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No es el mejor momento para el comercio local de A Coruña, ya no solo por las obras de la calle San Andrés que se iniciaron hace meses y mantienen parte del centro de la ciudad levantado, sino que la competencia de las grandes superficies comerciales es cada vez mayor.

Este panorama afecta a pequeños negocios de emprendedores como Lía Gimeno, de la pequeña tienda friki de A Coruña La Liada, ubicada en la calle San Nicolás, que recientemente ha publicado en las redes sociales del negocio que se ha visto obligada a cancelar todos los pedidos de 2025 con los distribuidores.

"La Liada llega a su fin tal y como se la conoce, pensé que estos días iban a ayudar en algo pero nada. Voy a intentar dar un giro de 180 grados a esto, que la cabeza no pare. Hasta pronto mis liantes y liantas", ha expresado la dueña de la tienda en X.

Hace tan solo unos meses se dirigió a sus seguidores en sentido positivo anunciando que había tardado dos años pero por fin lanzaba la web de La Liada. Una alegría que desgraciadamente ha durado poco. No es la primera vez que las cosas se complican para este negocio, ya en 2022 Gimeno hizo una llamada de auxilio en sus redes que finalmente fue contestada con numerosos pedidos en época navideña para diferentes partes de España que ayudaron a tirar del carro un poco más.

Ahora se debate entre la liquidación de los productos que tiene a la venta o tomarsse un año sabático para reordenar prioridades y pensar nuevos modelos de negocio que puedan funcionar de mejor manera. 

"Te das cuenta de que no eres una opción"

Cuando abrió la tienda, recuerda que hubo mucha concienciación en la sociedad para ayudar al pequeño comercio y en su caso esto fue positivo, aunque ahora con perspectiva lo achaca a "la novedad" del momento. Sobre las ventas y el comercio online, concreta que "la gente es muy cómoda", algo que asegura que entiende, pero apunta que a raíz de esto nota muchísimo que su tienda "no es una opción para los compradores".

"Mucha gente viene a decirme que viene a comprar un producto a la tienda y que no lo pide por Amazon porque no le llegaría a tiempo", explica, a la vez que confirma que el género del que dispone físicamente está a la venta online.

"Son productos de los que hay miles de opciones para comprar online y la gente prefiere hacerlo así", dice. Tanto es así que comenta que hablando con otros pequeños comercios de otras ciudades concuerdan en lo mal que está yendo la campaña de Navidad, mientras que les consta que amigos repartidores necesitan más horas del día para repartir pedidos de Amazon.

"La venta online, Amazon y las grandes superficies ya nos han comido. Es algo que ya íbamos viendo venir, lo que la gente puede conseguir por internet no va a venir a una tienda física a conseguirlo", razona, a la vez que destaca que lleva seis años con la tienda luchando pero admite que "ahora hay que ser realista": "A veces tienes que saber cuándo parar", sentencia.

Sobre su propio caso, indica que "estoy frenando antes de meterme en un problema económico" y el cierre no es inminente pero sí en unos meses, en principio. "No quiero llegar al punto de mucha gente que lucha e intenta y al final se ven agotados psicológicamente y totalmente arruinados económicamente", cuenta.

"Siempre me voy a dedicar a la venta de artículos de regalo y coleccionismo"

Gimeno concreta que siempre se va a dedicar a la venta de artículos de regalo y coleccionismo y que no se saldrá de la línea del anime: "Una posibilidad pasa por tomarme un año sabático y esperar a que acaben las obras de San Andrés que hay al lado de mi tienda", dice.

En este contexto, subraya que "la ciudad está en obras, parece que la están construyendo de cero porque no hay calle en la que no haya un andamio, no vi nada igual en mi vida. Esta ciudad era un sueño y ahora mires donde mires hay un andamio con una casa pudriéndose o con una casa en reformas, se ha parado desde hace dos o tres años", sentencia.

Asimismo, sobre otra de las opciones de su futuro laboral, que sería liquidar los productos de La Liada, detalla que podría quedarse en el mismo local pero con otro modelo de negocio alejado del merchandising otaku y friki: "Saldría de ese público que tengo actualmente y aprovecharía que tengo el local para hacer otro proyecto", opina, a la vez que medita sobre lo que está viviendo que la causa principal se debe a que "el modelo de compra ha cambiado".