Esta semana ha tenido lugar la feria Seatrade Cruise Global, que anualmente se celebra en Miami, y donde se dan cita los principales agentes de la industria crucerística: navieras, puertos, destinos, turoperadores, consignatarios, medios especializados y un amplio etcétera, se reúnen en la feria anual más importante del sector. Una feria en la que cada asistente puede tener distintos objetivos, pero el más importante, y seguramente común a todos ellos, es hacer negocios y estar en contacto con los agentes clave de la industria para conocer novedades, tendencias y cambios del mercado global.
Las escalas de cruceros se trabajan con unos dos años de antelación. Para poder comercializar un itinerario, las navieras tienen que posicionar los distintos barcos que tienen en el mercado, atendiendo a las demandas de su público potencial: los cruceristas. Lo que demanda el mercado español no es lo mismo que lo que demanda el público británico o el alemán, aunque todos tengan la misma filosofía: disfrutar de unas merecidas vacaciones donde pasárselo bien.
Las navieras seleccionan los puertos en función de los itinerarios y el destino final que quieren promocionar, y van haciendo escalas intermedias en función de los tiempos de tránsito, el coste del combustible, las ofertas de excursiones que el destino ofrece, y un amplio etcétera.
El puerto de A Coruña es uno de esos puertos de escala o de tránsito a los que me refiero. Aunque hemos acogido algunas operaciones en régimen de embarque, como puerto base, en el año 2011 y 2012, estas operaciones suelen realizarse en puertos de donde parten itinerarios en circuito cerrado, y donde las navieras se aprovisionan de víveres, de combustible,… Son puertos donde existe un mercado potencial mayor, para poder llenar los barcos con miles de pasajeros cada vez que empieza un nuevo crucero, y donde sobre todo, existen unas buenas conexiones aéreas a nivel internacional y un gran potencial de alojamiento turístico para los cruceristas que embarcan desde otras ciudades. Barcelona y Palma de Mallorca son claros ejemplos de puerto base a nivel estatal.
Así las cosas, las previsiones para el año 2022 en el puerto de A Coruña son muy alentadoras, si bien se han producido más variaciones de lo habitual en el número de escalas, motivadas por la situación socio-sanitaria de la que veníamos, que implicaba la aplicación de protocolos sanitarios más estrictos que en otros países, y eso ha hecho que algunas navieras se decantasen por modificar sus itinerarios, afectando a algunas cancelaciones.
A día de hoy, el calendario de este año arroja unas 150 escalas, con importantes novedades. Se prevé que los pasajeros totales anuales superen la cifra histórica registrada en 2017, donde se superaron los 180.000 pasajeros, teniendo en cuenta que algunos barcos viajan por debajo de su capacidad máxima de ocupación, y se van adaptando a los requerimientos establecidos por las autoridades sanitarias, en cuanto a protocolos y medidas en constante evolución.
Algunos barcos nuevos han hecho o harán escala en el puerto este año 2022. Destacan por ejemplo las recientes escalas del Valiant Lady, de la naviera Virgin, propiedad del multimillonario empresario Richard Brandson. Se trata de un barco con capacidad para 2.800 pasajeros y 1.150 tripulantes, que cuenta con una eslora de 278 metros. Este barco está pensado sólo para adultos, donde los cruceristas pueden disfrutar de una variada y diferente oferta de ocio a bordo. Desde un estudio de tatuajes, un club de playa privado ambientado en las Bahamas, el teatro The Red Room, un karaoke modernista de estilo japonés o un restaurante tipo laboratorio (que es tanto escuela de cocina como restaurante). Nada de buffet libre para evitar desperdicios de comida, siguiendo la política de sostenibilidad de la naviera. El barco cuenta también con gimnasio con una pista de carreras al aire libre.
Se trata del segundo barco de Virgin, tras el Scarlet Lady, que comenzó a navegar el pasado mes de octubre en el Caribe, estrenando el concepto de ‘lujo rebelde’, con un barco inspirado en los megayates, que operará fundamentalmente por el Mediterráneo, aunque está previsto que vuelva al puerto de A Coruña el próximo 4 de mayo.
En contraposición con este barco de “Adults Only”, está previsto que el próximo 27 de julio haga escala en el puerto de A Coruña por primera vez en su historia, la popular y familiar naviera Disney, tras haberse cancelado la escala prevista para el pasado mes de septiembre por la pandemia del coronavirus. En este caso, lo hará con el Disney Magic.
El barco cuenta con un ultra veloz tobogán de agua AquaDunk, un restaurante con temática brasileña, zonas de juegos de agua reimaginadas y clubes para los niños, así como un centro nocturno para adultos.
Este año la naviera Aida Cruises será la que más veces recale en el puerto de A Coruña, con una previsión de 20 escalas, con algunos barcos novedosos en el mercado, como el Aida Cosma que nos visitó recientemente, y que es uno de los más grandes del mercado, con 337 metros de eslora (longitud).
Repiten escala otros frecuentes visitantes, como los espectaculares Britannia, de P&O y el Anthem of the Seas, de Royal Caribbean, que destaca por su elevador North Star; una cápsula de observación que permite disfrutar de unas vistas de 360 grados y que ha sido ganadora del récord Guinness del mundo en la categoría de cubierta de observación más alta de un crucero, y contempla las imponentes vistas a más de 91 m por encima del nivel del mar.
Dejando al margen las impresionantes características de los barcos que nos visitan este año, conviene destacar también que el calendario arroja 30 días de escalas múltiples, de las cuales 23 son dobles y 7 triples.
Las operativas de cruceros múltiples a las que me refiero requieren una concienzuda planificación, ya que habitualmente demandan la utilización de más de un muelle y eso implica coordinar la operativa para el traslado de pasajeros entre terminales o la disposición de otras terminales donde poder realizar los controles requeridos (recordemos que en la operativa portuaria intervienen un gran número de agentes, entre ellos, Policía Nacional, Guardia Civil, etc).
Otra de las novedades de este 2022, que se ha compartido con las compañías navieras, es la paulatina apertura de espacios portuarios al uso ciudadano, en concreto, en lo que se refiere a los muelles de Batería y la de Calvo Sotelo que se producirá próximamente, en cuanto se dejen de operar algunas de las mercancías que se mueven por dicha instalación, y para lo que ya hay un acuerdo para este verano. De esta forma, reorganizar los flujos de pasajeros, autobuses de excursión, y de toda la operativa portuaria a nivel de seguridad, y prestación de servicios al buque, es un reto en el que estamos inmersos y que se ha puesto en valor durante esta feria. Un total de 80.000 m2 que el ciudadano, y también el crucerista, podrá disfrutar en el corazón de la ciudad. Un nuevo espacio para realizar distintas actividades y donde plantearse nuevos usos. Un espacio diferente al del barco como destino en sí mismo, que esperamos que el turista sea capaz de apreciar y valorar.