El gallego Alberto Fidalgo, nacido en Taboada (Lugo) y afincado en Oleiros (A Coruña), se proclamó campeón europeo de Marcha nórdica en el Europa Máster de Atletismo que se celebró la semana pasada en la Isla de Porto Santo, en Portugal. Con sus 36 años y aficionado a cualquier deporte que tenga que ver con la naturaleza, este joven lugués obtuvo el primer puesto de su categoría, el Europa Master M35.
Fidalgo está graduado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Al terminar la carrera se quedó en A Coruña, donde actualmente trabaja en la Fundación María José Jove entrenando a personas con discapacidad física. "Siempre me han gustado muchísimo los deportes de naturaleza, de montaña. Hago escalada, montañismo, alpinismo, barranquismo, todo en lo que pueda perder la vida. Soy multideportista", ríe el gallego.
Como muchos otros campeones de algún tipo de disciplina, Alberto Fidalgo empezó a practicar la marcha nórdica "por casualidad". El joven cuenta que en el 2016 se apuntó a una propuesta de la entrenadora Cecilia, del centro de Salud y Movimiento de A Coruña. El lugués indica que fue ella la que introdujo la marcha nórdica en la ciudad. "Empezamos a colaborar y yo alguna vez empecé a dar algunas clases con ella, pero no fue hasta 2021 cuando una compañera de trabajo, que estaba dando clases con Cecilia, me dijo que iban a ir a una competición en León", cuenta, y a partir de ahí empezó a competir en esta habilidad.
Campeón gallego
Desde entonces, hasta ahora, empezó a participar en las pruebas que se hicieron ese año en el nivel Open en Galicia, luego pasó al campeonato nacional, y "poco a poco" fue subiendo de puestos. En cuestión de un par de años se proclamó campeón gallego de marcha nórdica con la Copa Xunta de Galicia y se posicionó en el top 12 de España. Sin olvidar, que la semana pasada se convirtió en el campeón del Europa Master M35.
Además, con su Club de Montaña O Cordal de Lugo también ha recibido cantidad de premios entre los que volvió a alcanzar el puesto primero a nivel Galicia y el tercero en España de selecciones autonómicas.
Aun así, asegura que nada hubiera sido posible sin sus patrocinadores, sin los cuales asegura que no hubiera llegado hasta allí, ya que se trata de un deporte que "no está muy considerado en España", pero en el que hay que viajar mucho: "A mí la economía no me da para todo".
Además, se siente agradecido de que su mujer e hija pudieran acompañarle en esta última victoria. Espera de todo corazón que su niña de 5 años recuerde este momento tan importante para su padre: "Tiene muy buena memoria, así que espero que no lo olvide".