Nordés Club Empresarial tiene desde mediados de marzo un nuevo director: Gabriel Barrós. El coruñés afronta esta nueva etapa en su trayectoria profesional con "la ilusión de dar continuidad a los proyectos puestos en marcha" por la anterior dirección y de "activar otras vías de trabajo y relación", según confesaba cuando fue anunciado su nombramiento. Una ilusión que sigue intacta un mes después.

Hablamos con el director de Nordés, que tiene como objetivo darle más visibilidad a este conglomerado de empresas para que los coruñeses "sepan lo que hacemos y dónde estamos" y conseguir que cada día se sumen más firmas. Y es que Nordés ha crecido mucho desde su creación en plena pandemia, a través de videoconferencias, y actualmente es una realidad palpable con sede en Matogrande

¿Cuáles son tus sensaciones y cómo afrontas este reto que tienes ahora por delante?

Las sensaciones son muy buenas. La verdad es que la acogida, tanto por parte de las personas y empresas socias como de la Junta directiva, ha sido francamente buena. Esta semana cumpliré un mes al frente de Nordés y tengo ganas de hacer cosas. Ganas de seguir hacia adelante, de avanzar y de poder hacer cada vez más sólido y más grande tanto la base de Nordés como el alcance que tiene la actividad del club.

Para ti además es un cambio, ¿no? Periodista, director de comunicación del Deportivo…

Es un cambio de ámbito, aunque en parte el trabajo tiene mucha relación. No es un ámbito tan público como el de la radio o el del Deportivo, que es la institución central de la sociedad de esta ciudad, pero sí en otro ámbito más reducido y más específicamente orientado al mundo de la empresa. Consiste en dar esa unidad, esa información, esa comunicación y esas actividades que vertebran el día a día de Nordés Club Empresarial dentro de otro ámbito completamente diferente, en otra dimensión más pequeña por el alcance que tiene el club. Son tareas, desafíos y retos similares: hacer una marca más fuerte como hice mientras estuve en el Deportivo, hacer una marca más conocida y reconocible y ampliar la base social, la base de empresas y de personas socias que participan en el día a día.

Nordés nació en un momento complicado, en plena pandemia. ¿Cómo han sido estos años y en qué momento está ahora?

Recojo el legado de Aïnhoa Mallo, a quien quiero agradecer todo el trabajo y la base que ha dejado en Nordés. Nunca es fácil empezar un proyecto desde cero y ella lo ha hecho de la mano de las dos juntas directivas que ha tenido Nordés. Y también un agradecimiento al trabajo realizado por la Junta Directiva anterior, por la Junta Directiva actual y por las personas que han formado parte de ambas durante toda la trayectoria.

No fue fácil porque se empezó en pandemia sobre un proyecto que estaba primero en la cabeza de sus ideólogos, después sobre el papel y ahora ya es desde hace bastantes meses una realidad en el espacio y en las instalaciones que tenemos en Matogrande. Todo eso hay que desarrollarlo, llevarlo a cabo. Así que ha sido un un trabajo duro, porque al final hay que convencer a mucha gente de que el proyecto es sólido, es sostenible y es viable. Y en eso estamos: en hacerlo más sólido, más sostenible y más viable. Intentando aumentar esa base social y generar el mayor número de actividades que tengan valor para cada persona que forma parte de Nordés.

¿Cuáles son los retos que tiene por delante?

El de ser algo más conocido. Nordés tiene mucha fuerza dentro del mundo empresarial. Muchas empresas y personas que trabajan en las empresas conocen Nordés y esperemos que sean más en los próximos meses, pero también que esté un poquito más cerca del resto de la actividad social de la ciudad. Hay muchas organizaciones que tienen su peso específico dentro del día a día en A Coruña y creo que en Nordés, por representar a tantas empresas importantes de la ciudad como las que forman parte del grupo de socios y también por formar parte de ella, tenemos que estar más metidos en la parte social, en el día a día de la ciudad: que conozca nuestras actividades para que lleguen cada vez a más gente y que eso redunde en beneficio de las empresas que son socias de Nordés. Y este trabajo también es en beneficio de la sociedad para la que trabajan todas esas empresas que son parte de Nordés.

¿Por qué crees que es tan importante que las empresas estén involucradas en el día a día de A Coruña?

Porque al final son la base del motor que mueve a la ciudad. Todas las personas que vivimos en A Coruña trabajamos para alguna empresa y esas empresas pagan sus sueldos en nuestra ciudad. Son las que permiten que esta ciudad tenga muchas de las cosas de las que presumimos como coruñeses y coruñesas. Y por lo tanto, creo que es muy importante que las empresas sean un motor dinamizador de una ciudad. Si las empresas se agrupan es para ser más fuertes y en este caso desde Nordés tenemos que ayudar a que eso sea así. Creo que es fundamental, es una parte del entramado social clave. Todos tenemos vinculación con empresas de una u otra manera y por lo tanto no se puede estar de espaldas a esa sociedad a la que nos debemos y que tanto ofrece a estas empresas, y viceversa.

¿Cómo son las empresas coruñesas del presente y cómo van a ser esas empresas coruñesas en el futuro?

Lo hemos visto en los últimos años: el hecho de que la Aesia esté en nuestra ciudad, que muchas de las empresas punteras a nivel de tecnologías de la información sean coruñesas y además formen parte de Nordés, que haya empresas punteras a nivel nacional como Estrella Galicia, que también es socio corporativo de Nordés, Vegalsa a través de Eroski… Muchísimas de las empresas que forman parte de esta asociación están encabezando sus rankings a nivel nacional dentro de sus sectores, muchos vinculados al futuro por el que pasa la economía, sobre todo vinculada a las nuevas tecnologías y al desarrollo industrial. El futuro es muy halagüeño, es muy positivo, porque A Coruña, a pesar de su situación geográfica, tiene ese peso específico dentro del mundo empresarial gallego y del mundo empresarial a nivel nacional y por lo tanto no cabe otra cosa que ser optimistas.

El viernes tenéis una cena solidaria a favor de Acougo. ¿Qué puedes comentarme de este tipo de acciones que desarrolláis también desde Nordés y en particular de esta que está muy próxima?

Desde Nordés no solo se quiere hacer actividades vinculadas al mundo empresarial, de la formación o corporativo. Las citas anuales que tienen más carácter social dentro del club son la cena de cierre de temporada, la cena de apertura de temporada y la cena de Navidad. Hay una cuarta que es esta que por primera vez se realiza, que es una cena solidaria a favor de Acogo.

Es positivo que las empresas que están metidas en el club y que hacen su día a día aquí y también el resto de las que conforman el conglomerado de Nordés se reúnan una vez al año para sacar este carácter solidario, para trabajar y unir esfuerzos a favor de una buena causa. Y en este caso empezamos por Acougo porque es la clausura del programa Femenino Plural, no hay otra institución que lo haga. Nordés, protagoniza acciones de todo tipo vinculadas al Día de la Mujer desde el 8 de marzo hasta esta semana, que se cierra el mes de la Mujer con esta cena solidaria y para una asociación que preside una mujer que, además, fue directiva de Nordés en la primera Junta. Creo que todo se junta para que podamos tener una noche en la que los socios y socias de Nordés se diviertan, pero sobre todo muestren su lado más solidario, colaborando con la buena causa de la Asociación Gallega de Familias de Acogida.