El expresidente del Deportivo de La Coruña, Augusto César Lendoiro, reflexiona sobre la necesidad de efectuar fichajes, conceder cesiones a equipos de Primera RFEF y tomar decisiones duras. Lendoiro defiende que no todas las estrellas del Dépor tienen cabida en el 11 titular. 

"Sólo deberían jugar como titulares tres de ‘los cuatro magníficos’, pero ¿quién es el que se queda en el banquillo?, ¿Yeremay, Mella,Soriano, Lucas?", se pregunta. La decisión, asegura, la tiene el entrenador Imanol Idiakez.

Derrotas injustas que descubren las carencias

La liga no ha comenzado bien. No tienen mayor importancia las injustas derrotas de  las dos primeras jornadas, aunque el hecho no se producía desde la triste 1979-80, que finalizó con descenso a Segunda B. Nuestro objetivo hoy es el ascenso.
 
Sí han servido, en cambio, los partidos de Riazor y El Alcaraz para descubrir las carencias del equipo. Idiakez ha solicitado un delantero con gol -para mí es imprescindible- y un extremo derecho. Dos futbolistas que se unan a los Soriano, Escudero, Chacón, Petxarroman, Mfulu, Helton, Obrador y Patiño.
Un año más, el Deportivo va a incorporar a una decena de nuevos jugadores, lo que debería ser objeto de seria reflexión, pero ahora nos ocupan las entradas y salidas inmediatas.
 
Las carencias han quedado claras ante Oviedo y Huesca. Ni uno ni otro hicieron méritos para llevarse la victoria, pero nosotros tampoco. El dato, que habla por sí solo de la mayor necesidad del Depor, es que, en ambos encuentros, tuvo en un defensa, Ximo, a su ‘delantero’ más peligroso.
 
Quizás por la ausencia de un hombre de área, el equipo volviese a ser previsible. La entrada de Barbero, en los dos partidos, hizo que el Dépor crease más peligro y que él disfrutar de claras ocasiones de gol, aunque sin acierto. La entrega de Barbero es impagable -como antes había sido la de Svensson- pero el Deportivo para pensar en ascender necesita más.
 
Salvo las ocasiones de Barbero y Ximo, solo alguna brillante jugada de Soriano, Mella, Yeremay o Lucas rompía líneas y generaba cierto peligro al rival. Era la constatación de las carencias y los ‘obervooking’ de nuestra plantilla.
 
El tiempo se agota pero pienso -y lo digo por mi tendencia de aguardar hasta el último minuto- que el riesgo lo debe tener controlado Fernando Soriano. Me imagino que, al tratarse de importantes fichajes, la estrategia que ha diseñado es tener que esperar hasta el final, y contar con un Plan B. Lo contrario sería un suicidio.
 
Solo quedan cuatro días para decidir los canteranos a ceder y fichar dos buenos delanteros y un central de nivel. Me explicaré.
 
Si Idiakez no confía en Barcia y en Rubén -y salta a la vista que así es- se les debe ceder ya. Son los que más destacan, llevan entrenado con Imanol más de un año y no cuenta con ellos. Tienen que salir. Es lo mejor para jugadores y club.
 
Que no se les quiera engatusar con los minutos de la basura. Por su fidelidad, condiciones y edad no pueden perder otro año. Se deben ir a un Primera RFEF y jugar treinta partidos. Aunque los chicos no quieran es preciso convencerlos.
 
La cesión de Barcia obligaría al fichaje de un buen central. Es una posición que estoy seguro le gustará reforzar a Idiakez, aunque sea otro el problema que le quita el sueño.
 
Su verdadera preocupación pienso que será cómo darle solución al ‘overbooking’, de mucha calidad, que tiene en la media punta y cómo eso afecta a la alineación. Tiene a Lucas, Soriano, Chacón, Hugo Rama… pero carece de un 'nueve’.
 
Y ese hombre no es Lucas. Ni nos quieran ni se quieran engañar. El de Monelos donde hace daño, no es en el área, sino fuera de ella, en su balcón, con ese disparo demoledor que valió, y valdrá, muchos puntos.
 
Es humano que Idiakez trate de buscar la forma de contar con Soriano y Lucas en el once titular. Ambos son jugadores diferenciales del Depor, pero el equipo, con los dos, se resiente. Solo los veo en la media punta y en el volante ofensivo cuando lo exija un resultado adverso.
 
El equipo sufre tanto si Soriano se va a la banda izquierda -baja su rendimiento y es eliminado Yeremay- como si Lucas ocupa la punta del ataque. En este caso el Depor pierde al 7 en su puesto natural y carece de ese especialista que se pide a gritos o del propio Barbero.
 
Solucionar bien este problema es muy posible que sea la obsesión de Idiakez. Él sabe, mejor que nadie, que sólo deberían jugar como titulares tres de ‘los cuatro magníficos’, pero ¿quién es el que se queda en el banquillo?, ¿Yeremay, Mella, Soriano, Lucas? Es su decisión.