Un experimento que tiene como objetivo "eliminar prejuicios y que las personas con discapacidad intelectual opten a puestos de trabajo para los que están sobradamente preparadas". Así presenta la Federación Gallega de Asociaciones en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo un vídeo que ya es viral y ha sido compartido miles de veces a través de redes sociales.

Fademga plena inclusión Galicia lanzó la campaña con ocasión del día internacional de las personas con discapacidad, celebrado el pasado 3 de diciembre. Poco más de una semana después más de 1 millón de personas ya han visto en Facebook este experimento social sobre discapacidad intelectual y empleo.

Un experimento que se ha llevado a cabo reuniendo a tres profesionales acostumbradas a llevar a cabo procesos de selección de altos directivos pero que en esta ocasión se enfrentan a una búsqueda de perfiles de vendedores o cuidadores de niños en el comedor escolar. "¿Cuántas cosas nos perdemos por mirar el mundo a través de nuestros prejuicios?", esa es la pregunta con la que arranca el vídeo y el reto que plantea.

Les proponen para las vacantes a unos candidatos que llevan muchos años de formación, encadenando contratos de pocas horas, con los que dialogan a través de una pantalla: "En cinco años solo coticé 60 días" o "Llevo 15 años formándome pero siempre me dicen que no estoy capacitada", son algunas de sus confesiones antes las responsables de recursos humanos.

Reflexión sobre oportunidades y responsabilidad social

Cuando son aceptados para el puesto, aparecen los rostros de las personas que solicitaban los puestos de trabajo, reconociendo verdades como que "ante los noes se hacen más fuertes". Una puesta en valor de sus ganas por tener un empleo sin pedir "un trato preferente, solo oportunidades".

"Las empresas deberían tener una mayor responsabilidad social", terminan reconociendo las propias profesionales de recursos humanos". "Si tienen la motivación, las empresas deberían considerarlos como unos candidatos más", añaden.

Una campaña que muestra las cifras reales detrás de la búsqueda de empleo en las personas con discapacidad intelectual: solo 7 de cada 100 que pueden trabajar, lo hacen. Además, existe una gran brecha salarial con respecto a los salarios que perciben por los mismos trabajos las personas sin discapacidad: cobran un 40% menos.

Una cuestión que sirve también para poner el foco en el sobreesfuerzo económico que soportan las familias con una persona con discapacidad intelectual entre sus miembros. Fademga lo cuantifica en 24.000 euros al año, una cifra que ascendería hasta los 45.000 euros más de desembolso "para las familias que tienen que atender a una personas con gran necesidad de apoyo".

Como ellos mismos dicen: "No anunciamos turrón ni licores pero quizá sí merezcamos un hueco en las noticias sobre campañas navideñas". Porque aunque sea una realidad innegable, a veces no la vemos si no ponemos el foco sobre ella. Algo que Fademga ha conseguido con su experimento: una realidad desconocida por quien no la padece y que empobrece a la sociedad si le damos la espalda.