El árbol de la ciencia es un clásico en las visitas turísticas a Santiago de Compostela: aunque no es un reclamo por sí mismo, todo aquel que llega a la Praza do Obradoiro desde la Rúa do Franco detiene la vista en él, toma una fotografía o lleva a cabo su famoso ritual.
Aunque el actual contexto lo dificulta, siempre ha sido habitual ver a la gente dar tres vueltas ante esta escultura de hierro para señalar uno de los trece pergaminos -en latín- que se esconden entre sus ramas y así encontrar su vocación entre las disciplinas que se ofrecían antiguamente se impartían en la Universidad de Santiago de Compostela (USC).
El árbol de la ciencia de Ramón Llull
El árbol de la ciencia es un símbolo que parte de la obra homónima de Ramón Llull, un texto de carácter enciclopédico creado a finales del siglo XIII y en el que se comparan los diferentes ámbitos del saber con las ramas de un árbol.
En lo simbólico, este árbol ha sido representado en múltiples ocasiones del mismo modo que en la escultura de la Rúa do Franco, con pequeños pergaminos entrelazados entre sus ramas. En ocasiones también ha ido acompañado de sabios, encargados de podarlo para equilibrar las diferentes ramas del saber.
El árbol de la ciencia es el símbolo desde su fundación en 1939 del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la institución que a día de hoy tiene su sede en el edificio en el que se encuentra esta famosa escultura.
El edificio
El edificio en el que se encuentra el árbol de la ciencia fue construido a principios del siglo XVIII para albergar la biblioteca del Colexio de Santiago Alfeo, que posteriormente pasaría a ser conocido como Colexio de Fonseca y hoy como Pazo de Fonseca.
Así, aunque habitualmente se dice que está en la fachada de Fonseca o de San Xerome, realmente se encuentra en un edificio que, si bien se encuentra flanqueado por estos dos, fue construido más tarde.
Además de como biblioteca de Fonseca, este edificio, catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), acogió el Seminario de Estudos Galegos y, tras ser restaurado por los arquitectos Vaquero y Baselga, pasó a albergar la sede del Instituto de Estudos Galegos Padre Sarmiento entre 1943 y 2001.
En ese mismo año pasó a convertirse en la sede de la Delegación en Galicia del CSIC, que desde su creación en 1985 había estado en el Instituto de Investigación de Agrobioloxía de Galicia, en la compostelana Avenida de Vigo.
El ritual
No se conoce el origen exacto del archiconocido ritual que rodea al árbol de la ciencia, consistente en situarse frente a él, dar tres vueltas sobre uno mismo y señalar de espaldas una de sus ramas.
Se dice que esta era la fórmula empleada por estudiantes indecisos para escoger la carrera que estudiar en la Universidad de Santiago, aunque más bien sirve para confirmar la vocación de cada uno.
Aunque inicialmente el árbol estaba al descubierto, a día de hoy no es posible contactar de forma directa con esta escultura de hierro, que está protegida por un cristal de cuyo mantenimiento y restauración se encarga el CSIC.