Burela (Lugo) aspira a la gloria en el Grand Prix: Un pueblo con el sueño de la infancia cumplido

El Grand Prix, el denominado como "el programa del abuelo y del niño" que ha marcado a tantas generaciones será esta noche una realidad para el equipo de Burela (Lugo), la única representación gallega este año en el Grand Prix del verano. Esta participación en el mítico programa presentado por Ramón García que volvió en 2023 tras muchos años de ausencia, es un "sueño de la infancia cumplido" para muchos.

Así lo confirma una de las artífices de que el pueblo marinero vaya a lucirse esta noche en prime time en TVE, la concelleira de cultura, Lina Gómez, que se ha aliado con la alcaldesa de la localidad, Carmela López y el capitán de la delegación de deportistas locales y también entrenador personal y surfero, Bruno Oroza.

Todo surgió a raíz de bromear con la propuesta de presentarse el verano pasado y todo acabó este mes de mayo con la grabación de la realización de las pruebas del programa en el plató en Fuenlabrada (Madrid).

Eso obligó a los 35 miembros del equipo y los 95 acompañantes que siguieron todo con detalle desde las gradas del plató a pasar dos largas noches de bus pero las anécdotas y la experiencia única han valido la pena. Un sorteo ante notario decidió al azar que Galicia fuese este año una de las comunidades participantes y un excepcional vídeo de presentación de Burela elaborado por los concursantes hizo el resto.

En él aparece la alcaldesa y gente del pueblo enseñando su tierra, "el nordés gallego" y representando en escenarios locales las pruebas que se realizan en el programa televisivo como los bolos o las cartas. También se dan detalles relevantes como que Burela tiene 9.454 habitantes de los que 7.535 son deportistas, además de convivir en el pueblo hasta 42 nacionalidades y tener una medida de edad de la población de 44 años.

El Pescados Rubén de fútbol, el Club Cerezo Bikes, el SD Burela, el club baloncesto Burela o la asociación de marineros jubilados son los protagonistas del vídeo, que termina destacando el dato de que a la gente de Burela le llaman "pataqueiros".

"Optamos por este tipo de vídeo para enseñar el pueblo y demostrar que somos muy atletas (risas)", dice la concelleira, que detalla que en el equipo de Burela que ha competido hay 15 chicos, 15 chicas y cinco suplentes que han terminado con magulladuras y rodillas hinchadas pero contentos de haber podido vivir lo que en su infancia solo veían por la televisión.

Proceso de selección y "estudio del diccionario"

Pruebas como la patata caliente las hizo sola la alcaldesa, pero apuntan desde el Concello de Burela que han estudiado más para la prueba del diccionario, donde la concelleira de cultura ejerció de asesora cultural ayudando a la alcaldesa y a la madrina, Paula Vázquez, a adivinar si los significados propuestos para determinados vocablos eran verdaderos o falsos.

"Nos estudiamos el diccionario, pero algunas respuestas fueron de cara y cruz y otras nos sonaban de haberlas leído y estudiado", cuenta. A la hora de elegir al equipo, se organizaron una serie de pruebas a las que se presentaron casi 100 personas.

En ellas los aspirantes tuvieron que poner a prueba su equilibrio sobre unas colchonetas que simulaban a los troncos locos, utilizaron el rocódromo e incluso hicieron sentadillas para llegar a una barra ubicada a cierta altura.

"El equipo desde el minuto 0 hizo buena piña y fueron a por todas, a pasarlo bien, a ganar y vivir un sueño, que con sus edades es el programa de la infancia de todos", explica la concelleira. La grabación fue de 15:00 a 00:00 horas y estuvieron preparando su participación durante un mes mano a mano gente que trabaja en el muille, profesores, libreros, trabajadores de supermercados y hasta una influencer local.

Sobre la llegada al plató, comentan que en el primer momento se les "pusieron los pelos de punta" y sobre Ramón García admiten que fue "súper cercano y muy campechano delante y detrás de la cámara".

Asimismo, sobre la dureza de las pruebas, la más dificultosa comentan que fue aquella en la que los de Burela tuvieron que vestirse de monos y superar un circuito para conseguir unos plátanos, no sin antes saltar una piscina o superar una complicada red.

Sea como fuere el resultado de Burela en su concurso que se conocerá esta noche, ya solo con participar pueden sentirse ganadores, dado que no todo el mundo de los 80 y 90 que crecieron con este divertido formato pueden presumir de haber sido parte y que el recuerdo quede grabado en sus retinas y en la televisión para siempre.