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Repsol ha comunicado los resultados de la investigación del accidente laboral que se produjo en la refinería de A Coruña el pasado 26 de marzo. La comisión que ha llevado a cabo dicha investigación ha estado formada por técnicos especialistas de las distintas áreas de la refinería, delegados de prevención y representantes sindicales de los trabajadores. La conclusión de la misma ha sido que el accidente, que causó la muerte de Unai Martínez y dejó herido a otro trabajador, se produjo por "una apertura no autorizada de una tubería de proceso".

La compañía señala que en la investigación se "ha llevado a cabo un análisis pormenorizado y riguroso de toda la información, documentación, inspecciones e imágenes existentes; así como de las declaraciones y testimonios de distintos intervinientes relacionados o presentes en los hechos". Dicho documento será remetido a las "Administraciones competentes".

El accidente se produjo cuando dos trabajadores de la empresa Nervión Industries, Engineering and Services, S.L "procedieron a la apertura de una tapa", mientras se encontraban trabajando en una tubería, lo que ocasionó que "inhalaran un gas residual". Los hechos sucedieron durante una parada de hidrotratamiento de la planta.

Así, tras investigar las circunstancias, se ha concluido que "el permiso de trabajo utilizado, sólo autorizaba la tarea de engrasado (suavizado) de pernos, pero no permitía la apertura de tapas, por lo que se produjo una apertura no autorizada de una tubería de proceso".

Por otro lado, se asegura que "esta tubería, que estaba fuera de servicio y aislada, contenía restos de gas de proceso en su interior (sulfhídrico) porque, aunque estaba previsto ejecutar en ella durante la parada un trabajo de limpieza con agua a presión, todavía no se habían emitido los permisos de trabajo necesarios para la preparación de la tubería previos a dicha limpieza, tal como se recoge en el protocolo de parada".

Por tanto, el informe concluye que "en los trabajos que dieron lugar al accidente no se siguieron las normas y procedimientos establecidos, incumpliéndose el protocolo de parada y la norma de permisos de trabajo pues no estaba autorizaba la apertura del equipo".

La compañía hace hincapié en que los resultados del informe reflejan lo ocurrido y no atribuyen responsabilidades a nadie. La Comisión ha acordado una serie de acciones de mejora encaminadas al refuerzo de la formación y proceso de verificación del aprendizaje de las normas y procedimientos existentes para que no se repitan hechos similares en el futuro.