Cuando vas a sacar una fotografía te enfrentas a un gran reto o dificultad: la luz; sea cual sea tu máquina, tu objetivo o aparato con el que posicionarte delante de la foto, LA LUZ es la gran incógnita que condiciona todo.

En las empresas sucede lo mismo, sea cual sea el producto que vendas, el servicio que facilites, el objetivo a alcanzar o los recursos con los que cuentes, el gran reto al que te enfrentas son LAS PERSONAS; los equipos y los individuos que los forman son esa gran incógnita que lo condiciona todo.

Puedes tener el mejor objetivo o la mejor cámara, así como el mejor producto o los mejores recursos; debes poner el foco en la luz, debes poner foco en las personas.

Al sacar la gran foto, para resolver la incógnita de la luz podemos jugar con el famoso TRIÁNGULO DE EXPOSICIÓN, donde podemos trabajar con 3 aspectos para compensar el exceso o la carencia de luz y obtener la imagen de deseamos. Jugamos con la apertura del diafragma, la ISO y la velocidad.

En las empresas, para realmente estar enfocadas en las personas y obtener así de ellas su mejor versión en las que disfruten de su trabajo, lo sientan como suyo, luchen por sus objetivos, estén realmente “dentro” del proyecto, debemos trabajar con lo que denomino el TRIÁNGULO DE CONEXIÓN en los equipos: Reconocimiento, compromiso y comunicación. Trabajando estos 3 aspectos, conseguiremos como gerentes, líderes, managers o compañeros, generar un equipo que realmente enfocado a las personas, que como antes establecimos, son el gran reto de las compañías especialmente hoy en día (y hemos de decir, que siempre lo han sido).

Pongamos foco en cada uno de los 3 vértices del triángulo de las personas:

1. RECONOCIMIENTO. Una carencia absoluta de reconocimiento puede generar frustración, falta de compromiso y finalmente una “salida” inesperada de quien en ocasiones tiene talento. Debemos poner atención a aquellas personas clave en nuestras organizaciones que teniendo talento y compromiso sería un error perderlas por no agradecer ni reconocer su esfuerzo y contribución.

Un reconocimiento en exceso y no objetivo, puede favorecer la perversión o la mediocridad sobrevenida.

Es por ello que el reconocimiento, al igual que el parámetro de velocidad de tu cámara hay que ajustarlo debidamente, siendo muy justos, objetivos y racionales en el momento de trabajar con este aspecto.

2. COMPROMISO. Hoy en día el compromiso parece que puede compensarse al igual que la ISO, hoy en día las grandes marcas de máquinas de fotos e incluso nuestros móviles nos permiten trabajar con valores muy altos de ISO, pero la realidad es que utilizando esos valores tan altos perdemos una gran calidad en la imagen apareciendo el temido “ruido” en la fotografía. El ISO no es más que un artificio digital que en valores extremadamente altos produce un resultado indeseable.

El compromiso con las personas es algo no digital ni artificial, hay que moverse con delicadeza en este parámetro, entre valores muy ajustados para favorecer al máximo a la persona y su desarrollo.

Un excesivo compromiso con la persona puede llevar en ocasiones a perder el foco sobre el objetivo, pero lo que es peor, una falta de compromiso con una persona que forma parte de tu organización o equipo, puede provocar resultados indeseables.

Por tanto, el compromiso al igual que la ISO, debemos ser delicados con ella, movernos en valores super ajustados y no olvidar que siempre debe estar presente.

3. COMUNICACIÓN. El tercer vértice del triángulo del talento en las organizaciones, siempre debe estar presente, y no sólo eso, debemos trabajarlo continuamente, es el parámetro que ante pequeñas variaciones en positivo o negativo, más va a condicionar tu foto, más va a condicionar el buen fluir de tu equipo o persona. La comunicación es como la apertura del diafragma, cuanta más apertura, más luz; cuanto más cerrado, menos luz. Llevándolo a comunicación y personas, cuanto menor sea la comunicación interna, menor es la luz de los equipos. Por el contrario, cuanta mayor sea la comunicación, interconexión, interrelación personal… los equipos y sus componentes brillan más, fluyen más y se encuentran en lo que yo denomino “modo brilli-brilli”.

¿Quieres fotografías TOP? Juega con el triángulo de exposición para obtener el mejor resultado afrontando el gran reto de la luz.

¿Quieres equipos y personas TOP? Trabaja todos los días en el triángulo de conexión para obtener el mejor resultado afrontando el gran reto que supone la gestión de personas.