Recordar y honrar a quienes más han hecho por un lugar, un pueblo o una ciudad debería ser una tradición con la que mantener vivo su legado entre la población. Muchos habitantes del municipio de Laxe (A Coruña) conocen la plaza Ramón Juega, frente a la playa y el paseo marítimo de la calle Rosalía de Castro; quizá no tantos sepan quién fue la persona que da nombre a este punto principal del pueblo. La villa de la Costa da Morte conmemoró el pasado miércoles 18 de diciembre a una de sus más ilustres figuras.
El acto de homenaje se celebró en el Museo del Mar de Laxe a las cinco de la tarde con motivo del centenario del nombramiento de este lugar central de la localidad, la plaza de Ramón Juega. Distintas entidades se sumaron a la celebración, como el Colegio de Médicos de la Provincia de A Coruña, la Real Academia de Medicina de Galicia, el Consulado General de Uruguay en la comunidad y el Ayuntamiento de Laxe, así como entidades del campo de la medicina de España y Uruguay.
El Concello de Laxe elaboró para la ocasión un panel informativo sobre la figura de este médico indiano natural del municipio y estableció un espacio dentro del Museo del Mar para todas aquellas piezas relacionadas con su vida, obra y época que fueron cedidas en donación para el acto conmemorativo.
Objetos de Ramón Juega donados por sus descendientes.
Entre los asistentes estuvieron el alcalde de Laxe, Francisco Charlín Orons; y el cónsul general de Uruguay en Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco, el doctor Ramiro Rodríguez Bausero; además de varias generaciones de descendientes de la familia Juega en Laxe y en A Coruña.
"Vinculado al corazón de la villa"
Ramón Juega Charlín nació en Laxe en 1845. En 1872 emigró a Buenos Aires, de donde pronto se trasladó a Montevideo, donde vivía su hermano mayor Joaquín. En Uruguay se instaló en el Departamento de Tacuarembó (conocido entonces como San Fructuoso), en la República Oriental, lugar en el que ejerció como médico rural y en unas condiciones tan duras como las que sufrían sus colegas en Galicia. Su rigor y su trato cercano lo convirtieron en una persona muy apreciada y querida por los vecinos.
Objetos de Ramón Juega donados por su familia al Museo del Mar.
El médico regresó a Laxe en 1880, y entre 1887 y 1890 fue su alcalde, cargo que ejerció con dedicación a sus vecinos y acompañó con el desarrollo de diversas infraestructuras para el desarrollo urbano de la villa, como la canalización de aguas y el adoquinado de calles. Al dejar la Alcaldía volvió a Tacuarembó y retornó ocho años después a Galicia para instalarse definitivamente. Vivió en A Coruña, donde compró la casa de baños La Primitiva y falló a los 60 años, en 1905.
El acto de homenaje a Ramón Juega consistió en una charla sobre su vida y obra a cargo de uno de los descendientes Juan José Juega Cuesta. Una hora después se firmaron las actas de donación y descubrimiento del espacio dedicado al médico en el Museo del Mar de Laxe. Tanto este recinto como la propia plaza Ramón Juega fueron visitados por los participantes. "Su contribución al desarrollo de Laxe hace que su nombre permanezca vinculado al corazón de la villa desde hace un siglo", ha destacado el Ayuntamiento.