Santiago aprueba la licitación del contrato de los autobuses con una renovación de la flota

A apenas algo más de un mes para las elecciones municipales, se ha desatascado uno de los contratos más importantes para Santiago de Compostela. Los autobuses de la capital gallega tendrán una cara nueva previsiblemente a finales de este año, según ha avanzado el alcalde Xosé Sánchez Bugallo, tras la aprobación de la licitación del nuevo contrato este lunes.

La concesión del servicio estará vigente desde el 2024 hasta el 2036, y supondrá un coste total de 86 millones de euros. El retraso del contrato, provocado de acuerdo con el regidor por el colapso de viajeros durante la pandemia, la necesidad de incorporar vehículos eléctricos a la flota o la obligación de entregar los pliegos a la Oficina Nacional de Evaluación ha tensionado a usuarios del transporte público de la ciudad, que han denunciado numerosas incidencias en los últimos meses.

Las empresas interesadas tendrán ahora 40 días para presentar sus ofertas, que tendrán que incluir la renovación completa de una flota con 58 autobuses, 13 de ellos eléctricos y 45 de cero emisiones. La adjudicación del contrato estará en manos de la próxima corporación municipal, pero es previsible que a finales de año comiencen a ver circular los nuevos vehículos por las calles compostelanas. La concesionaria tiene entonces dos opciones o bien entregar los buses en un año o durante el mismo periodo ir sustituyendo la flota actual con unos con siete años de antigüedad como máximo.

La renovación de esta flota vendría también acompañada de un nuevo diseño en el mapa de líneas y frecuencias. Los centros de trabajos, los polígonos industriales y la conexión entre los Campus Sur y Norte. Junto con este nuevo contrato, Bugallo también adelantó ayer una propuesta para un proyecto piloto con minibuses que diesen servicios a las zonas rurales de la ciudad. De esta forma, la red de transporte eliminaría solapes, para evitar que dos buses con partes del recorrido iguales acaben usando los mismos viales. Está también prevista una línea lanzadera, con servicio directo entre el aeropuerto y la estación Intermodal.

Durante la rueda de prensa esta mañana tras la junta de gobierno local el alcalde ha demostrado su satisfacción porque esta prioridad saliese adelante. "Por fin", comentó a preguntas de los medios. "Este contrato foi unha carreira de obstáculos". El regidor compostelano no negó las dificultades de sacar adelante el nuevo servicios, sobre todo a raíz de los incrementos de tipos de interés en el último año, que obligó a ampliar la concesión del servicio para evitar una subida del coste.

"Dos seis grandes contratos de este concello, catro están contratados. Tres están en servicio, o cuarto, que é o de suministro eléctrico e toda a iluminación está xa adxudicado e previsiblemente implementado na súa totalidade a final de ano", señaló Sánchez Bugallo. "O único que está atascado é o da auga e o do saneamento". La incapaz de poder realizar avances en este último es, según el alcalde, responsabilidad de Compostela Aberta y BNG, que han tomado una decisión "obstruccionista e puramente política" de rechazar en Pleno el que había puesto sobre la mesa el equipo de gobierno.

Renovación en el Pazo de Raxoi

Durante la Junta de Gobierno local también se ha aprobado el Plan Director para el Pazo de Raxoi. El documento prevé todo tipo de actuaciones para la renovación y rehabilitación del consistorio y cuenta con un presupuesto de unos 20 millones de euros.

Ahora mismo el edificio histórico está sufriendo una rehbailitación de la facahdad en la plaza del Obradoiro, después de haber cambiado por completo las cubiertas durante el 2022. La redacción del poreycto apra la mejora de la seguridad y accesibilidad del inueble está teniendo lugar en estos momentos después de licitanrse por unos 3 millones de euros.

El alcalde ha explicado que las características del consistorio "de un valor patrimonial e histórico enorme" obliga a hacer estas acciones paso a paso, ante el enorme coste que supone llevarlas a cabo.