El Deportivo pondrá fin a una temporada para olvidar el próximo fin de semana en el encuentro ante el Numancia. Los blanquiazules cumplieron los pronósticos y superaron al Langreo en Riazor por cinco goles a cero, cuajando uno de los mejores partidos de esta complicada campaña. Sin embargo este resultado no puede ocultar todas las carencias mostradas por una plantilla diseñada para ascender a Segunda División.

Los jugadores del Deportivo disfrutan de dos días libres y no volverán a los entrenamientos hasta el próximo miércoles. El partido ante el Numancia será ya intrascendente para el Deportivo. Los sorianos por su parte, se jugarán la plaza restante para competir en Primera RFEF con el Racing de Ferrol.

El deportivismo ya se encuentra más pendiente del futuro que del presente. Comienza ahora un periodo largo hasta que el balón vuelva a rodar de manera oficial en Riazor. Muchos interrogantes se abren ahora y se irán resolviendo en las próximas semanas.

Configurar la dirección deportiva

Sin duda la primera piedra angular del proyecto estará en la dirección deportiva. El pasado mes de febrero la salida de Richard Barral parecía inevitable. La configuración de la plantilla y los malos resultados hacían presagiar un relevo en esta parcela. Antonio Couceiro evitó por el momento cualquier referencia sobre este asunto y emplazaba al final de temporada para tomar una solución definitiva.

El banquillo

En este apartado la continuidad de Rubén de la Barrera parece un hecho. El dueño de la entidad blanquiazul está satisfecha con el rendimiento del entrenador coruñés y Rubén de la Barrera parece convencido de continuar aquí. Por el momento todos sus esfuerzos se centraban en lograr resultados en el césped pero sus palabras siempre han ido encaminados a su continuidad aquí. Próximamente debería resolverse esta cuestión.

La nueva plantilla

A partir de este momento comienza el incesante baile de nombres y la configuración de la nueva plantilla. Muchos jugadores tienen contrato en vigor pero la propiedad tendrá la última palabra. Este año quedó demostrado que contratos altos no son sinónimo de éxito. Algunos jugadores han mostrado en público su predisposición a continuar en el Dépor. Borja Granero, Borja Galán o Lucho García son algunos de ellos. El club trabaja también en la renovación de algunos jugadores jóvenes que tendrán hueco en la plantilla de la próxima temporada.