6 irresistibles razones por las que visitar A Coruña este verano
Bañada por el Atlántico, la ciudad herculina ofrece a residentes y visitantes un sinnúmero de planes para disfrutar de la música, la gastronomía, el deporte o la naturaleza
6 julio, 2024 02:18Contenido patrocinado
La Ciudad de Cristal nunca duerme. A Coruña es una de esas urbes que rebosan energía, sobre todo en verano, y eso redunda en la forma de disfrutar de la vida de sus residentes: gente abierta que vive en la ciudad en la que nadie es forastero.
A Coruña es una península bañada por el Atlántico, fresca, enérgica y con mucho que ofrecer durante todo el año, aunque es en verano cuando la ciudad se vuelve más internacional. San Juan ha sido el pistoletazo de salida del verano coruñés y lo ha hecho por todo lo alto: más de 160.000 personas llenaron los barrios y playas de la ciudad para vivir la noche más mágica del año. Una noche que se acaba al amanecer, al igual que el resto de las jornadas que se avecinan para disfrutar de una ciudad que lo tiene todo.
Música, teatro, gastronomía, fotografía, deportes, playa, naturaleza… Esta ciudad de leyenda (se dice que Hércules construyó aquí un enorme faro para conmemorar su victoria sobre el gigante Gerión) se adapta a los deseos y aficiones de cualquier persona que la visite.
Una ciudad con el deporte como pasión
A Coruña es una ciudad donde el deporte es religión. El fútbol, el baloncesto o el hockey son algunas de las pasiones de los coruñeses y así lo demuestran cada fin de semana, cuando las gradas se llenan de vítores, palmas y apoyo.
Pero el amor por el deporte no solo se vive en los campos. Las playas urbanas de Riazor, Orzán, Matadero o San Amaro son lugares idóneos donde practicar y disfrutar del surf, paddle surf o vóley. Además, su extenso Paseo Marítimo, considerado el más largo de Europa continental gracias a sus 13 km de recorrido, se llena desde primera hora de la mañana de runners, ciclistas y gente patinando.
Playas para disfrutar y saborear
Y hablando de playas, no pierdas la oportunidad de disfrutar de sus arenales en cualquier época del año. Los más atrevidos acuden en pleno invierno a revitalizar su cuerpo y mente con un chapuzón en las frías aguas del Atlántico, aunque durante el verano las playas coruñesas son mucho más.
Para bañarse, para pasear, para disfrutar de un atardecer mágico mientras haces un pícnic… Los arenales de la Ciudad de Cristal no solo reflejan la tranquilidad y el bienestar propios de la época estival, sino que también muestran la pasión por la música, la cultura y la tradición como las fiestas de San Juan, declaradas de Interés Turístico Internacional.
Música para alimentar el alma
Y tradición también es visitar A Coruña para disfrutar de conciertos y espectáculos musicales de renombre. Es el caso del Atlantic Pride, un evento único en Galicia que se celebra del 7 al 14 de julio. Este festival es una propuesta artística y cultural que busca ser un elemento de transformación de la sociedad a favor de la igualdad y la no discriminación. La diversidad logra una gran visibilización en la ciudad gracias a actuaciones de artistas y grupos como Nebulossa, Raúl, Chanel, Luna Ki, Rosa López, Las Ketchup, Mondra, Lontreira o Sila Lua, entre otros.
Pero durante este mes habrá más opciones de ver a grandes artistas. El Festival Internacional +QJazz trae consigo a artistas de renombre dentro del panorama jazzístico como Tia Carrol o Christian McBride Quintet; mientras que los amantes de la música electrónica podrán vibrar el fin de semana del 14 de julio en el Wake Up and Dream gracias a Ben Sims, Nina Kravitz o Marco Carola entre otros.
Sin olvidarnos, por supuesto, de los conciertos más personales de Ricky Martin o Juan Luis Guerra, que estará acompañado de Gilberto Santa Rosa, así como de grandes festivales como el Morriña Fest o el Festival Noroeste.
A Coruña, sabor atlántico internacional
Pionera en la gastronomía atlántica, la cocina coruñesa se caracteriza por usar la mejor materia prima y técnicas vanguardistas que hacen de cualquier plato un manjar. Sin embargo, esto no eclipsa la cocina tradicional, que sigue triunfando al ofrecer las mejores carnes, mariscos y demás productos de proximidad.
Reza el refranero popular que 'en la variedad está el gusto' y en A Coruña este dicho se entiende a la perfección. Restaurantes con Estrella Michelín o Sol Repsol, vinotecas para degustar los mejores licores gallegos, tabernas con tapas míticas, casas de comida tradicional… A Coruña siempre ha sido una ciudad en la que comer bien y experimentar cada plato desde el principio y hasta el final es un hecho.
La ciudad, además, destaca por ser una urbe abierta a los nuevos sabores. Así, cada vez es más frecuente acudir a restaurantes de fusión o enfocados en las gastronomías del mediterráneo o de oriente.
La ciudad verde
Si te gusta la naturaleza y eres amantes de los espacios verdes, en A Coruña encontrarás rincones llenos de paz. El parque del Monte de San Pedro es una nuestra primera recomendación. Con más de 70.000 metros cuadrados y ubicado a más de 100 metros sobre el nivel del mar, podrás poner la ciudad a tus pies al encontrarte en uno de los miradores naturales con las mejores vistas. Destacan también los icónicos cañones Vickers apuntando al mar, un recuerdo de lo que antaño fuera el espacio de ocio: la antigua batería de costa.
Y si hablamos del parque del Monte de San Pedro, también debemos nombrar el de Santa Margarita, otro de los pulmones de la ciudad. Con más de cinco hectáreas, cuenta con varios servicios como un anfiteatro al aire libre, un área canina y la Casa de las Ciencias. Esta última es la joya de la corona, ya que en su interior de encuentra el Planetario, donde es posible aprender sobre física o astronomía. Un lugar que maravilla tanto a adultos como niños.
Finalizamos con el parque escultórico de la Torre de Hércules. Este área de 47 hectáreas es un museo al aire libre donde conectan la naturaleza y la historia con creaciones de mitos como el combate entre Hércules y Gerión, los Guardianes, la Hidra de Lerna o el propio Breogán.
Patrimonio Mundial
Por mar, tierra y aire. La Torre de Hércules, el faro romano más antiguo del mundo y que todavía sigue en funcionamiento, puede verse desde diferentes localizaciones y perspectivas, aunque, sin duda, una de las preferidas por los turistas es desde su interior, lleno de vestigios del imperio romano, historia y cultura.
Construida entre finales del s.I y comienzos del s.II, durante el imperio romano, por un arquitecto de Coímbra de nombre Caio Sevio Lupo, el revestimiento exterior actual es obra de Eustaquio Giannini y data del s. XVIII. Está situada en la costa norte de la península coruñesa y bajo sus más de 50 metros de altitud se encuentra la Rosa de los Vientos, una plaza a los pies de la Torre con forma de rosa náutica.
Esta figura describe un círculo de 25 metros de diámetro. Construida como un mosaico, está elaborada con granito, pizarra y cerámica vitrificada. Cuenta con ocho agujas que indican los puntos cardinales y contiene los símbolos que identifican a las naciones celtas: la vieira, Galicia; la calavera, Tarsis; el trébol, Irlanda; el cardo, Escocia; el trisquel, la isla de Man; el dragón, Gales; el cáliz, Cornualles; el armiño, Bretaña.
La Torre de Hércules es Patrimonio Mundial desde el 27 de junio de 2009. De hecho, este año se han programado diferentes actividades lúdicas, culturales y musicales para celebrar esta efeméride.