Marea blanquiazul 2024.

Marea blanquiazul 2024. RCDeportivo

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Así vivió A Coruña el ascenso a Segunda: la marea blanquiazul toma la ciudad

Miles de coruñeses tomaron las calles de A Coruña desde las primeras horas de la mañana. La jornada ha tenido varios momentos para el recuerdo: reencuentros, homenajes e incluso accidentes

12 mayo, 2024 22:49

El Deportivo ha vuelto a Segunda división. Lucas Pérez anotó el 1-0 a favor del Deportivo en el minuto 57 y consiguió aquello con la que la afición ha soñado durante todo el día. La ciudad se echó a la calle ya por la mañana, iniciando la ruta en la calle San Juan y rematando en Riazor. Aunque lo cierto es que la ciudad luce desde hace días los colores blanquiazules: casas, negocios y autobuses urbanos sacaron a pasear sus banderas a lo largo de toda la semana.

La ciudad se engalanó y llegó a agotar la tela blanquiazul de las mercerías de A Coruña. Durante los últimos días la tensión, y la emoción, fue en aumento hasta llegar a la locura que este domingo vivió la ciudad. Miles de coruñeses, la Policía Local calcula que más de 7.000, participaron esta mañana en la previa del partido contra el Barça B.

Inicio en la calle San Juan

Marea blanquiazul en la calle San Juan

Marea blanquiazul en la calle San Juan

El día comenzó, como es habitual, en la calle San Juan. Allí centenares de coruñeses se dieron cita para calentar motores: cánticos, banderas, bengalas y, sobre todo, pasión. También se dieron cita símbolos del deportivismo como el expresidente del club, Augusto César Lendoiro. Entre fotos y aplausos, Lendoiro se dio un buen baño de masas al grito de "¡Presidente, presidente!". Entre los cientos de aficionados también se vieron rostros famosos, como el del periodista coruñés Nacho Carretero.

No faltaron tampoco las míticas hormigoneras, que recorrieron diferentes barrios de la ciudad como Orillamar y el paseo marítimo. En el resto de la ciudad el goteo de personas con camisetas, bufandas y banderas del club era constante. Incluso resultaba difícil salir a la calle sin toparse con algún símbolo blanquiazul.

Tras unas horas de calentamiento, la afición salió del Campo da Leña al filo de las 15:00 horas. Con el retraso habitual en este tipo de eventos, la marea blanquiazul avanzó con paso lento, pero firme, y enfiló el Paseo Marítimo. Encabezando la marcha estaba una gran lona con el lema "Os tempos son chegados", una frase que también se reprodujo en el campo con una emocionante loca gigante con una foto de Bebeto y de Arsenio Iglesias.

Recibimiento de los jugadores

Ambiente de hoy en Riazor

Ambiente de hoy en Riazor Deportivo

Ya en Riazor, la afición se situó en los alrededores del estadio para recibir a los jugadores. El bus del Dépor tardo casi una hora en llegar al estadio y, cubiertos por la Policía Nacional, finalmente llegaron al estadio entre vítores y bengalas. Precisamente, una bengala fue la que provocó una de las imágenes más curiosas de la jornada: un incendio en el techo del autobús del Deportivo. La última vez que pasó algo similar fue en 1991 cuando una chocó contra la cubierta de preferencia superior del estadio de Riazor.

Por su parte, el autobús del Barça B llegaron al estadio entre abucheos de la afición. Todos los jugadores, no obstante, entraron al estadio sin mayor dificultad. Fue en torno a las 18:00 horas cuando los aficionados comenzaron a reubicarse, hacer tiempo en la Fan Zone de Riazor y, más tarde, entrar al estadio.

El partido: lona de Arsenio y Bebeto

Homenaje a Arsenio y Bebeto en Riazor

Homenaje a Arsenio y Bebeto en Riazor

Riazor batió un nuevo récord de asistencia con más de 31.000 espectadores. Muchos de ellos guardaban una gran sorpresa que mostraron justo antes de iniciarse el partido: una gran lona con una imagen de Arsenio y Bebeto con el lema "Os tempos son chegados".

La afición no desanimó en ningún momento y dieron apoyo al equipo en un partido en el que el Deportivo vivió momentos más holgados y otros de mayor sufrimiento. Todas las dudas se despejaron, eso sí, en el minuto 57 con el gol de Lucas Pérez. El estadio estalló en ese preciso instante en gritos y lágrimas de alegría, una imagen que también se repitió en la explanada de Riazor.

Cuando el colegiado pitó el final del partido fue el momento de celebraciones, abrazos y lloros. Jugadores y aficionados supieron disfrutar el momento y del vínculo tan especial que les une. Los jugadores dieron la vuelta al estadio celebrando con todos los deportivistas el éxito.

El momento más especial, sin embargo, lo protagonizó Lucas Pérez, que se dirigió a los aficionados recordando su marcha de primera división y su vuelta a la antigua Segunda B: "¡Bendita locura!", espetó.