Peter Lindbergh, el fotógrafo que revolucionó el mundo de la moda, planeó antes de su muerte, en 2019, cómo quería que fuese la exposición de su obra. Una exposición que Marta Ortega, la futura presidenta de Inditex, ha impulsado en A Coruña, cuyo puerto abre este sábado las puertas a esa muestra que Lindbergh siempre había soñado.
Amiga de Lindbergh, fotógrafo de su boda con Carlos Torreta, Marta Ortega ha elegido la ciudad gallega para presentar ‘Peter Lindbergh: Untold Stories’, una icónica retrospectiva que se puede visitar por primera vez en España.
Lindbergh dedicó dos años a seleccionar estás 161 imágenes que componen un recorrido por las cuatro décadas de su dilatada carrera, durante las que inmortalizó a algunas de las mujeres más famosas del mundo de la moda, el cine y más allá. Desde Nicole Kidman y Charlotte Rampling a Uma Thurman, pasando por muchas supermodelos que marcaron la década de 1990, como Naomi Campbell o Kate Moss.
La muestra se presenta en colaboración con la Lindbergh Foundation, que dirige Benjamin Lindbergh, hijo del fotógrafo, quien estos días ha visitado la ciudad herculina para presentar esta exposición a autoridades y periodistas.
La exposición ocupa una antigua nave de la zona portuaria de A Coruña, rehabilitada por la arquitecta Elsa Urquijo. Antes de acceder a la nave principal, un pasillo de oscuros contenedores portuarios nos marca el camino hacia la exposición. En esta especie de túnel, hay situados unas imágenes y declaraciones que forman parte de ‘Raw Beauty’, un libro que acompaña a esta muestra y que se basa en 22 entrevistas realizadas por Michael Benson. Entre los textos, encontramos palabras de Penélope Cruz, Rosalía, Naomi Campbell y Marta Ortega, impulsora de esta exposición.
Precisamente, en opinión de Ortega: "Peter y Galicia comparten muchas similitudes… la naturaleza salvaje, la belleza natural y esa calidez humana que nos hace sentirnos vivos. Para mí es un privilegio poder reunirles. Y es algo que hago con el único propósito de que los coruñeses, los gallegos, los españoles, y los viajeros de cualquier parte del mundo que visiten esta maravillosa tierra, puedan disfrutar libremente de esta exquisita exposición que Peter preparó hasta el último detalle antes de su prematuro fallecimiento. Espero, y creo firmemente, que este será solo el comienzo para muchas personas que, cuando descubran el mundo de Peter, se enamorarán de sus imágenes y se interesarán por conocer su figura más en profundidad".
Después de atravesar este túnel, se accede a la nave, del mismo color que los contenedores, que alberga la muestra de imágenes. Antes de pasar a ver la exposición como tal, que está organizada en tres capítulos, el visitante se adentra en una sala a oscuras donde la única iluminación es la de los vídeos proyectados en sus cuatro paredes.
La exposición sigue todas las indicaciones que dejó establecidas el fotógrafo antes de morir. "Se ha podido recrear el espacio como lo diseñó para Düsseldford", comenta su hijo, Benjamin Lindbergh.
Tres salas y más de 160 fotografías
La primera sala, Manifest, incluye 24 impresiones en papel blueback a gran escala que se exponen en una sala completamente negra. Peter Lindbergh escogió una a una todas las fotografías que querían que conformasen esta exposición, solo en escoger las imágenes de esta primera sala tardó varios meses. "Hasta que no la tenía todas seleccionadas no pudo seguir avanzando en el resto de la exposición", explica Thoai Niradeth, colaborador de la Fundación Lindbergh.
La siguiente sala, la central, llama la atención por su contraste. Es completamente blanca y sobre sus paredes cuelgan numerosas fotografías que muestran rostros que se pueden reconocer como Kate Moss o Nicole Kidman. En esta sala destaca la serie fotográfica a la modelo Naomi Campbell, que Lindbergh fotografío en Ibiza en el año 2000. En estas imágenes, se puede ver a la modelo sin maquillaje. Con ello, el fotógrafo quería demostrar que hay otra manera de ver el mundo de la moda, y eso es precisamente la pretensión global de esta muestra.
Todas las fotografías son en blanco y negro, salvo una que es en color y no muestra ningún rostro humano, sino un plato de comida.
La exposición se cierra con la instalación cinematográfica Testament, que revela una faceta desconocida hasta la fecha del fotógrafo alemán. Se trata de una película rodada a través de un espejo unidireccional a un preso condenado a muerte en Florida, y que posó durante 30 minutos mirando atentamente a su reflejo mientras el fotógrafo se encontraba detrás grabando.
Entrada y horarios
Esta exposición permanecerá abierta desde este sábado, 4 de diciembre, hasta el próximo 28 de febrero. Durante este tiempo, los horarios de la muestra serán los siguientes: de lunes a domingo, de de 10:00 a 20:00 h (último pase a las 19:00 h); jueves, de 10:00 h a 22:00 h (último pase a las 21:00 h) y sábados, de 11:00 a 20:00 h (último pase a las 19:00 h).
El acceso es completamente gratuito. Las aportaciones voluntarias de los visitantes y los beneficios generados por la venta de merchandising de la exposición serán donados al proyecto Future Stories de la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra (Universidad de Vigo), destinado a apoyar a jóvenes creadores en el inicio de sus carreras artísticas.