SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Oct. (EUROPA PRESS) –

El conselleiro de Cultura, Educación e Universidades, Román Rodríguez, ha defendido este miércoles en el Parlamento que los conciertos con centros educativos que segregan por sexo están amparados por la legalidad vigente y ha explicado que la Xunta decidirá sobre su renovación en base al "marco legal" que haya cuando se produzca este proceso, en agosto de 2023. Así lo ha dicho en respuesta a una interpelación formulada por el diputado nacionalista Manuel Lourenzo, en la que ha vinculado la actuación de la Xunta al marco legal existente.

En este sentido, el conselleiro ha recordado que la nueva ley educativa, la Lomloe, incluye la prohibición de subvencionar centros que segregan por sexo a sus alumnos, aunque este artículo "está recurrido" ante el Tribunal Constitucional, que será "el que tendrá que fijar" la doctrina.

Paralelamente, Román Rodríguez ha señalado que los conciertos actualmente en vigor decaen en agosto de 2023 y, ha dicho, "no se pueden modificar a mitad de partido". Por ello, sobre si la Xunta los renovará o no, ha instado a esperar a conocer cuál será el marco legal entonces. "En aquel momento tendremos que ver cuál es el marco legal para, en base a él, tomar las decisiones que tengamos que tomar", ha dicho el conselleiro, que ha ceñido la posición de la Xunta a "la legalidad" vigente.

La "libertad de las familias"

En su intervención, Román Rodríguez ha asegurado que se trata de un "debate muy interesante" que "contrapone dos modelos diferenciados" de educación, amparados "por la libertad y por el respeto" y que obedecen a "las decisiones individuales de las familias".

Rodríguez ha criticado que la cuestión sea "ideológica" para el BNG y ha defendido "la libertad de las familias a la hora de elegir centros educativos". A mayores, ha reiterado que se cumple con la legislación vigente y ha recordado que este modelo "existe en la red pública de países tan democráticos como Reino Unido o Estados Unidos".

Un "tipo de discriminación"

En su pregunta, el diputado nacionalista Manuel Lourenzo ha calificado este modelo educativo como "un tipo de discriminación" y ha hecho un símil a las escuelas que, en su día, separaban a niños por razón de raza.

A mayores, Lourenzo ha explicado que "es falso que mejore la educación" y ha dicho que "no existe ningún argumento que pueda defender que este modelo educativo es beneficioso", por lo que ha preguntado "cómo es posible que, a estas alturas, el Gobierno siga manteniendo estos conciertos".

Para el BNG, existe "un interés del PP" por "beneficiar a ciertos centros con los que tiene connivencia ideológica", ha dicho Lourenzo, que considera la educación segregada algo "machista", "clasista" y "elitista".

A renglón seguido, y después de que el conselleiro apelase a la "libertad de las familias" para elegir el modelo educativo, Lourenzo ha vuelto a equiparar esta situación con otras discriminaciones. "¿Existe libertad en las familias para decir que no quieren que un niño negro entre en una escuela para blancos? ¿O para decidir que quieren que su hijo estudie en un colegio solo para heterosexuales?", ha señalado Lourenzo, que ha cuestionado por qué sí se da la posibilidad de "prohibir que una niña entre en un centro para niños".