Antes de que termine el mes de junio el municipio de Narón (A Coruña) contará con su segundo supermercado de la firma Mercadona. Estará en el número 296 de la carretera de Cedeira y la cadena ya anuncia su próxima apertura en el cierre del recinto.

Abrirá al público antes del próximo verano en un establecimiento de unos 1.800 metros cuadrados de tienda, la superficie estándar de todos los nuevos supermercados de la cadena.

Por su estratégica ubicación dará servicio a vecinos de las inmediaciones no solo de Ferrol y Narón, también de la zona de Valdoviño (A Coruña), pues estará a poco más de 10 kilómetros de la puerta del Sol de esta localidad costera.

De este modo, Narón recupera el segundo centro de esta marca después de perder el de la rotonda de Freixeiro hace unos cuatro años. El otro se ubica en la Gándara.

El nuevo local también contará con el servicio ‘Listo para Comer‘ y una zona de descanso con sillas y mesas en el que el cliente podrá calentar y degustar la comida, que se compra en tienda en envases fabricados con materiales naturales, como la caña de azúcar (material compostable), el cartón o el papel.

Mejor ergonomía, aislamiento y paneles solares

En cuanto al aspecto medioambiental, al igual que en el resto de nuevas aperturas, en este caso la firma ha adoptado varias medidas que permiten reducir hasta un 40 % el consumo energético respecto al modelo de tienda convencional, explican fuentes de la cadena, como la mejora del aislamiento térmico y acústico con la optimización de los materiales y el grosor de paredes y techos o nuevos arcones de congelado más eficientes. Además, el nuevo local de Narón tendrá un sistema de iluminación LED automatizado que se regula según las zonas y los momentos del día para una mejor gestión.

Otra de las medidas es la colocación de módulos fotovoltaicos con los que seguir avanzando hacia el autoconsumo y la descarbonización, porque una tienda de Mercadona con paneles solares ahorra aproximadamente un 20 % de su consumo energético anual respecto a una tienda sin energía fotovoltaica instalada, lo que supone una reducción aproximada de 30 toneladas de CO2 por supermercado.

Con el objetivo de facilitar las tareas diarias de los trabajadores, la cadena traslada que el nuevo local incluirá medidas para mejorar la ergonomía y eliminar sobreesfuerzos.

En este sentido, un ejemplo es el nuevo mueble de caja, desarrollado en colaboración con el Instituto de Biomecánica de Valencia. La tienda también dispone de zonas comunes para que los empleados disfruten de una mayor comodidad en sus momentos de descanso.