El proyecto ‘Ecospherewines’ ha dado el pistoletazo de salida para mejorar el ecosistema de viñedos situados en zonas de alto valor ecológico a través de la implementación de una red de infraestructura verde para su conservación y gestión sostenible.
Para abordar este reto, el proyecto se apoyará técnicamente en dos pilotos situados en el sur de Francia y en España-Portugal con cuatro zonas experimentales. En España, las actuaciones se llevarán a cabo en Galicia y Castilla y León: en la Reserva da Biosfera Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo, en A Coruña y en la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Meseta Atlántica, en Fermoselle (Zamora), ambas zonas protegidas.
En el caso de Portugal, la acción se desarrollará en Foz Côa, mientras que Francia, la investigación estará localizada en la región de Gaillac, en Occitana, al suroeste del país, una zona con gran historial de implementación de infraestructura verde.
En estos viñedos, se implementará una metodología que permita seleccionar, calcular y cartografiar los servicios ecosistémicos más relevantes para establecer escenarios de futuro que faciliten la toma de decisiones y permitan la transferencia y replicabilidad de las soluciones testadas a nivel internacional.
Un total de 13 entidades procedentes de España, Francia y Portugal trabajarán bajo la coordinación de la Fundación Juana de Vega durante los próximos 3 años en esta iniciativa que cuenta con un presupuesto de 1.623.393,25 euros cofinanciado en un 75% por el Programa Interreg Sudoe con Fondos FEDER.
Precisamente, el director de Innovación de la Fundación Juana de Vega, Alfonso Ribas, destacó durante la primera jornada de trabajo que "este proyecto supone una oportunidad para que el desarrollo del sector vitivinícola del sur de Europa incorpore aspectos ligados al cuidado del paisaje, la biodiversidad, el agua, el suelo, y el patrimonio cultural, material e inmaterial”.