baralla o la octava de A Estrada, ambas celebradas en estos concellos de Lugo y Pontevedra el pasado mes de marzo. También el programa musical de Cantos de Taberna de Pontevedra regresó a las tascas de la Boa Vila a principios de año con grupos como Fuxan os Ventos, Maravallada o Peis D’hos entre otros. En el norte coruñés de Galicia, Pontedeume también atesora una larga tradición de conciertos populares de bar en bar y de hecho, el pasado mes de mayo tuvo lugar la V Edición de Cantos de Taberna de la localidad pontedeumesa. Y más allá de las ediciones particulares de este tipo de encuentros tradicionales, los cantos de taberna también se enmarcan dentro de los programas de otras grandes fiestas de Galicia, como por ejemplo el caso reciente de la multitudinaria Foliada de Melide del pasado mes de abril.