Susana Tena es gallega, pero vive en Madrid desde hace siete años. En su calendario siempre intenta dejar un hueco libre para ir a Galicia a ver a su familia "una vez al mes, por lo menos". Ella fue una de las primeras pasajeras en estrenar la alta velocidad entre Ourense-Madrid el 21 de diciembre de 2021 y cuenta que el servicio "al principio estaba muy bien de precio, pero últimamente es un desfase". Son muchos los usuarios de la conexión Galicia-Madrid que se quejan del alto coste que tiene viajar en alta velocidad a Galicia, pero, ¿hay solución al conflicto?
Susana es una de las afectadas por la escalada de precios. Hace escasos días realizó una operación que dejó su cuenta bancaria temblando: 240 euros por un billete de ida y vuelta dirección Ourense-Madrid entre el 22 de diciembre y el 1 de enero. Sin embargo, no le ha resultado extraño, ya que, según su experiencia, los fines de semana, los festivos y los puentes son días en los que los precios suben exponencialmente. En consecuencia, ha tomado la decisión de pasarse al avión: "Es sangrante, en el próximo puente de noviembre iré en avión", explica visiblemente irritada.
En el momento de escribir estas líneas en la página web de Renfe se pueden encontrar billetes entre los 65 y los 135 euros para viajar dirección Ourense-Madrid durante la primera semana de noviembre. Aunque la diferencia sea notoria, el motivo de tal descompensación es simple: la ley de la oferta y la demanda. Mientras que el billete más barato corresponde a un miércoles a las 10:00 horas, el más caro permite viajar un domingo a las 19:00 horas.
Usuarios habituales del tren Ourense-Madrid cuentan que lo más común es encontrar billetes de ida y vuelta en torno a los 130 euros; siendo los fines de semana, festivos y puentes, las peores fechas para reservar asiento. Con todo, hay ocasiones en las que pagar tampoco es la solución ya que la demanda es tan alta que "hay tortas por las plazas", según cuentan.
Gema Díaz comparte el mismo problema que Susana. Ambas gallegas explican que es importante coger el billete con la máxima antelación posible y, aun así, es muy complicado encontrar una buena oferta. "Si lo miras la misma semana las mejores horas están agotadas", explica Gema Díaz, que generalmente viaja tras salir de trabajar.
En el puente del Pilar Gema decidió tomarse unos días libres de su trabajo en Madrid y visitar a la familia. En un primer momento revisó los billetes de tren disponibles, pero su sorpresa llegó al comprobar que un viaje de ida y vuelta le costaría 200 euros: "Al final lo que hice fue venir en avión", resume.
El tren parece ser la opción preferida de muchos porque, tal y como explican Gema y Susana, es rápido, cómodo y las estaciones de ferrocarril suelen estar situadas en el núcleo urbano de las ciudades. "A mi me gusta más el tren, pero últimamente estoy yendo en avión porque los precios son prohibitivos", aclara Gema.
La escalada de precios: los Talgo no llegan y Renfe opera sin competencia en Galicia
¿Qué provoca esta gran subida en los servicios de Alta Velocidad que une Ourense y Madrid? La Asociación Tren Media Distancia de Galicia apunta a cuatro pilares: pocas plazas en los trenes (cerca de 3.000 diarias), mucha demanda, una sola compañía y falta de calendarios anticipados.
Renfe en ciertos servicios ofrece precios estables, puesto que son subvencionados por el Estado al entenderse que tienen la Obligación del Servicio Público (OSP) -es el caso de Cercanías, Media Distancia, Ancho Métrico y Avant-. Sin embargo, no se aplica la misma norma para servicios comerciales como los AVE, Avlo, Alvia, Euromed e Intercity. Estos últimos se rigen por la ley de la oferta y la demanda, como los vuelos.
En este sentido, Renfe regula sus precios desde el verano de 2022 con el sistema Revenue Management con el que, según indica la compañía, "los clientes pueden configurar su ‘billete a la carta’ contratando únicamente la flexibilidad y los extras que necesiten". La ley de la oferta y la demanda rige este método, por lo que Renfe recomienda comprar las localidades con la mayor anticipación posible y "seleccionando trenes en horas valle o de menor ocupación".
En función de parámetros internos, Renfe sube o baja los precios de los servicios comerciales como el AVE, lo que está afectando a los usuarios recurrentes de la línea Ourense-Madrid. No obstante, cabe preguntarse ¿Por qué los precios son "desorbitados" en Galicia, pero no en otras partes de España como Madrid o Barcelona?
La respuesta es que Galicia se mantiene a la espera de la llegada de los Avril de ancho variable -que suman meses de retraso y que este mismo martes la Agencia Europea del Ferrocarril (ERA) homologaba tras más de un año de pruebas-. Este modelo está llamado a aumentar el número de plazas hasta las 500 por tren, reducir los tiempos de viaje, facilitar la llegada de empresas privadas que puedan competir con Renfe como Iryo u OUIGO y, en consecuencia, provocar una bajada de los precios.
La llegada de la Alta Velocidad más allá de Ourense está prevista, si no se suman nuevos retrasos, para el primer trimestre de 2024. Sin embargo, la llegada de Avlo -la operadora ‘low cost’ de Renfe- no está claro cuándo se producirá. Pese a que en julio de 2023 la Ministra de Transportes apuntaba a 2024 como fecha límite, no se han vuelto a producir declaraciones que reiteren tal compromiso.