El 75% de las calles de Santiago de Compostela homenajean a hombres
Solamente 97 de las 383 calles dedicadas a personas están encabezadas por mujeres
29 enero, 2024 05:00La elección de la toponimia del callejero de las ciudades es una de las prácticas conmemorativas más comunes en nuestra sociedad. Sin embargo, la forma en la que se ponen los nombres a las calles puede variar según el país, la ciudad y las regulaciones locales.
Si nos paramos a pensar en el nombre de la calle en la que vivimos, en la que se encuentra nuestro trabajo o en el de alguna de las más conocidas de la ciudad, prácticamente no encontramos nombres de mujeres.
Y es que la disparidad en la cantidad de calles con nombres de hombres en comparación con nombres de mujeres refleja una serie de factores históricos, culturales y sociales que han influido en la forma en que se nombra el entorno urbano.
Poner el nombre de una persona a una calle es un homenaje que busca reconocer y conmemorar la contribución que esa persona ha hecho a la sociedad, a la cultura, a la ciencia… este tipo de homenaje es una forma de preservar la memoria y el legado de individuos que han dejado una huella duradera en la comunidad.
La falta de reconocimiento, la tradición patriarcal y la escasa representación femenina a lo largo de la historia han dado como resultado que hoy vivamos en una ciudad donde la mayor parte de los barrios están dedicados a hombres.
Solo 40 calles dedicadas a mujeres
Según un estudio de la Concellería de Igualdad, en Santiago existen 383 calles dedicadas a personas. De ellas, 287 homenajean a hombres y 97 a mujeres. Esto sitúa el porcentaje de representación femenina en el urbanismo santiagués en un 25%.
Además de que este porcentaje es muy bajo en relación con el 75% que pertenece a los hombres, es decir, hay tres veces más representatividad del género masculino que del femenino. Los datos facilitados por el estudio también demuestran que existe sesgo a la hora de nombrar el viario según su jerarquía.
Su autora, María Novas, expone que “aquellas de mayor relevancia como las avenidas son dominio masculino siendo su porcentaje de nombramiento (12,9%) tres veces el de las mujeres (4,1%)”. Son las calles más modestas las que, de forma general, tienen nombres femeninos.
La religión como protagonista
La práctica de nombrar calles en honor a religiosos y santos tiene sus raíces en la historia y en la cultura de muchas sociedades, especialmente aquellas que tienen una fuerte tradición religiosa.
Galicia siempre ha tenido una estrecha relación con la religión, especialmente con el cristianismo. Y es que toda la comunidad cuenta con una rica herencia de arquitectura religiosa, de festividades y de tradición folclórica cristiana. Además, del Camino de Santiago y de la Catedral de Santiago, importantes centros de peregrinación y devoción.
Es por ello que en toda España, y también en Galicia, un gran porcentaje de las calles están dedicadas a figuras relacionadas con la religión. En Santiago, un 17% de las calles dedicadas a mujeres están vinculadas con religiosas y santas.
Si bien es cierto que las figuras religiosas acompañan tanto a hombres como a mujeres en el callejero santiagués, el porcentaje en los hombres es del 28,6%, mientras que en las mujeres es del 51,5%. La mayor parte de las calles dedicadas a hombres es a figuras militares, un 61,3%.
Mejor que la media española
Aunque las cifras alarman, cabe destacar que Santiago es un ejemplo a seguir en cuanto a feminismo en el nombre de las calles de la ciudad. La capital gallega cuenta con un 2% más de calles con nombres de mujeres que la media española y supera con creces al resto de ciudades gallegas.
A Coruña y Ourense cuentan con un 9% de calles dedicadas a mujeres y Vigo tan sólo un 5%. Esto quiere decir que de las 587 calles dedicadas a personas de Coruña, 53 tienen nombres femeninos; que de las 237 de Ourense, 21 se refieren a mujeres; y que, en el caso de Vigo, son 17 de las 348 que homenajean a personas.
Esto sitúa Santiago muy por encima del resto de ciudades gallegas que, a pesar de contar todas con más calles dedicadas a personas, no dedican demasiadas a mujeres.
Una sociedad que avanza
En muchas ciudades españolas ha habido un movimiento creciente para promover la igualdad de género y la representación de las mujeres en la sociedad, incluyendo la práctica de nombrar calles y lugares públicos en honor a mujeres destacadas. Por ello, cada vez son más los espacios dedicados a mujeres influyentes en campos como la ciencia, la cultura, la política o el arte.
Los últimos cambios realizados en las calles santiaguesas benefician, en gran medida, a las mujeres. De hecho, un tercio de los topónimos femeninos actuales fueron añadidos en el año 2007. Hace 10 años, la ciudad contaba tan sólo con 65 mujeres en su viario.
Cada vez hay más zonas dedicadas a figuras femeninas y todo apunta a que cada vez habrá más. Una prueba más de que la sociedad avanza.