Alén Space: La primera empresa gallega dedicada al espacio

Alén Space: La primera empresa gallega dedicada al espacio

Tecnología

Alén Space: La primera empresa gallega dedicada al espacio

Dentro del New Space, la startup de origen vigués tiene mucho que aportar, con 13 años de trayectoria a sus espaldas.

9 octubre, 2020 06:00

No muchos saben que en Nigrán (Pontevedra) se encuentra una empresa dedicada al espacio. Se trata de Alén Space, especializada en el desarrollo de proyectos de negocio en el sector espacial, en concreto dentro del diseño, fabricación y operación de pequeños satélites; una revolución que está llamada a cambiar nuestras vidas para siempre.

Hay múltiples negocios que antes eran ajenos al espacio, pero que en este momento pueden meterse de lleno en un cambio estructural, prescindiendo de las grandes agencias que antes controlaban este sector.

El estándar Cubesat creado en 1999 define un nuevo tipo de pequeño satélite, cuya fiabilidad reduce ampliamente los costes para introducirse en la revolución conocida como New Space.  

Y dentro del New Space, la startup de origen vigués tiene mucho que aportar, con 13 años de trayectoria a sus espaldas y la mirada puesta en los mercados europeos y latinoamericanos.

La startup gallega pionera en el New Space

Lo primero que sorprende de esta empresa con apellido y vocación internacional es su nombre con impronta gallega, Alén significa ‘más allá’, un término que define el ADN del equipo desde sus comienzos. 

Y es que esta compañía nació en el ámbito universitario, donde unos jóvenes ingenieros forman la Agrupación Estratégica Aeroespacial de la Universidad de Vigo, la responsable de enviar al espacio en el año 2012 el nanosatélite Xatcobeo. 

Xatcobeo es su primer proyecto, desarrollado codo con codo con INTA (Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial). Esta operación ya ha pasado a la historia, porque no solo fue el primer nanosatélite gallego enviado al espacio, sino también el primer nanosatélite español

Tras este primer logro, el equipo de Alén quiso ir “más allá” y durante una década continuó aprendiendo e innovando con diversos proyectos de investigación y desarrollo de pequeños satélites con agencias de talla mundial como la Agencia Espacial Europea (ESA), la NASA, o la Agência Espacial Brasileira (AEB). 

El equipo de Alén Space

El equipo de Alén Space

De agrupación universitaria a empresa destacada del New Space

El paso lógico tras estas colaboraciones exitosas fue la creación en 2017 de una empresa para comercializar los servicios y productos basados en las plataformas desarrolladas hasta el momento

Así es como surgió Alén Space, estableciendo la sede en Nigrán y con ganas de poner sus servicios en el mapa. 

La idea siempre fue que el conocimiento adquirido durante estos primeros diez años de vida no se quedase en la Universidad o en ámbitos cerrados, sino que la sociedad pudiese acercarse a algo completamente ajeno hasta ahora y que puede ayudar en numerosos ámbitos. Los nanosatélites hacen del mundo un lugar mejor, mejor comunicado y más seguro.

La revolución de los nanosatélites

Para entender esta pequeña revolución, hay que hablar de la democratización del espacio: frente a un satélite convencional que suelen pesar desde unos cientos de kilos hasta varias toneladas, tenemos un nanosatélite de menos de 20 kilogramos con un coste muy inferior y un tiempo de desarrollo de menos de un año. 

El sector del New Space está en claro crecimiento y viviendo un bum en todos los sentidos. Es un caldo de cultivo perfecto para cientos de startups, donde el espacio genera nuevas ideas de negocio que hace pocos años nos parecerían de ciencia ficción. 

Los nanosatélites pueden ayudar a múltiples negocios de muy diferentes sectores. Desde seguimiento de barcos y aviones, misiones universitarias, el Internet de las Cosas (IoT) o el uso para investigaciones científicas. Dando pie a que los beneficios se compartan con otros negocios, resultando beneficioso para nuestro tejido empresarial.  

En el caso de Galicia, en el año 2018 el nanosatélite LUME-1 demostró un sistema para alerta temprana que puede ayudar en la lucha contra los incendios forestales, desarrollado en la Universidade de Vigo por el equipo de Alén Space y que parte del proyecto europeo FireRS para la alerta antiincendios.

Estos cambios revolucionarios pueden crear una cadena de valor dentro de la industria gallega, el sector que más se debe fortalecer tras la crisis sanitaria que estamos viviendo.

Tecnología y talento 100% gallegos

El equipo de Alén no solo tiene talento, también tiene los medios: la fabricación, la integración y la operación de los nanosatélites se hace de forma íntegra desde la comunidad gallega. En las instalaciones de Alén Space existe la tecnología necesaria para desarrollar los CubeSats y los equipos imprescindibles para ser operados cuando están en órbita. Únicamente se abandonan las instalaciones para algunas pruebas específicas y para los lanzamientos, sin embargo, el grueso de las operaciones queda en nuestra tierra.

Otro compromiso constante para la startup gallega es la creación de empleo local. Desde sus comienzos el equipo no ha hecho más que crecer, sumando perfiles multidisciplinares. Su estrecho vínculo con el ámbito universitario hace que Alén Space apueste siempre por dar una oportunidad de crecimiento al talento joven. Los ingenieros recién graduados no tienen que emigrar a otros países para encontrar un proyecto ambicioso en el que desarrollar su carrera profesional.

Alen Space y Sateliot

Alen Space y Sateliot

Sumando casos de éxito: una constelación de nanosatélites para dar cobertura global

Los nanosatélites con sello gallego pueden tener múltiples aplicaciones para diversos ámbitos, los miembros de Alén Space son expertos en idear ‘cargas útiles’ específicas para cada proyecto.

La última alianza de la empresa gallega es la formada con Sateliot, mediante un proyecto pionero que planea dar cobertura IoT bajo una arquitectura 5G de forma global, y tendrá una verdadera marca española, gallega y catalana. El servicio estará en funcionamiento para el año 2022, bajo una constelación de 100 satélites que orbitarán a unos 500 kilómetros de altura, la habitual en los nanosatélites.

El equipo se ha encargado ya del diseño y desarrollo de la carga útil que va a bordo de su primer satélite. El diseño de ingeniería está basado en más de cinco años de desarrollo y permite su reconfiguración con el nanosatélite en órbita. De esta forma, se podrá actualizar con nuevos desarrollos y avances -algo que no suele ser posible en los sistemas de comunicación por satélite tradicionales- adaptándose así a los dinámicos estándares propios del New Space.

La tecnología que irá a bordo de este primer nanosatélite está compuesta por una tarjeta SDR (Radio Definida por Software), donde se procesan las señales recibidas y se generan las que se transmiten a tierra. Y también por una placa de acondicionamiento de radiofrecuencia y una antena desplegable que permitirá la comunicación con los dispositivos terrestres. 

Además, Alén Space se encuentra desarrollando la carga útil avanzada que volará en su posterior constelación para dar ya el servicio comercial.

Pero este no es el único proyecto entre manos. El equipo ya está trabajando en misiones científicas de  exploración lunar a través de robots para una futura base lunar con astronautas. Y en nuevas colaboraciones con INTA a través de su proyecto ANSER, donde se la empresa gallega desarrolla un sistema de comunicación intersatelital. 

Aunque el mundo se haya parado en los últimos meses, las expectativas del New Space siguen expandiéndose. Este sector de momento no tendrá techo porque en la última frontera aún hay mucho que explorar.