Reconforta encontrarse con gente apasionada que trabaja para dejar una sociedad mejor en el momento actual de tanta crisis que nos golpea. Gente, por ejemplo, como la que conforma la Federación Gallega de Judo y con la que hemos compartido velada en su gala anual celebrada hace unos días en Sanxenxo.

Llevaban dos años sin hacerlo, por culpa de la pandemia, y por fin este 2022 los maestros de judo han podido volver a juntarse para entregar los cinturones de oro. En representación del Concello de A Coruña recogimos el premio otorgado como mejor Ayuntamiento-Concejalía de Deportes por la labor realizada durante el año 2021, un año marcado por la pandemia y por todas las dificultades que supuso para la práctica del deporte y realización de eventos. Aún con tantos obstáculos, en A Coruña fuimos valientes, siempre respetando los protocolos, facilitando y promocionando la práctica deportiva como solución a muchos de los problemas que nos ha generado el coronavirus.

Y que nos reconozca el deporte del judo nos hace especial ilusión porque desde la concejalía de deportes nos sentimos muy identificados con los valores que transmite esta disciplina, los ocho valores que conforman el código moral del judo:

amistad, autocontrol, cortesía, coraje, honor, modestia, respeto y sinceridad.

Valores que van conformando unas actitudes y acompañan a la práctica de un deporte, que es además una filosofía de vida que orienta a usar nuestra energía de la mejor forma posible. No sólo en beneficio del deportista, sino también en provecho de la sociedad.

Hay dos tipos de valores, los valores instrumentales que nos ayudan para conseguir nuestros objetivos, el coraje, la fuerza de voluntad, perseverancia, compromiso, disciplina, y también están los valores sociales, que nos orientan a lo que queremos ser en la vida, respetuosos, honestos, honorables. Si analizamos los valores del judo, sólo dos son instrumentales, orientados a hacer un mejor judo para vencer al adversario. Los otros seis están relacionados con nuestra actitud, respeto al adversario, al que te quiere tirar, quien te quiere vencer. El objetivo es el mismo, yo seré respetuoso intentando vencerte, o bien seré modesto aceptando el resultado que se produzca.

¿Podemos imaginar cómo serían las organizaciones, las empresas, grupos o gobiernos si nos guiamos a partir de estas actitudes y nos comportamos siguiendo estos valores?

En estos momentos de incertidumbre y de nuevos planteamientos, compartimos los valores del judo.

Gracias de todo corazón a la Federación Gallega de Judo por enseñarlos y aplicarlos, gracias por el reconocimiento a A Coruña como el mejor concello, por el reconocimiento también al Trofeo Miguelito a la mejor labor de promoción, y que este domingo celebra su 34ª edición. Y, gracias a nuestra alcaldesa Inés Rey por darnos la oportunidad de trabajar para dejar una ciudad mejor.