Bugallo avanza una regularización de los pisos turísticos en Santiago de Compostela

El alcalde de Santaigo de Compostela, Xosé Sánchez Bugallo, ha señalado esta mañana en rueda de prensa que están trabajando en un regularización de los pisos turísticos ante la entrada en vigor de las nuevas normas municipales.

El Ayuntamiento había aprobado una modificación del Plan Xeral de Ordenación Municipal, según la cuál obligaban a los propietarios de viviendas de uso turístico (VUTs) a limitar el desarrollo de su actividad en primeros pisos. Entonces los dueños de estos alojamientos se quejaron señalando que iba a provocar que fondos buitres se queden con esos inmuebles y saquen provecho de ellos, dejando una ciudad en la que cada bajo sean negocios.

Estaba mañana, a preguntas de los medios por las últimas decalraciones de los propietarios, Bugallo ha confirmado que desde el consistorio están trabajando en cómo regularizar a "unha parte nada despreciable" de los 600 pisos que existen en este régimen. "Ás que cumpran todos os requisitos que había no 2019, e estén operando, imos a habilitar unha vía para a súa regularización".

El titular del gobierno local ha evitado dar más detalles sobre cómo se hará esa regularización, pero ha señalado que quedarían fuera de la propuesta los ubicados en el casco histórico compostelano, porque "están afectadas polo Plan Especial da Cidade Histórica". Es más, ha precisado que tampoco sería posible porque los tribunales, ante un recurso presentado por la plataforma de propietarios Aviturga , ya han dictado que estas viviendas tendrían que estar en "edificios de uso exclusivo e que estivesen autorizadas para uso turístico".

Las nuevas modificaciones obligan a las viviendas turísticas a establecerse en los primeros pisos y plantas bajas de los edificios para evitar molestias a los vecinos del resto del inmueble. Los cambios, explicó el alcalde, también dejan que un piso pueda combinar el uso de alquiler tradicional con el alquiler turístico, destinándole a este último dos meses del año.

En este último punto, los parámetros también han cambiado, de tres a dos meses, ya que ahora es normal que los exámenes universitarios se produzcan también durante el mes de julio y de este modo se podría evitar que los propietarios "non expulsen aos estudantes no mes de exames", señaló Bugallo.