El 26 de octubre de 1924, Luisa Cuesta Gutiérrez impartía su primera clase en la Universidade de Santiago de Compostela (USC), convirtiéndose así en la primera profesora universitaria de Galicia.
Luisa Cuesta nació en Medina de Rioseco, en Valladolid, en 1892 y tuvo que enfrentarse a las condiciones socioeconómicas de la mujer de principios del siglo XX para protagonizar una brillante carrera como docente, investigadora y bibliotecaria.
Su paso por Santiago de Compostela dejó huella ya que se convirtió en la primera mujer en estudiar Derecho en la USC. Según ha destacado la propia institución, cursó 15 materias, obteniendo sobresaliente en 11 de ellas. No obstante, sus pasos profesionales estuvieron relacionados con el mundo de las bibliotecas, realizando importantes trabajos en la conformación de la Biblioteca América de la USC.
Durante su estadía en Galicia, Cuesta impartió clases en la Facultad de Filosofía y Letras. También estuvo en contacto con el Seminario de Estudos Galegos, donde publicó estudios sobre cuestiones americanistas, en especial relacionados con la colonización y la emigración.
Maestra superior y funcionaria del cuerpo de bibliotecarios, Luisa Cuesta trabajó en la Biblioteca de la USC hasta 1930, año en el que se fue destinada a Madrid para dirigir la Biblioteca Nacional hasta 1937. Fue perseguida por ser contraria al régimen fascista hasta que fue readmitida en 1945, viviendo marginada hasta su jubilación.
Homenaje
Con motivo del aniversario de su primera clase, este lunes se ha descubierto una placa conmemorativa en la Facultad de Derecho en un acto presidido por el rector de la USC, Antonio López; y en el que han participado la decana de Derecho, Ana Gude; así como las profesoras Lidia Gil y Ana Cabana.
La profesora de la Facultad de Humanidades, Ana Cabana, ha destacado esta iniciativa como "un acto de memoria y de justicia" hacia Luisa Cuesta, resaltando su aportación a la USC como bibliotecaria o alumna de Derecho en una época en la que solo 13 mujeres estudiaban esta carrera en España.
Por su parte, la docente Lidia Gil ha subrayado la importancia de "visibilizar lo hecho por mujeres como Luisa Cuesta", un "referente femenino al que poder mirar en la obligación de reconocer el camino iniciado".
La decana de Derecho, Ana Gude, ha incidido en que esa placa es un símbolo de reconocimiento "a su valentía como pionera" y ha destacado "su gran voluntad de superación en un momento de inestabilidad política, social y económica".
Por último, el rector de la USC ha resaltado que la universidad debe seguir trabajando "por la memoria de pioneras como ella", lo que permite reflexionar sobre el papel de estas mujeres en la universidad, ya que abrieron puertas a otras muchas para seguir avanzando en la consecución de un equilibrio entre mujeres y hombres. "Hemos avanzado, pero nos queda mucho por hacer", ha señalado.