Así votó Santiago de Compostela el 28M: El centro es del PP y el norte, del BNG

Pocas imágenes retratan tan bien desplome de los socialistas en Santiago de Compostela como el voto por barrios. Un plano teñido de rojo ha pasado al color azul propio del PP en casi todo el término municipal, con un BNG fuerte como segunda fuerza en la mayoría de los distritos de la ciudad. Los de Goretti Sanmartín, sin embargo, se erigen como los ganadores en la zona norte de la capital, en los distritos de San Caetano.

Lo más llamativo del cambio del mapa la pérdida de los socialistas lo podemos situar en los barrios sur de Santiago. Santa Marta, Sar e incluso ciertas zonas de Conxo, todos han optado por los populares como primera fuerza en esta ronda de comicios frente a la opción encabezada por el actual alcalde Xosé Sánchez Bugallo que, tras los resultados, se ha hecho responsable de la debacle y ha elegido renunciar como secretario xeral del PSdG.

El PP gana en el Ensanche y PSOE sólo en dos secciones de Fontiñas

Tanto el Ensanche como la zona histórica se mantienen como los feudos fuertes del PP en la capital gallega, aunque mucho más movilizados en esta ronda electoral que en el 2019. El domingo pasado los electores dieron entre el 45% y el 60% del apoyo a la candidatura de Borja Verea. No sorprende demasiado, estas secciones censales son también las que destacan por el alto nivel de renta de sus habitantes. Al contrario que la mayoría de la ciudad, estos votantes prefieren como segunda opción al PSOE, que consiguió aglutinar entre el 15% y el 20% del voto en este barrio.

El partido del actual regidor tan solo aguanta en dos secciones censales, ambas en Fontiñas, aunque pierde apoyos también. El resultado se debe, sobre todo, a la bajada en participación de ambas zonas, donde la abstención subió unos cinco puntos en las calles de Concheiros y Rúa de Berlín y un 0,6% en el entorno del Hotel San Lázaro.

Desplome de Compostela Aberta como segunda fuerza

El mapa electoral de este domingo también nos deja con una imagen clara del desplome de Compostela Aberta. Mientras que en los anteriores comicios se habían posicionado en segunda posición en calles donde había ganado Bugallo, hoy pasan a cuarta fuerza en casi todos ellos.

La correlación de fuerzas abre un nuevo ciclo tras este de 28 de mayo y la batalla central se centra en el enfrentamiento entre Borja Verea y Goretti Sanmartín. Los resultados pueden ser una imagen de la próxima pugna por la Xunta, algo que finalmente ocurrirá en 2024 después de que el presidente Alfonso Rueda descartase ayer hacer coincidir las generales con las autonómicas.

Los nacionalistas se sitúan como segunda opción en todo el casco histórico y adelantan a los populares en zonas como Virxe da Cerca (precisamente sujeta a una de las grandes propuestas de Verea: el enterramiento de la vía).

El rural compostelano se mantiene a favor de los populares

Aunque si bien es cierto que la mayoría de la población de la capital se concentra en la parte urbana, la extensión del municipio se extiende a varias parroquias rurales como Lavacolla, Aríns, Laraño o Bando. En la mayoría de ellos los populares eran sino los ganadores, una cercana segunda opción apra muchos vecinos. Tras estos comicios, consolidan sus apoyos.

En Angrois, por ejemplo, los socialistas confirman su desgaste y pasan de primera a tercera fuerza. Allí el voto se reparte casi igualado entre PP, BNG Y PSOE, aunque siempre con una ventaja clara de los de Verea. Los de Bugallo pierden también la parroquia de Figueiras, en la que finalmente no han podido convencer ni al 20% de los vecinos.

En Bando, que también se tiñó de azul en 2019, los populares amplían su porcentaje de voto de manera clara, al igual que en el entorno de A Sionlla. En Lavacolla, donde Compostela Aberta se había posicionado como segunda fuerza en 2019, finalmente es sustituida por le BNG. Es llamativo también que el PSOE no consiga en este distrito ni tan siquiera la cuarta posición. Los de Bugallo, en su lugar, son sustituidos por la formación ultraderechista de VOX, que consiguió cinco votos más.