El Mahara de la calle Orzán de A Coruña se reinventa con calaveras y mucho rock

• Ya son nueve años: psicóloga de día, Mahara de noche en la calle Orzán de A Coruña

"Nuestro bar es punk y rockero pero con mucho gusto. Las calaveras son una parte fundamental". Esta es la presentación que hace María Blanco, la dueña de la taberna Mahara de la calle Orzán de A Coruña, del local en el que lleva al frente casi una década. Después de un cierre temporal tras las Navidades para darle un lavado de cara, mañana celebra su reinauguración por todo lo alto, con una decoración renovada creada por el pintor coruñés Edu Albo y con mesas bajas que sustituyen a las antiguas para así poder adaptarse a la demanda y ofrecer comidas.

María y Mon inmortalizados en la barra del bar. Fuente: MAHARA

"El escultor Benito Freire ha recubierto de hierro la fachada (que hoy se termina) y las calaveras están hasta en las mesas porque son una parte fundamental de nuestra esencia. La parte superior de la barra la ha pintado el ilustrador Álvaro Dorda y en ella estamos inmortalizados mi marido y yo", cuenta María, una mujer polifacética que se reparte entre su labor de psicóloga especializada en la atención de personas con trastornos del comportamiento de día y atender a los "maharas" detrás de la barra cuando cae la noche.

La coruñesa de adopción (nació en Salamanca) y su marido Mon (que en 2019 tocó en el Resurrection Fest) se muestran ilusionados con la nueva etapa que comienza en su negocio y lo que más orgullosa se muestra es de cómo han quedado los baños, a los que describe como "espectaculares, los mas simpáticos de la historia del rock". Además, en este espacio en el que son bienvenidos hasta los perros, llama la atención un gran cuadro del ilustrador Javier de la Rosa, al que a pocos metros acompaña una parte de pared destinada a ejercer de photocall y en la que ya lucen fotos de mascotas y personajes relevantes en la historia de la taberna Mahara.

Los baños de la taberna. Fuente: MAHARA

Mañana a las 21:00 horas será el gran momento para Blanco, que para empezar con buen pie la reapertura invitará a todos los que se animen a asistir a una degustación de pinchos y una cata de las exquisiteces que han sido añadidas a la carta. y que de seguro ganarán muchos seguidores.