Este sábado el Deportivo visitará el campo de Balaídos para enfrentarse al Celta B. El conjunto blanquiazul acude a la cita con siete puntos de nueve y la necesidad de completar un buen partido después de dejar sensaciones agridulces en este inicio de campaña.

Sin embargo lo que no varía es la fidelidad y apoyo de su afición. El Celta informaba del envío de 600 entradas para la afición coruñesa. El conjunto herculino abría un plazo de reserva para conocer el interés real de la gente en viajar hasta tierras viguesas. Y una vez más, la respuesta ha sido impresionante. Casi 2.000 personas solicitaron entrada para el partido y ahora toca realizar el reparto, ya que no parece que la entidad viguesa envíe más localidades.

Lo que parece claro es que Balaídos registrará una gran entrada. Sin fútbol en Primera División, el morbo de ver al Dépor jugar ante el filial atraerá seguro a mucha gente. La temporada pasada el Celta B ya fue capaz de ganar a los coruñeses en Vigo.

Partido de alto riesgo

Hace días se conocía que el partido había sido declarado de alto riesgo. Las lamentables imágenes vividas la temporada pasada tras el pitido final han provocado que se refuerce la seguridad para que no se repitan.

En lo deportivo los dos conjuntos llegan con sensaciones diferentes. El filial logró en Ceuta un triunfo que refuerza la moral tras un inicio algo dubitativo. El Dépor por su parte llega con siete puntos y sin conocer la derrota, pero con bastante presión porque las sensaciones no terminan de ser las mejores. Ganar en Vigo daría sin duda un impulso en una semana en la que los coruñeses jugarán tres partidos de liga que marcarán su futuro más inmediato.