Este lunes 29 de julio, el presidente de la Xunta Alfonso Rueda, ha anunciado los asuntos aprobados tras el Consello de la Xunta y uno de ellos es el anteproyecto de ley de servisios de medios públicos con audiovisual en Galicia.

Si se aprueba como proyecto de ley pasaría al Parlamento y la propuesta se debe, según el presidente de la Xunta, a la necesidad de renovar la normativa vigente que data de 2011 y de adaptarse a los patrones y cambios en la normativa audiovisual".

Entre las novedades que se introducirán de ser aprobada, la CRTVG pasará a llamarse Corporación de Servicios Audiovisuales de Galicia. Esto supondría, según han trasladado desde la Xunta, la producción propia de contenidos y servicios en gallego sin el perjuicio del uso puntual de otras lenguas, además de la "consagración del papel fundamental del audiovisual como dinamizador de las cifras espectaculares del sector en Galicia", ha dicho el presidente.

En esta línea, ha detallado que de avanzar esta propuesta, el 100% del capital de la nueva CRTVG "será público y autonómico y la nueva corporación contaría con un director o directora xeral y seis personas más escogidas en el Parlamento de Galicia, además de crearse un Consejo Asesor de Participación social y profesional con 15 miembros.

"Hay que adecuar las nuevas tendencias a un nuevo escenario y tener nuevas herramientas para cumplir misión fundamental de difundir nuestra cultura, lengua e identidad desde el audiovisual", subrayó Rueda. Tras el anuncio, los grupos de la oposición (PSdeG y BNG) han reclamado la comparecencia parlamentaria del presidente de la Xunta y del PP, Alfonso Rueda, para explicar las líneas maestras del borrador que reformará la CRTVG.

A su vez, los grupos de la oposición han dado este mediodía ruedas de prensa para mostrar su rechazo ante unos cambios legislativos que otorgarían a los populares el "control absoluto" de la Televisión de Galicia.

"Alcanzar acuerdos"

Preguntado por la elección del director xeral, el presidente del Gobierno de la comunidad ha explicado que el texto mantiene como "primeras opciones" que la elección se adopte por tres quintos del Parlamento de Galicia y que, si no se obtuviesen, dos tercios.

A su vez, ha reconocido que introduce una disposición transitoria que permite designar a esta persona con "con mayoría absoluta". En este contexto, Rueda ha asegurado que la atención del Gobierno y del grupo que lo sustenta es "poder llegar a un acuerdo", para lo que el texto contempla las mayorías iniciales.

Los socialistas, a través de la diputada Silvia Longueira, han rechazado la propuesta de anteproyecto de ley de rueda alegando que de esa manera "se establecería un camino para que la TVG emita producciones en castellano sin complejos". También critican que el borrador de la nueva ley "elimina la ley de medios aprobada en 2011 que proponía crear un Consello de Informativos y la redacción de un Estatuto Profesional" y aclaran "que ninguno se ha desarrollado hasta la fecha".

En esta línea, los socialistas recuerdan que la CRTVG "está por debajo de las televisiones autonómicas históricas y no cumple con el servicio público que se supone que debe llevar a cabo una televisión pública", a ello unen que "la audiencia ha disminuido en un 30% y su modelo se parece más al de la Televisión de Madrid y Aragón que al de TV3 o Televisión Vasca".

También denuncian que el presupuesto de la cadena autónomica ha descendido a niveles de 2009, lo que dificulta lanzar contenidos propios. Desde el BNG también han manifestado críticas y Olalla Rodil ha argumentado que "después de años haciendo de la CRTVG su terminal de propaganda el gobierno de Rueda prepara una reforma legislativa hecha a medida de los intereses del PP".

Enumeran "tres finalidades moi claras" : "controlar la dirección de la corporación poniéndola al servicio del PP, eliminar los órganos de participación profesionales y abrir la puerta de los medios públicos de Galicia a lenguas distintas del país".

Rodil expresó también que "después de más de una década negándoles los derechos a los profesionales, después de ocho años de movilización del personal de la CRTVG en la Plataforma Defende a Galega reclamando la garantía de sus derechos profesionales para cumplir con la misión de servicio público que tienen, ahora el PP pretende fulminar cualquier atisbo de participación profesional que pueda contradecir la línea editorial que marque el partido".

Por último, sentenció que lo propuesto por el PP es un "ataque frontal y sin precedentes a los derechos lingüísticos".