Inditex ha decidido cerrar las tiendas de Massimo Dutti y Oysho en el centro comercial de As Cancelas en Santiago de Compostela. La decisión afecta a un total de 15 trabajadores en los establecimientos compostelanos.
Desde el sindicato CIG señalan que esta noticia llegó ayer. "Faremos unha folga indefinida o próximo luns 23 de xaneiro. Solicitamos que Inditex recoloque aos traballadores afectados polo peche das tendas", explica Carmiña Naveiro, representante de CIG- Servizos en Santiago Compostela.
A los trabajadores les han comunicado que el cierre de sus centros de empleo será efectivo a finales de mes, el 31 de enero. En total son 9 trabajadoras de la tienda de ropa, mientras que para la especializada en prendas íntimas, afectará a 6 personas.
Los cierres de los centros de trabajo forman parte de un plan anunciado por la empresa de mejora del espacio comercial y que también afecta a empleados de otras comunidades autónomas. Precisamente el pasado mes de diciembre, la firma coruñesa anunció el fin de las tiendas de Massimo Dutti, Oysho y Zara Home en Valladolid. Las medidas se están haciendo en lugares donde no se pueden realizar ampliaciones para llevar a cabo el modelo integrado que tiene previsto la empresa para contar con tiendas más grandes, ecoeficientes, totalmente digitalizadas y sostenibles, en las mejores localizaciones y con mayor capacidad de venta.
El anuncio de clausura de estos establecimientos choca con las previsiones que tenían los sindicatos en Galicia, y que confirmaron a Quincemil el pasado mes de diciembre. De acuerdo con la representación de los trabajadores, Inditex no tenía previsto cerrar tiendas en este año 2023.
En el acuerdo estatal que Inditex tiene con UGT y CCOO se estipula que los trabajadores serán relocalizados en centros de empleo cercanos, en un radio de aproximadamente 25 km. En caso de que un empleado en particular no desee esta opción se le ofrece un despido con una remuneración más alta. De acuerdo los datos que trascendieron en verano de 2020, la firma coruñesa planeaba cerrar entre 250 y 350 tiendas en España.