Cambiar el mundo suena ambicioso, sobre todo si pensamos en hacerlo de forma individual, ¿no? Pero todo depende del concepto que tengamos de “mundo”. Puede ser el globo terráqueo, el conjunto de la humanidad o tu entorno. ¿Te ves capaz de cambiar el mundo que te rodea? Desde IGATA tenemos la certeza de que, en mayor o menor medida, podemos cambiar, o influenciar, el mundo que nos rodea para aportar nuestro granito de arena para mejorarlo.
Pero, ¿cómo voy a cambiar yo el mundo?
No solo depende de lo grande que sea el “mundo” que queremos cambiar, sino también del concepto de emprendimiento que tengamos interiorizado. Cuando nos hablan de emprendimiento solemos pensar en la parte más empresarial del emprendedor, con ambición económica y se nos olvida que emprender, en realidad, se trata de iniciar una actividad y que todo aquel que tenga iniciativa es emprendedor aún que no cree una Startup o empiece un proyecto empresarial. ¿No podemos emprender con el simple objetivo de aportar valor a la sociedad?
Una persona emprendedora puede ser ese compañero de clase que organizaba las cenas o los viajes , o esa persona que propone hacer una recogida benéfica en la empresa o el barrio, o quien busque, con cualquier acción por pequeña que sea, mejorar su entorno y la vida de quienes le rodean.
Debemos deshacernos del concepto de emprender a gran escala y ser conscientes del potencial que tiene cualquier iniciativa que llevemos a cabo como individuos y que podamos expandir a nuestro entorno. Piensa en el concepto de bola de nieve, ¿empezamos con una bola gigante o hacemos una pequeña que rodando se va haciendo más grande? Convierte tus ideas en pequeñas bolas de nieve para mejorar la sociedad, y que con el apoyo de otras personas con mentalidad de “emprendimiento social”, podáis hacer rodar la bola y causar un impacto positivo en la sociedad.
Estamos rodeados de ejemplos de emprendimiento con impacto social
En IGATA, el Instituto Galego do Talento, tenemos muy interiorizado el concepto de emprendimiento social ya que el proyecto ha crecido gracias al impulso de voluntarios que queremos mejorar nuestro entorno y poner en valor el talento vinculado a Galicia. Como parte de esta puesta en valor, buscamos visibilizar proyectos que también tienen un carácter social y ayudar a fomentar esa inquietud que nos lleva a las personas a movilizarnos para emprender proyectos sin ánimo de lucro, con objetivos de impacto social. Por eso, a continuación tienes algunos ejemplos que pueden servir para entender esta otra forma de ver el emprendimiento e inspirar, quizás, nuevas ideas.
Un ejemplo puede ser LaconNetwork, una comunidad de emprendedores gallegos surgida a finales de 2009 por iniciativa de un grupo de personas con inquietudes y que ha día de hoy suma más de 10 años de actividades. Una iniciativa que empezó gracias a la proactividad de un pequeño grupo, y que ha conseguido beneficiar a toda la comunidad que se ha formado alrededor y, quien sabe, seguramente cambiado el mundo de muchos emprendedores, en mayor o menor medida, gracias a las conversaciones, relaciones y oportunidades surgidas en sus actividades.
Por otra parte está Slowbasic, una comunidad de personas preocupadas por vivir de un modo más sostenible y responsable con el entorno. A veces el más pequeño detalle, como compartir consejos o experiencias, puede inspirar a decenas o miles de personas que pueden llegar a cambiar su entorno gracias a modificar sus hábitos y estilo de vida. Imagínate por un momento qué pasaría si todos, o la mayoría de nosotros, fuésemos conscientes del impacto en el medio ambiente que generan pequeñas acciones del día a día. ¿No pensarías en cambiar pequeños hábitos?
Seguro que muchas veces te habrás quejado, o escuchado a gente hacerlo, sobre lo parado que está el barrio o la ciudad, o las pocas actividades que se hacen. Y también es probable que de alguna de estas conversaciones surgiese la idea de las Meninas de Canido. Lo que empezó siendo una iniciativa individual para dinamizar el barrio ferrolano de Canido, dando una nueva vida a los muros urbanos como lienzo para el arte callejero hoy en día, más de una década después, se ha convertido en un atractivo para el barrio, y para la ciudad de Ferrol, que cuenta con su propio festival.
Lo importante es actuar
Es probable que aunque no lo considerases “emprendimiento social” fueses consciente de que hay personas que buscan mejorar su entorno. Todos tenemos buenas ideas, o buenas intenciones, pero lo que nos suele fallar esa chispa inicial que nos anime a tomar acción, a emprender.
Volviendo de nuevo al ejemplo de IGATA, el que conocemos de primera mano, te aseguramos que en lo que se ha convertido ahora el proyecto es algo con un impacto mucho mayor que el que imaginábamos inicialmente. Con esto queremos animarte a que si tienes una idea que puede ayudar a mejorar la sociedad que te rodea, por pequeña que sea, la compartas y enciendas esa chispa que seguramente acabe generando un impacto positivo en tu entorno.
Y acabamos con una pequeña reflexión. Imagínate que empiezas a darle forma a esa idea que tienes para mejorar algún problema que ves a tu alrededor. Compartes esta idea y haces algunas actividades, pero no tiene el impacto que esperabas y ayuda a menos personas de las que inicialmente habías pensado. ¿No merece la pena solo por el hecho de haber mejorado la vida de algunas personas? Piénsalo.
Autor: Ángel Fraga Varela
Dirección Instituto Galego do Talento