A lo largo de sus 113 años de historia, jugadores de gran nivel mundial han vestido la camiseta blanquiazul en Riazor. Estrellas como Mauro Silva, Maakay, Valerón o Djalminha dejaron un gran recuerdo en la afición y grandes momentos para la posteridad. Pero no siempre se ha acertado desde la dirección del Deportivo a la hora de fichar. También han llegado auténticos pufos a A Coruña, o simplemente jugadores que no rindieron a buen nivel pese a lo que costaron por su condición de estrellas.
Hoy, muchos de esos profesionales son recordados con humor por la parroquia deportivista, pese a que en su día provocaron, cuando menos, murmullos en Riazor. Nos asesora David Mosquera, @renaldinhos, experto conocedor del Dépor y de la historia del fútbol. Repasamos los peores fichajes de la historia del Deportivo, los "tuercebotas" y estrellados del club coruñés.
20. Kostadinov
Emil Kostadinov fue el gran héroe búlgaro de la fase de clasificación para el Mundial del 94 al anotar dos goles ante Francia que clasificaron a su país para la gran cita del fútbol planetario. Su papel en la Copa del Mundo también fue destacado, formando un ataque letal con un tal Hristo Stoichkov. Llegaron a semis y el Dépor lo fichó para su ataque. En 9 partidos solo anotó dos goles. Lo sorprendente es que su discreto paso por A Coruña le valió para fichar por el Bayern de Múnich. Un misterio lo del búlgaro.
- Equipo de procedencia: Oporto.
- Partidos jugados: 9.
19. Taborda
El bueno de Sebastián Taborda consiguió la friolera de 6 goles con el Dépor en 42 partidos repartidos en tres temporadas. Llegó para ser el recambio de Tristán y con la etiqueta un nueve rematador y con gran golpeo de cabeza. "En un partido puedo convertir un gol, pero puedo dar otros dos, por mi estilo de juego", dijo, manteniendo la compostura, Taborda ante los medios el día de su presentación. Uno de sus hitos en el club fue marcar un gol con la entrepierna ante el Valencia. También tuvo sus más y sus menos con la prensa. Llegó a agredir a un periodista y a amenazarlo de muerte a la salida de un entrenamiento.
- Equipo de procedencia: Defensor.
- Partidos jugados: 42 en 3 temporadas.
18. Milovanovic
El "nuevo Schuster" nunca llegó a brillar en Riazor. El Dépor se adelantó a otros grandes clubes europeos en la contratación de la joven perla yugoslaba Milovanovic. Con 22 años llegaba a Riazor para calentar banquillo con Toshack. Jugó 12 partidos el primer año, y el segundo no se le hizo ficha. Se retiró con solo 31 años. Ahora es secretario técnico del AEK de Atenas. Parece que le va mejor en los despachos que sobre el césped.
- Equipo de procedencia: OFK Belgrado.
- Partidos jugados: 12 en una temporada.
17. Radchenko
La historia de este delantero ruso es de película. Dmitri Radchenko es hoy en día coordinador de las categorías inferiores del Zénit de San Petersburgo. Pero hace unos años este carismático personaje daba sus últimas clases sobre el césped de la Costa da Morte. Sí, has leído bien. El de Leningrado se retiró en el Baio, después de formar parte también otro histórico de la zona como es el Bergantiños de Carballo, donde ejerció tras colgar las botas como entrenador de la cantera.
Cuentan las leyendas que a este ruso le gustaba empinar el codo. Lo corroborán un altercado doméstico en su casa de Oleiros y la Policía Local de Cambre, que lo pilló conduciendo con cinco vodkas de más en el 2009, cuando quintuplicó la tasa permitida. Radchenko volvió a la ciudad para disputar un partido de veteranos, donde se le vio muy agradecido a la gente y a sus excompañeros, con los que solo compartió un año vestuario. Marcó 5 goles en 28 partidos y se fue cedido al Rayo. También jugó en el Compos. Un genio el bueno de Dimitri.
- Equipo de procedencia: Racing de Santander.
- Partidos jugados: 28 en una temporada.
16. Rudy
Carlos Wilson Cachicote da Rocha llegó a la ciudad el verano de 2013, el año del segundo descenso casi consecutivo del Dépor. Venía con la carta de libertad debajo del brazo y durante sus primeros minutos blanquiazules demostró que le gustaba hacer caños. Fernando Vázquez pronto se pispó de como era este portugués de ascendencia angoleña y lo sentó en el banco. En enero hizo las maletas y se fue al Belenenses lisboeta. En este pasado mercado invernal rescindió contrato con el Waterford irlandés. Tiene 29 años. Parecía que podría ser el Ronaldinho de segunda, pero no fue así.
- Equipo de procedencia: Círculo de Brujas.
- Partidos en el club: 18 en media temporada.
15. Koval, Pantilimon y Tyton
Desde la redacción decidimos unir a estos porteros en un único puesto del ránking porque entre los tres no hacían uno bueno. Tyton, Koval y Pantilimon eran, en resumidas cuentas, más malos que la droga. La situación era tan dramática bajo los palos que al lado de estos, Rubén Martínez era Iker Casillas.
Tyton llegó el primero, para ser el portero titular en el 2016. Era desesperante ver como los balones le pasaban por delante sin que el polaco hiciese nada para evitar el gol del rival. Una vez despejó un balón con la cara a ras de suelo. Podía coger la bola con las manos, pero prefirió dar algo de espectáculo a una parroquia deportivista ya curada de espanto.
Pantilimon llegó al Dépor para cubrir la lesión de Rubén. Quién iba a decir que un tipo que mide más de dos metros no llegaría a ningún balón. Le gustaba hacer la estatua en la portería para salir guapo en la foto. No duró ni seis meses. En el Nottingham Forest también hizo de las suyas.
Lo de Koval ya no tiene nombre. Llegó para sustituir a Pantilimon. La gente debió pensar: "Malo será que sea peor que el rumano". Un solo partido como titular bastó para conocer la respuesta. Cantada, gol del Eibar y autoexpulsión. Lo que pasó el año pasado en la portería del Dépor daba para hacer una serie de comedia… O de terror.
- Clubes de procedencia: Stuttgart, Watford y Dínamo de Kiev, respectivamente.
- Partidos en el club: Tyton (16 partidos y 31 goles en contra), Pantilimon (7 partidos y 11 goles en contra) y Koval (2 partido, 3 gol en contra y 1 expulsión).
14. Nuno
Otro portero en la lista de peores fichajes del Dépor, y no será el último. Nuno fue la primera gran operación de Jorge Mendes como agente. Lendoiro lo trajo en 1996, cuando ya había otros 4 porteros en la plantilla. Difícil de explicar su llegada al club, que estuvo marcada por una surrealista historia.
El propio Nuno, que ahora dirige al Wolverhampton en la Premier, contó en una entrevista que para forzar su salida del Vitoria de Guimaraes hizo creer a su presidente que era un borracho. Destrozó su piso y fingió ante el mandatario portugués que estaba bebido. La treta, tramada por Mendes, coló y Nuno llegó a A Coruña. Con el Dépor solo jugó 8 partidos. Le tocó limpiarle los guantes a Songo’o y Molina.
- Equipo de procedencia: Vitoria de Guimaraes
- Partidos en el club: 8 (desde 1996 al 2002)
13. Sidicley
¿Quién? Ya, es normal que no lo recuerdes. Seguramente haya pocas personas que recuerden la carrera de Sidicley. Este mediocentro brasileño fichó en el 2001 por el Dépor procedente de la liga catarí. Fue cedido al Elche y nunca llegó a pisar A Coruña. Su carrera transcurrió entre clubes humildes de su país natal y ligas menores de Polonia y Austria. Ahora se gana la vida como portero de un edificio de Rio de Janeiro y compite en un campeonato de porteros en Brasil. Como lo lees. Historia surrealista la de Sidicley.
- Equipo de procedencia: Watara.
- Partidos en el club: 0.
12. Bassir
"El Maradona del desierto. ¿Hace falta decir más?", señala con sorna David Mosquera. Bassir fichó en agosto del 97 por 300 millones de pesetas. El marroquí anotó 5 goles en 18 partidos. La llegada de Maakay le cerró definitivamente las puertas del equipo y en el 2001 se marchó al Lille francés. Protagonizó el documental "Bassir e Karpin" junto al jugador celeste, tratando en primera persona la adaptaciones de un marroquí y un ruso a tierras gallegas.
- Equipo de procedencia: Hilal.
- Partidos en el club: 31 (5 goles).
11. Pepe Sand
Apunta David Mosquera que Pepe Sand es el máximo goleador de las categorías inferiores de River. Este poderoso delantero argentino es recordado en A Coruña por bajarle los humos a Pepe en un Dépor-Madrid de Liga. Poco más hizo, pues no llegó a anotar ni un solo tanto. Sigue jugando y metiendo goles en Lanús. Sobre su vida personal, señala David Mosquera que hace poco lo acusaron de maltrato animal. Tiene caballos y se le murió uno.
- Equipo de procedencia: Al-Ain
- Partidos jugados: 5.
10. Morel y Rindaroy
Filipe voló del nido y dejó la banda izquierda del Dépor desierta. En realidad, vinieron dos para cubrir su puesto: Morel y Rindaroy. Acabaron jugando Raúl Carnero y Manuel Pablo. Rindaroy se quedó sin ficha para la segunda vuelta, pero siguió entrenando en Abegondo con sus compañeros. Morel se pudo redimir el año siguiente, en Segunda, donde le quitó el puesto a otro "gran" lateral como Ayoze.
- Clubes de procedencia: Boca Juniors y Molde.
- Partidos jugados: 36 (en dos campañas) y 6.
9. Diakite
Diakite era otro de esos jugadores que pasaron fugazmente por A Coruña. Hizo uno de los peores partidos que se ha visto a un central en Riazor ante el Real Madrid. Jugó otros dos encuentros y se fue en enero. Víctor Fernández dijo en su día que necesitaba cariño el jugador. Ahora juega en la tercera división italiana. Igual este deporte no era lo suyo.
- Equipo de procedencia: Sunderland.
- Partidos jugados: 3.
8. Rufai
El príncipe nigeriano (su padre era rey de una región de Lagos, antigua capital del país africano) llegó al Dépor en el 97 procedente del Hércules. Rufai estuvo siempre a la sombra de Songo’o y no pudo demostrar el potencial que atesoraba. "Jugaba con pantalones largos. Mítico, pero poco hábil en la portería", señala David Mosquera. Celebró como propio un penalti fallado por Savio (Real Madrid) en Riazor. Memorable su Mundial del 98, más por lo extradeportivo que por sus "paradas".
- Equipo de procedencia: Hércules.
- Partidos disputados: 9 en dos temporadas.
7. Luizao
Luizao llegó en 1997 junto a otro brasileño llamado Djalminha. Le pudo el ímpetu en su presentación, cuando se definió como una mezcla entre Iván Zamorano y Batistuta. No se adaptó a la ciudad y nunca tuvo intención de hacerlo. En su único año como blanquiazul se le vió falto de forma y sin motivación. Anotó 4 goles en 15 partidos y se fue cedido a Vasco da Gama, antes de ser traspasado al Corinthians tras negarse a regresar a A Coruña. Curiosamente, recuperó su olfato goleador y fue uno de los campeones del mundo con Brasil en el 2002.
- Equipo de procedencia: Palmeiras.
- Partidos jugados: 15 (4 goles).
6. Javito
¡Ay, el tránsfer! El pobre Javito solo pudo lucir la camiseta del Dépor en un amistoso en Abegondo ante un equipo japonés. La FIFA le negó el dichoso papel al Dépor mientras en la plaza Pontevedra todos estaban pendientes del fax. Llegó del Aris de Salónica y la de A Coruña era su gran oportunidad de probar suerte en la élite. Historia triste, pero cómica al mismo tiempo.
- Club de procedencia: Aris de Salónica.
- Partidos jugados: 0 (no cuentan las pachangas en Abegondo).
5. Acuña
David Mosquera señala que fue uno de los negocios más ruinosos de la historia del Dépor. El paraguayo costó unos 15 millones de euros y vino con una sanción de varios partidos bajo el brazo después de patear a un aficionado de su propio equipo cuando estaba en el Zaragoza (se puede apreciar en el vídeo). Esa inactividad pasó factura a un jugador que venía para dar descanso a Mauro y Sergio en la medular.
Varias cesiones después, el Dépor rompió su contrato alegando "inaptitud" para jugar al fútbol. El Toro denunció y el club coruñés tuvo que pagarle todavía más. Sorprendentemente, sigue en activo a sus 45 años en Paraguay.
4. Manteca Martínez
Ídolo de muchos en Argentina (y también de David Mosquera), el Manteca Martínez tuvo un paso nefasto por A Coruña. "Llegó roto físicamente pese a haber sido el goleador de Boca en el Clausura del 97", señala Mosquera. Dejó instantáneas en la retina del aficionado, como cuando falló un gol bajo palos ante Osasuna. Suya es la "asistencia" del primer gol de Abreu con el Dépor. Se le escapa el balón entre las piernas y uruguayo remata a bocajarro. Costó 500 millones de pesetas (unos 3 millones de euros) y se fue al año a terminar su carrera en el Nacional de Montevideo.
- Club de procedencia: Boca Juniors.
- Partidos jugados: 4.
3. Evaldo
A día de hoy se desconoce la clase de magia que usó Evaldo para hacer creer a Mendes y al mundo del fútbol que era un jugador profesional. Deberían indemnizar a cada aficionado que asistió a alguno de sus partidos en Riazor. Con él, la banda izquierda del Dépor era más accesible que Tristán un domingo por la noche en Chevalier.
Todavía duele hoy en día recordar su fugaz paso por A Coruña. Lendoiro dijo en su presentación que le recordaba a Flavio. Hubo algún aficionado que pidió a Oltra con un vídeo en YouTube que no lo pusiese más. Todavía sigue engañando a la gente, ahora en la segunda división portuguesa. No está en el número uno de este ránking porque ni eso se merece.
- Equipo de procedencia: Sporting de Portugal.
- Partidos disputados: Demasiados para lo malo que era (fueron 16).
2. Abreu
Hace casi dos años, el Loco Abreu entró en el libro Guinness como el jugador con más equipos en su currículum de la historia. Parte de ese récord se lo debe al Dépor, que se cansó de cederlo. Hasta 8 equipos diferentes en los 6 años que perteneció a la escuadra herculina: Gremio, los Tecos (por dos ocasiones), San Lorenzo, Nacional (también dos veces), Cruz Azul y América.
Llegó muy joven a A Coruña y no cuajó en el Dépor previo a la Liga del 2000. Abreu costó 10 millones de dólares y firmó por 10 temporadas. Dejó para el recuerdo una graciosa celebración en uno de sus pocos goles como blanquiazul.
- Equipo de procedencia: Nacional
- Partidos disputados: 15 (3 goles).
1. Renaldo
Y llegamos al número uno del ránking. No podía ser otro que Renaldo. ¿De verdad fue el peor? Es posible que no. De hecho, hay una triste historia detrás de su rendimiento en A Coruña. Pero sus declaraciones el día de su presentación lo condenaron: "Soy una mezcla entre Rivaldo y Ronaldo". También dijo: "Soy como Ronaldo pero con ‘e'" y "tengo la misma velocidad, el mismo dribbling y la misma llegada que Ronaldo. Ya lo he demostrado en Brasil". Si míster Piquito de Oro hubiese marcado goles de la misma manera que soltaba perlas ante la prensa, ahora tendría un Balón de Oro.
En el Deportivo marcó 5 goles en 23 partidos. Tuvo problemas familiares: su hijo enfermó y sus dos padres murieron estando él en el Dépor. Se fue cedido a Las Palmas, Lleida y Extremadura. En ninguno de esos equipos triunfó. Su rendimiento en A Coruña no fue del todo malo, pero sus palabras lo condenan a estar en el número 1 del ránking.
- Equipo de procedencia: Atlético Mineiro.
- Partidos jugados: 23 (5 goles).