"Hola, buenos días. Somos del Concello de Santiago y estamos haciendo una campaña para concienciar sobre Santiago y su turismo". Con esta frase se presentan los doce informadores turísticos que desde el pasado viernes 23 recorren las calles del casco histórico de la ciudad con el objetivo de fomentar buenas prácticas entre los peregrinos y visitantes y lograr así una convivencia armónica.
Divididos por parejas, los informadores salen cada día a la calle equipados con sus mochilas, sonómetro y con la tablet en mano, situándose en los principales puntos de entrada de los diferentes Camino de Santiago. Desde Quincemil hemos acompañado a dos de estos informadores, Hugo Caamaño y Patricia Parafita, para conocer de primera mano cómo es su trabajo.
"Nosotros no advertimos ni vigilamos, concienciamos de que hay que respetar el entorno y, sobre todo, a los vecinos", explican ambos. Entre sus funciones está la de dar a conocer a los visitantes otros puntos de interés turístico más allá de la zona vieja. Los comecios del Ensanche, los parques y museos o la ruta rosaliana son algunas de sus recomendaciones.
También realizan encuestas para conocer el perfil de turista que llega a Santiago, con preguntas sobre su lugar de procedencia, cuántos días se quedarán en la ciudad, tipo de viaje o tipo alojamiento. Además, explican la campaña que están llevando a cabo y que pone el foco en comportamientos incívicos de algunos grupos de turistas.
"Nos llaman 'los del silencio'"
El balance de estos primeros días está siendo positivo, aunque ya cuentan con varias anécdotas, entre las que destacan a aquellas personas que se refieren a ellos como 'los del silencio' o incluso los que se acercan para preguntarles si pueden gritar.
No obstante, señalan que están siendo días tranquilos. "La gente es bastante respetuosa y los comportamientos incívicos no se suelen dar, son casos puntuales", explica Patricia Parafita, quien apunta que incluso muchas personas les agradecen las recomendaciones que hacen de sitios que visitar.
Aún así, reconocen que hay cierto equilibrio entre los turistas que están dispuestos a escucharlos y los que los evitan. "Nos confunden con gente que intenta venderles algo", comenta Hugo Caamaño.
¿Qué opinan los turistas?
A lo largo de la mañana de este miércoles, la pareja de informadores se ha acercado a peregrinos y turistas que llegaban a Santiago desde diferentes puntos de España, desde Portugal o Ucrania. Todos coincidieron en ver con buenos ojos esta medida. "No tengo planeado hacer mucho ruido, haré un turismo tranquilo", explicaba un joven ucraniano que visitaba por primera vez la capital gallega junto a su familia.
Opinión que compartió otra turista, quien ha destacado la importancia de "pasarlo bien pero sin perjudicar a otros". "Debe ser la conciencia de cada uno de los que venimos aquí, de comprender que la gente necesita tranquilidad, no esos escándalos".
"Se trata de ser respetuosos y de portarte como lo haces en tu casa", apuntaba una pareja de valencianos que llegaba a Compostela tras finalizar el Camino de Santiago. Pese a no ser su primera vez en la ciudad, agradecieron las recomendaciones de Hugo y Patricia: "Nos explicaron que hay otras cosas que ver y nos concienciaron de no levantar demasiado los decibelios".