En 1968 se estrenaba una película que cambiaría para siempre la historia del cine: “La noche de los muertos vivientes”. Considerada una de las grandes obras maestras del terror de todos los tiempos, mostraba a los muertos volviendo a la “vida”. La película acabaría recaudando más de 42 millones de dólares en todo el mundo y la revista Time la incluyó entre las 25 mejores películas de terror de la historia.
Es considerada la base de todo el género zombi, ha influenciado a varias generaciones y posiblemente series como “The Walking Dead” no existirían si esta película no hubiera sido rodada. Su creador y director fue George A. Romero, un estadounidense director de culto considerado uno de los grandes genios del terror de todos los tiempos. Lo que pocos saben es que su padre nació en A Coruña, que dos de sus tías que vivían a caballo entre Galicia y los Estados Unidos financiaron su película y que Romero se inspiró en las historias que de pequeño le contaban sobre la Santa Compaña para crear su ópera prima, la película que inauguró un nuevo género y que le convirtió en el padre de los zombis modernos.
La familia Romero era originaria de Neda, Ferrol, aunque igual que muchos otros, emigraron en busca de un futuro mejor. Antonio Romero, abuelo de George A. Romero, acabó en Cuba y era el Presidente de la Cámara Hispano-Cubana en La Habana. Su familia era una de las grandes fortunas del país debido a que poseían grandes almacenes en la ciudad. Parte de la familia se quedó en Ferrol pero la rama cubana volvía a su tierra de origen siempre que podían.
Así fue como nacía en A Coruña Jorge Marino Romero, padre del protagonista de nuestra historia. En A Coruña vivió sus primeros años hasta que la familia decidió mudarse a la Gran Manzana de Nueva York. Allí se casó y practicaba su gran afición: rodar películas caseras con su cámara de 8mm. Quizás de esta afición nació la pasión de su hijo George por el cine.
Jorge Andrés Romero, nuestro protagonista, más conocido como George Andrew Romero, nacía en Nueva York el 4 de febrero de 1940. Tras graduarse en la Universidad de Pittsburgh en 1960, comenzó su carrera grabando cortos, trabajando en programas de televisión y grabando anuncios publicitarios junto a varios socios hasta que, aburridos de hacer siempre lo mismo, decidieron fundar una productora, “Image Ten Productions”, para grabar una película de terror.
Pero para poder cumplir su sueño necesitaban financiación y qué mejor que acudir a la familia. George recurrió a sus dos tías de A Coruña, Purificación y Nena Romero, dos mujeres con bastante poder económico que vivían en la Plaza de Ourense, para que le prestaran los fondos necesarios para rodar su película. Dicho y hecho. Pura y Nena se convirtieron automáticamente en sus productoras.
Pero las tías coruñesas de George A. Romero hicieron algo más que financiar su obra. Cada vez que visitaban a sus parientes norteamericanos, Pura y Nena le contaban al entonces jovencito George historias tradicionales de la lejana Galicia, sobre todo las leyendas de la Santa Compaña, esa procesión de muertos que vagan por los caminos entre la bruma y que son un peligro para los vivos. Aunque pueda parecer increíble, la Santa Compaña tiene mucho que ver con los zombis modernos de “La noche de los muertos vivientes” y el propio Romero así lo reconocía públicamente: “Esas leyendas están en mi subconsciente, no puedo negarlo”.
“La noche de los muertos vivientes” costó 114.000 dólares, recaudó más de 42 millones y, en la actualidad es de dominio público, ya que la distribuidora original olvidó protegerla con derechos de autor. La película inauguró un nuevo género y convirtió a Romero en el padre de los zombis modernos.
En 2007, en el festival de Sitges, Romero confesaba a El País su extrañeza ante la consideración de padre fundador del cine de terror: “Cuando me lo dicen, no me lo creo. Siempre he sido un director modesto, que ha desarrollado su trabajo fuera de Hollywood y por debajo de los radares de la industria y, de repente, me quieren convertir en el Padrino. Solo en mis últimas dos o tres películas he notado cierto dominio del arte de dirigir. John Ford hizo 250 películas y yo, de momento, he hecho tan solo 17. O sea, que aún me queda un largo camino”.
George Andrew Romero fallecía el 16 de julio de 2017 en Toronto, Canadá. Sus zombis han sido copiados hasta la saciedad, su nombre aún sigue siendo reverenciado y es considerado uno de los padres del cine de terror.
Así fue como el folclore del vudú haitiano, las leyendas gallegas y una inyección de dinero de 2 señoras de la Plaza de Ourense de A Coruña se mezclaron para conformar uno de los iconos del terror más reconocidos del Siglo XX y XXI, los zombis.
Por cierto, Pura y Nena nunca recuperaron su inversión pero seguro que poder ver a su sobrino como una estrella del cine mundial fue su mejor recompensa…
Historias de la Historia…
Iván Fernández Amil. Storyteller. Experto en Compras y Aprovisionamiento. Procurement Manager.
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Referencias:
- PEREZ OCHANDO, L. George A. Romero, cuando no quede sitio en el infierno. Editorial Akal, 2013.
- SALGADO GARCÍA, J.F. Historias de Galicia. La Voz de Galicia – Biblioteca Gallega, 2017.
- es.wikipedia.org
- laopinioncoruna.es
- elmundo.es
- genteyold.com
- vertele.eldiario.es
- cxt.es
- praza.gal
- lavozdegalicia.es