Los ferrolanos María Teijeiro e Isai Rodríguez avisaban de que iban a "por ello". Esta pareja fitness comparte entrenamientos y vida y si hace unos meses era Isai el que celebraba los éxitos internacionales de su pareja en Portugal; recientemente le ha tocado a María celebrar el ‘top 5’ de su compañero de fatigas en un evento de talla mundial celebrado en Polonia. En los próximos días, Isai volverá a subirse a una tarima, en esta ocasión en Rumanía, y ambos tienen claro que "cuando compite uno, lo hacemos los dos".

Estos dos deportistas ejercen de asesores y "soporte mental" de un modo recíproco. Confiesan, eso sí, que hay momentos complicados en este proceso deportivo que requiere de muchos sacrificios.

"Estás preparado para pasarlo mal porque es tu objetivo", explica Isai que se siente arropado por María y esto le hace sentir que "no estás solo". Ella está ahí para decirle que "hay que tirar para adelante" y "cuando suena el despertador para entrenar, me anima a levantarme".

Se reparten las tareas de casa o el minucioso proceso de elaboración de las comidas del día, en función de las necesidades competitivas del otro. Esta organización permite que, en momentos clave, cada uno pueda centrarse al máximo en el entrenamiento y preparación.

Algo que, reflexiona Isai, "en la tarima no se aprecia" y es que este tándem sentimental y deportivo ha unido de un modo muy especial a esta pareja de deportistas.

Isai, que en unos días se enfrenta a una competición en el país en el que estuvo estudiando, tiene claro que su principal objetivo es hacer que María "disfrute y viva este viaje, estos días y este campeonato" al máximo.

Y es que las cosas a las que uno debe renunciar, detalla Isai, pasan por "no poder acudir a una boda o comida familiar porque estás en pleno proceso de preparación y eso puede resultar duro e incluso egoísta".

María apostilla que "hay momentos de la competición en que la cabeza no te dejar hacer este tipo de cosas porque hay fases de agotamiento" en las que el cansancio invita "a quedarme en casa, descansar y centrarme".

Quiere María, eso sí, dejar claro que "este deporte es compatible con la vida social y familiar" y el objetivo de Isai de disfrutar de manera conjunta de la experiencia, más allá de los resultados, evidencia que sus objetivos de alcanzar logros internacionales no les han hecho renunciar a ese amor y cariño, sino que lo han reforzado.

Ahora les toca embarcarse en esta nueva aventura deportiva, en Rumanía, en la que Isai buscará subirse al podio y en la que contará con el apoyo de María que es, en palabras del deportista, " mis ojos, mi cabeza, mi psicóloga y mi motivadora".